Teacher / Jenlisa

Empatía

Lisa caminaba por las calles de la ciudad para regresar a su casa, lastimosamente las llantas de su bicicleta las había encontrado desinfladas esta mañana, entonces después de clases tuvo que regresar caminando, pero en la mañana su madre le hizo el favor de llevarla a la escuela.

Sus manos sostenían las tiras de su bolso mientras caminaba, pero esta paró sus pasos y alzó su vista al escuchar gritos en la calle siguiente.

-¡Quítese del camino!-gritaba un hombre completamente enojado mientras presionaba el claxon del auto

En la mitad de la calle se encontraba un anciano que miraba a todos lados como si estuviera perdido, habían muchos autos esperando que el señor de mayor edad pasara pero este no se movía del camino. El semáforo ya estaba en color verde, indicando que los autos podían pasar, algunos autos pasaban como si nada esquivando al anciano y otros solo se quedaban ahí estacionados esperando a que este diera el paso.

-¡Oye! ¡tengo que ir a trabajar, quítese del maldito camino!-gritó el hombre que presionaba el claxon repetidas veces

El señor solo se mantenía mirando a todos lados completamente asustado, su rostro reflejaba miedo y frustración, se veía muy desconcertado.

-Maldita sea.-bufó el hombre bajándose del auto para quitar al anciano de la mitad de la calle una vez que el semáforo se puso nuevamente en rojo.

-Necesito regresar a mi casa...ayúdeme..-dijo el anciano al hombre que se acercaba, lo veía como una salvación a su problema pero este era todo lo contrarío.

-Muévase.-decía el hombre con traje tomando al anciano de los hombros bruscamente para comenzar a empujarlo

-Por favor, ayúdeme..-decía el anciano mirando suplicante al hombre que lo intentaba arrastrar a la fuerza.

Lisa no aguantó más y salió corriendo hacia la mitad de la calle para ayudarlo.

-¿Que cree que está haciendo? tenga respeto.-dijo Lisa alejando las manos del hombre bruscamente de los hombros del señor

-¿El es tu abuelo? sácalo de aquí, no le está permitiendo el paso a todas estas personas.-dijo el hombre

-¿Acaso no ve su rostro? se nota a metros que está perdido, les hace falta empatía.-dijo Lisa frunciendo su ceño

Por otro lado, una castaña estacionaba su auto detrás de todos los autos que estaban esperando que se abriera el paso para las siguientes calles.

-¿Que está sucediendo?-se preguntó la castaña al no poder ver nada, Jennie notó que las personas estaban viendo un punto en común y se escuchaban algunos gritos.

Jennie se bajó de su auto y al poder ver de quien se trataba abrió sus ojos sorprendida.

-Si, lo que sea, voy llegando tarde a una reunión muy importante por culpa de ustedes, quítense de una jodida vez.-dijo el hombre empujándola y Lisa soltó una sarcástica carcajada.

-Claro, con mucho gusto lo haré.-dijo Lisa divertida para después darle una fuerte patada al hombre en su entrepierna.

El hombre abrió su boca y frunció su ceño reflejando dolor, este cayó de rodillas al suelo mientras cerraba sus ojos sintiendo un fuerte dolor en su entrepierna.

-¿Y si el fuera su familiar? ¿También lo trataría como una mierda?-preguntó Lisa tomando el cabello del hombre con su mano para después jalarlo con fuerza

El hombre gimió de dolor por la fuerza que ejerció Lisa en su cabello y alzó su rostro mirándola fijamente.

-Personas como usted me dan tanto asco.-dijo Lisa mirándolo con desprecio