-Maldición...-susurraba Lisa cansada mientras cargaba a Jennie en su espalda.
Lisa había tenido que traer a la castaña a su casa, pero lastimosamente no encontraron un taxi, así que la pelinegra decidió cargar a Jennie ya que no se encontraban tan lejos. Era la una de la mañana y las dos mujeres al fin llegaban a la casa.
-Jen, llegamos....dame las llaves de la puerta.- dijo Lisa toda agitada mientras Jennie se abrazaba plácidamente a esta
La castaña ya no estaba tan ebria, esta había vomitado todo el alcohol unas calles atrás encima de la camisa de Lisa.
-Tengo dolor de cabeza...-susurró Jennie en el oído de la pelinegra mientras introducía su mano en su bolsillo para sacar la llave.
-Toma.- dijo Jennie finalmente entregándole la llave a su estudiante
Lisa tomó la llave y rápidamente la introdujo en la cerradura para abrir la puerta con su pie de un tirón.
-Ummmgh..- susurró Jennie adormilada mientras Lisa la dejaba caer en el sofá con cuidado.
La pelinegra cerró la puerta y soltó un gran suspiro mientras veía a su profesora pensando en cómo pudo emborracharse en un día de semana.
-Lisa...perdón por esto.- dijo Jennie
-No te preocupes...solo espero que el mesero no nos denuncie.- dijo Lisa divertida y Jennie sonrió
-Tu camisa..-dijo Jennie señalando la gran mancha de vomito que portaba la pelinegra en su vestimenta
-Tranquila....esto se puede limpiar.- dijo Lisa y Jennie se levantó del sofá acercándose a esta un poco mareada.
-Yo la limpiaré..- dijo Jennie decidida a quitarle la mancha a la camisa
Jennie llevó sus manos a los botones de la camisa de Lisa y comenzó a desabotonarlos lentamente gracias a su dolor de cabeza.
Lisa miraba a todos lados intentando no pensar nada obsceno.
Jennie logró desabotonar todos los botones de la camisa pero sus ojos se fijaron en los abdominales de su estudiante quedando embobada.
-¿Que estás haciendo Jennie Kim?- preguntó Lisa divertida al ver a su profesora pasar sus pequeñas manos por su marcado abdomen.
-¿Por qué tienes que ser tan perfecta?- preguntó Jennie alzando su mirada para verla directamente a los ojos
-Si me miras así....creo que perderé el control.- confesó Lisa perdiéndose en sus expresivos ojos
-Yo perdí el control hace mucho tiempo.- susurró Jennie posicionando sus manos en las mejillas de Lisa para después ponerse en puntitas y dejarle un beso en sus labios.
El cuerpo de Lisa se quedó rígido de la impresión, Jennie se había separado un poco completamente apenada al ver que la pelinegra no había respondido a su beso.
En los pensamientos de Lisa se encontraba Yuna, no quería lastimarla, pero su corazón y su cuerpo respondían a la castaña que la miraba con un notable nerviosismo en este momento.
-Lisa...yo..- iba a decir Jennie dispuesta a disculparse pero Lisa la silenció uniendo sus labios nuevamente.
Lisa posicionó una mano en la nuca de la castaña y su otra mano en la cintura mientras Jennie dejaba descansar sus manos sobre la clavícula de esta.
Jennie sintió como Lisa la atraía a su cuerpo con su mano firmemente en su pequeña cintura. Había algo en Lisa que la volvía loca, su forma de ser encajaba perfectamente con ella.
Lentamente comenzó a sentir algo cálido y líquido entre las piernas al tener las inquietas manos de Lisa sobre su cuerpo.
Sus pechos se chocaban y el calor entre ambas estaba creciendo en esas cuatro paredes.
Lisa también comenzó a sentir esa sensación entre las piernas, sus pensamientos se dispersaban dejando a su mente en blanco, pero completamente concentrada en todo lo que estaba sintiendo.
Jennie golpeó su espalda contra la pared sin dejar de besarla ni un segundo a la vez que su camisa era lanzada lejos de ellas, Lisa la había empujado inconscientemente sintiendo que le quedaba poco aire en sus pulmones.
Lisa apretó la cintura de Jennie reteniendola entre su cuerpo y la pared dejándola sin escapatoria.
Jennie apartó de un tirón la camisa desabotonada de esta dejandola en su top deportivo, la castaña gruñó al sentir la calida y húmeda boca de Lisa en su cuello, succionando y dejando besos que hicieron que soltara un pequeño gemido entrecortado.
Jennie gimió al sentir un tirón entre sus muslos y una oleada de calor, su cuerpo se contraía por momentos suplicando contacto.
-¿Sabes lo que estas haciendo? Me siento...tan débil cuando me tocas...-Susurró Jennie entre besos
-¿En serio?- preguntó Lisa divertida mientras apretaba levemente el trasero de su profesora con sus dos manos, claro que sabía lo que provocaba en ella.
Los celos se apoderaron de Jennie con el simple hecho de pensar en que esta ha estado practicando con Yuna.
Las manos de Lisa se deslizaban por el abdomen de Jennie bajando lentamente hacia el cierre del pantalón para quitárselo.
La castaña se dejó llevar por sus pensamientos y alejó bruscamente las manos de Lisa de su cuerpo.
-No me toques, tus manos están sucias de ella.- dijo Jennie enojada
-¿Qué?- preguntó Lisa confundida
-Tienes novia Lisa.- justificó Jennie
-Tú me besaste.- atacó Lisa
-Y tú me seguiste.- contratacó Jennie
-Yo no siento nada por ella.- dijo Lisa intentando acercarse nuevamente
-Pero estas con ella y ese es el maldito problema.- bufó Jennie alejandola y Lisa soltó un suspiro frustrado.
-¿Quieres que me vaya?- preguntó Lisa
-Es demasiado tarde.- dijo Jennie siendo consiente de que son las 2 de la mañana.
-¿Entonces?- preguntó Lisa confundida
-Yo iré a dormir.-dijo Jennie comenzando a caminar hacia su habitación y Lisa comenzó a seguirla.
-¿Por que me sigues? Tu no vienes conmigo.- dijo Jennie parando sus pasos al frente de la puerta
-Pero..-iba a decir Lisa
-Al sofá.- interrumpió Jennie rápidamente
-¿Al sofá? ¿Quieres que duerma en el sofá?- preguntó Lisa
-Buenas noches.-dijo Jennie entrando a su habitación y cerrando la puerta en el proceso sin escuchar los reclamos de Lisa.
-¡¿Esto es en serio?! Se enoja conmigo por algo que ella comenzó.- bufó Lisa caminando hacia el sofá completamente derrotada.
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Teacher / Jenlisa
FanfictionEnamorarse de alguien mayor nunca estuvo en la lista de Lisa, pero cuando vio a su nueva profesora de matemáticas, todo cambió.