Los caballeros de la realeza nos llevaron hasta un pueblo en donde se alzaba lo que parecía ser un tallo gigante, como el de los cuentos de hadas.
Debido a mi mochila, usaba más espacio y apretaba más en en la extraña red. Durante todo el viaje, pude ver como los ex matones de Tommy se habían redimido de sus actos.
Al bajar, podía ver en el rostro de los niños y por sus gritos que conocían el lugar y a sus habitantes.
— ¡Mamemon! — grito el de camisa amarilla y corrió a ayudar a los pequeños digimons.
A decir verdad era bastante nostálgica la aldea, me recordaba a la aldea de los Floramons.
Me acerqué a tocar a uno, eran tan pequeños que podría esconder uno en mi mochila y nadie lo notaria.
"No, no, no. Concentrate Mai, aunque no estén Koji o Koichi para regañarte no quiere decir que puedas hacer ese tipo de cosas. Se supone que eres madura has superado muchas cosas, no puedes tirar todo tu desarrollo como personaje a la basura solo por calmar tu curiosidad sobre si cabe un Mamemon en tu mochila"
Respire hondo y me voltee hacia los demás solo para percatarme de que estaban siendo capturados otra vez. Tome a 2 Mamemons en brazos para esconderme mientras los demás gritaban.
Si me escondía, luego podía ayudarlos desde el exterior, pero Tommy tenía que gritar mi nombre en cuanto me vio intentando esconderme.
—¡Mai, ayúdanos!— Tommy movía sus pies y manos intentado liberarse de los caballeros de la realeza, quienes se percataron de mi plan y me tomaron de la mochila, con mis manos ocupadas por los digimons heridos no podía soltarme, por lo que fui lanzada junto a los demás niños a una especie de cárcel.
— Demonios nos han encerrado— se quejó el chico de la camisa amarilla, así es aún no me sabia sus nombres. Eran personas abusivas, por lo que mi mente no quiso retener sus nombres.
— Ellos son los caballeros de la realeza y están al servicio de Lucemon— dijo Tommy saltándose de los barrotes.
—Debiste haber gritado un poco después Tommy— me queje— tenia el plan perfecto para liberarlos desde el exterior.
— Lo siento, pero en esos momentos no pensé con claridad y pedí ayuda para crear un plan entre ambos.
— ¿Alguno sabe a que se refería ese sujeto?— preguntó el chico de camisa amarilla, pero todos negamos.
— Pero si es Katsuharu— dijo una voz desde la oscuridad de la celda. Eran otros Mamemons y uno de ellos parecía ser el sabio de la aldea. Me recordaba al sabio de la aldea de los Floramons.
— ¿Qué es lo que ha sucedido patriarca?— aquel chico se arrodilló para estar a la altura de los digimons.
— Los caballeros están obsesionados con que ustedes saben la existencia de la llave— mientras el patriarca era atacado con mini preguntas de parte de los demás niños baje a los Mamemons que tenía en brazos para que se reencontraran con sus amigos y los vi alejarse para llegar hasta su lado felices— Pues verán hay un antiguo relato que ha existido a través de generaciones en los Mamemons, dice asi— se aclaró la voz para proseguir— aquel gran tallo que crezca con el resplandor del sol brindará frutos y prosperidad a nuestra aldea. Nuestro pueblo hizo un largo viaje para llegar a esta zona tan seca y convertirla en nuestro hogar. Tuvimos una difícil vida usando todas nuestras reservas, hasta que cierto día Katsuharu y sus amigos pasaron por la aldea, fue cuando decidimos usar las últimas habichuelas para tratarlas. Cuando nos despedimos, las que fueron sembradas por ustedes crecieron de la noche a la mañana, fue increíble como un milagro.
ESTÁS LEYENDO
La nueva elegida (Digimon Frontier)
FanfictionQue pasaria si ¿el digi espirit del agua se hubiera dividido en dos?, la parte buena y la maligna que seria Ranamon. Descubramoslo con nuestra nueva Digielegida, Mai y su viaje al digimundo.