La nueva elegida (Digimon Frontier)

XVIII: La carrera de los Trainmon

Todo estaba en completo silencio entre nosotros, siendo el único ruido el del Trainmon, aquella noche que la pasamos viajando muchos durmieron como nunca mientras que otros se limitaban a pensar, ese era mi caso pensaba en todo lo que me había dicho Koji y además en la historia que Plesiomon nos había contado.

Acaso...una vez que el guerrero legendario de la oscuridad aparece, algo cambiara respecto a Mermaimon, después de todo sus sentimientos por el debieron de ser muy fuertes como para ir al campo de batalla y fusionarse con tal de estar junto a él.

Me acurruqué junto a Neemon para dormir un poco lo cual conseguí.

Estaba en la entrada de la estación cerca de mi escuela y choque con aquel niño que otras veces a aparecido en mis sueños, al caerse su gorro distinguí cierto parecido a alguien que conozco, se disculpó mientras ayudaba a levantarme y al tomar mi mano tuve el presentimiento de que algo similar ya había vivido, parecía estar apurado así que una vez que estuve de pie se fue corriendo apurado en dirección a la estación.

Iba a seguirlo cuando un sentimiento molesto me despertó Neemon me estaba picando la mejilla a la vez que decía que todos estaban despiertos.

Todos miraban sus digivice mientras hablaban con sus digiespirt, Voy a intentarlo.

- Mermaimon, Plesiomon juntos vamos a volvernos muy fuertes y reconstruir el digiespirt del agua, haremos que Ranamon junto a Calmaramon entren en razón.

Le sonreí a mi digivice observando la imagen de cada una de ellas.

-Que linda es Mermaimon...

Susurré bajo a lo que solo fui escuchada por Neemon, quien asintió.

De repente entro un digimon que parecía tener una gorra de pan de hamburguesa con un carrito con comida.

- ¿Alguien quiere comprarme desayunos?

- Yo.

Zoe se levantó de su asiento.

- ¿Y tienes dinero para pagarlo? -la cuestiono Takuya.

- No, pero...

Busco entre sus bolsillo a lo cual resignada suspiro mientras su estómago gruñía.

- ¡Mi bebe se movió! Duérmete niño Duérmete ya

Comenzó a cantar Bokomon al digihuevo cuando una fuerte luz entro por las ventanas iniciando un nuevo día.

Llegamos hasta un pueblo en el cual el Trainmon nos hizo bajarnos.

- Nosotros queremos llegar al Lucero de la Rosa.

- ¡Todos los años celebramos nuestro festival y hoy ganare!

Y se fue a toda velocidad. Entre todos acordamos caminar por el pueblo hasta encontrar un Trainmon que nos llevara, pasamos por multitud de digimons, entre los que salude a algún Floramon.

- Están comiendo, y yo tengo mucha hambre.

Toque el hombro de Zoe.

- El sentimiento es mutuo - y bajamos nuestras cabezas desanimadas.

Seguimos caminando hasta que llegamos a una multitud entre la que pasamos hasta llegar a la baranda.

Tommy y Zoe hablaban con un extraño digimon con forma de espantapájaros, el cual les comento que esta carrera era en donde los Trainmon defendían su honor como corredores junto a su conductor quien ganaba una hamburguesa...comida, si hubiera alguno que le faltara conductor con gusto lo seria.

- ¿Ahí alguien que quiera ser mi conductor? - dijo el mismo Trainmon en el que antes habíamos viajado.

Con Zoe bajamos a la pista lo más rápido que podíamos para ofrecernos como voluntarias, pero un digimon quien se hacía llamar BlackWereGarurumon junto a otro que era Dogmon.