Me mantuve en silencio unos segundos, reaccioné y continué empujando la balsa.
— No me mal intérpretes, por favor—Titubeo—. Lo que siento por ti no tiene nada que ver...
— Lo sé. —Susurré en un hilo fino de aire, siguiendo el trabajo de empujar— Solo...
Sabía que iba escuchado, era imposible no haberlo hecho. Espero, escuchando el sonido de las olas, que nos balanceaban sutilmente con el viento.
— Solo—Repetí, tratando de retomar mis palabras—, no quiero cuestionar esto. Me encanta, y... Y-y siento que si lo cuestiono, tendría que verte por completo.
Bajo la cabeza, y la tela sobre sus ojos se arrugo, había fruncido el ceño.
— ¿Tienes...miedo de mí?
Paseé mi mirada, tratando de poner orden a mis pensamientos y palabras.
— No... No—Reiteré, con más seguridad—, no tengo miedo de ti, tengo miedo de...
La palabra se ahogó en mi garganta, me senté suspirando, frustrado de no poder decir esa simple, corta y hermosa palabra.
Con cuidado y torpeza, tomo mi mejilla suavemente, pasando su pulgar por mi labio inferior.
— Pues no tengas miedo...—Respondió con una sonrisa incompleta— Quiero ayudarte, recorramos ese camino, juntos.
Bajo un poco la mano, acercando unos dos dedos a mi cuello acariciándolo, al tiempo que su pulgar hacia lo mismo con mi mejilla. Parecía que iba a decir algo, pero decido no hacerlo.
Sonreí, él lo noto, e hizo lo mismo.
No me atreví a acercar mi cara a la suya, aunque un gesto vale más que mil palabras... Algunas veces, se sienten más como una consolación.
Me levanté, sintiendo un olor dulce en el aire, que se dispersó a los pocos segundos.
Seguimos en un silencio pacifico.
Al llegar a la orilla, arregle un par de cosas que se había movido por el viento o por el suelo inestable.
Fui por Dark y la comida, me coloque detrás de él, quitándole la venda.
Observe como analizaba las botellas colgantes alrededor, con hadas adentro, sirviendo como iluminación. La tabla que iba servirnos como mesa, junto a las sabanas que había colocado para evitar el contacto directo a la arena.
Giro a verme, parecía atónito.
— Paceré que acabas de ver a un Poe. —Dije, quitándome las botas, doblando mi pantalón.
Sonrió, soltando con una risa.
— Me dijiste que no iba a estar libre.
— He conseguido un rato libre, bueno...
Rasque mi nuca sabía que iba ocupado demasiados tiempos libres para este «gran gesto».
— ¿Comemos aquí? —Cuestiono, viendo como servía la comida.
— Creo que es evidente.
Camino unos metros, fijando su mirada al horizonte.
— ¡Me trajiste a un lugar infestado de monstruos! ¡Eso no es muy romántico, eh!
Suspiré, me iba imaginado que diría algo así.
— Tardarán bastante antes de que vengan aquí, si no hacemos mucho ruido, nos ignoraran.
Vi como sonrió, con cinismo. Haldeo un poco la cabeza y saludo a la nada, paso unos segundos así, antes de que volvería casi saltando como un niño que se iba librado de algún castigo.
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¿Quién Eres? [Link x Dark Link]
Fanfiction[Si no te gusta el crackship, pero te mueve el morbo/chisme cámbiale los nombres a Baji y Chifuyu (Según @las_piernas_de_bum no yo)] Link, el Campeón de Hyrule, lleva una vida tranquila desde la derrota de Calamity Ganon. Trabajando con la Princesa...