Era el día en que debíamos volver de viaje, pero no quería regresar. La noche anterior, Aaron me había enviado varios mensajes que, al principio, no respondí. Solo le mandé uno al final, diciendo que no iba a viajar y que necesitaba quedarme unos días más allí. Estaba cansada de todo lo que ocurría y de él también.
Revisé mi teléfono para leer los mensajes que Aaron había enviado:
"Scarlet, ¿Qué diablos fue eso anoche? No puedo creer lo que vi. Necesitamos hablar."
"Scarlet, no me ignores. Necesitamos resolver esto. Habla conmigo."
"Sé que estás enojada con lo de Melanie. No tengo excusa, solo sucedió. Por favor, hablemos".
"Scar, por favor, tenemos que hablar. Sé que la cagué, pero necesitamos resolver esto."
"Está bien, Scar. Si necesitas este tiempo para pensar, quédate el tiempo que sea necesario. Yo me encargaré de la empresa mientras tanto para que no tengas que preocuparte por eso. Pero por favor, te pido que me avises cuando vuelvas. Si no quieres hablarme, lo respeto, la cagué, pero solo avísame si estás bien."
Después de leer sus mensajes, no podía evitar sentir una mezcla de emociones. Estaba enojada, dolida y, al mismo tiempo, algo aliviada de que al menos se ofreciera a ocuparse de la empresa. Sin embargo, todavía no estaba lista para hablar con él.
Decidí ir al gimnasio del hotel para liberar un poco la tensión acumulada. Hacer ejercicio siempre me ayudaba a despejar la mente y necesitaba urgentemente una distracción. Al llegar, noté que el gimnasio estaba casi vacío, con solo un par de personas usando las máquinas.
Empecé con un poco de cardio en la cinta de correr, dejando que la monotonía del movimiento y el ritmo de la música en mis auriculares me ayudarán a desconectar. Observé a una mujer en la bicicleta estática, parecía estar tan absorta en su ejercicio como yo intentaba estarlo. Un hombre levantaba pesas en un rincón, su concentración absoluta en cada repetición. La tranquila atmósfera del gimnasio me ofrecía un respiro del caos emocional que había sido mi vida últimamente.
Después de una hora intensa de ejercicio, me sentí algo más calmada. Aún con el sudor en la frente, me dirigí a una de las colchonetas para hacer algunos estiramientos. Cada movimiento me ayudaba a liberar la tensión acumulada en mis músculos y, poco a poco, mi mente también comenzaba a relajarse.
Con el cuerpo más relajado, me dirigí a los vestuarios para darme una ducha rápida. El agua caliente me ayudó a despejar aún más la mente, lavando no solo el sudor, sino también parte del estrés y la ansiedad acumulada. Me vestí con ropa cómoda y decidí que era el momento de ponerme al día con mis responsabilidades laborales.
Subí a mi habitación, me senté en el escritorio y encendí mi laptop. Comencé a redactar un correo para Sarah :
Para: Sarah Asunto: Asuntos pendientes y ausencia temporal
Hola Sara,
Espero que estés bien. Quería informarte que me voy a quedar unos días más aquí. Necesito un tiempo para descansar y ordenar algunas cosas. Durante mi ausencia, me gustaría que te encargues de los siguientes asuntos:
1. Asegúrese de que el equipo de marketing esté alineado con las nuevas estrategias para el próximo trimestre.
2. Revisa y aprueba las propuestas de los nuevos proveedores que nos enviaron esta semana.
3. Programar una reunión con el equipo de desarrollo para discutir el progreso del nuevo proyecto.
Estaré disponible por correo y teléfono para cualquier cosa que necesites. Gracias por tu comprensión y apoyo.
ESTÁS LEYENDO
Química Imperfecta
RomanceCuando los padres de Aaron y Scarlet deciden retirarse, les confían el mando de la empresa a sus hijos. Ellos se ven obligados a trabajar codo a codo, enfrentando el desafío de mantener el legado de sus familias, sin embargo, las cicatrices emociona...