8. Prácticas.
Me sentía tan frágil, tan débil, me sentía tan invulnerable, estaba tan acostumbrada a la inmortalidad que no me había dado cuanta de qué cualquier cosa me puede herir. Necesitaba buscar una forma de poder protegerme del mundo que me rodeaba en ese momento, de ese mundo peligroso que me rodeaba. Tenía en mis manos tanto poder y me sentía tan inútil al no usarlo o al no aprender ningún hechizo, mas de una vez le pedí a Matt que me enseñase algún hechizo o algo por el estilo y parecido a los hechizos que él utiliza, pero cada vez que íbamos a practicar él se iba con Anne y me dejaba botada. Si tenía que recurrir a alguien tan insoportable e ingenuo como Taylor para aprender algo de magia, lo iba a hacer. Me levanté de la cama que me habían puesto Jenny y Anne en el cuarto de la segunda para que deje de dormir con Jaison, me miré en el gran espejo que había al frente mio, no se que era peor, qué estaba completamente despeinada o que tenía una cara que deprimiría a cualquiera. Me desprendí del moño que tenía y me metí en el baño, me di una pequeña ducha para luego vestirme y peinarme un poco. Sonreí victoriosa al ver que había mejorado mi aspecto de recién levantada al de ahora. Fui al salón a comer, cogí una fruta y luego me la metí en la boca. Jaison estaba en el salón con Taylor viendo la televisión o jugando a algún videojuego, sonreí a ver que se llevaban bien. Matt y Anne no estaban, habían salido a practicar a defenderse y ejercitarse un poco.
-¿No se aburren de jugar el mismo juego siempre?- me senté al lado de Jaison, quien estaba concentrado en su juego.
-No- dijo Taylor moviéndose de lado a lado con la consola.
-Bien- pausé unos segundo y mordí mi fruta. Jaison se detuvo un momento y cogió un puñado de papas fritas que había frente suyo, seguidamente se lo metió a la boca todo al mismo tiempo y siguió jugando- Taylor ¿podrías enseñarme magia?
-¿Ah?- de la sorpresa a Jaison se le cayeron todas las papas que hace unos segundos estaban en su boca.
-Claro ¿cuando empezamos?- preguntó casi ignorando mis palabras.
-Yo pensaba que...- pausé y miré a Jaison- hoy mismo- sonreí y en ese instante Taylor me miró sorprendido y Jaison escupió sorprendido la bebida que se había bebido hace unos segundos.
-¿Ahora?- preguntó desilusionado.
-Si, yo...
-Muy bien- me interrumpió- espera a qué me vista- se levantó y se dirigió a la habitación de Tomás. A los pocos minutos salió vestido con una prenda de Tomás, Jaison y yo nos quedamos mirando enojados y sorprendidos al verle con esa ropa.
-¿Qué haces?- preguntó Jaison.
-Toda mi ropa estaba sucia así qué...
-Esa es la ropa de mi hermano- prosiguió.
-Si quieres voy desnudo a mostrarle magia a tu novia- me miró y sonrió- por mi no hay problemas.
-¡No!- grité- no importa, qué date la ropa- sonreí algo nerviosa.
-No ¿cómo qué se la quede?- preguntó Jaison- es...- pausó- era de Tomás.
-¿Quieres que me haga clases desnudo?
-No, pero que...
-Entonces- le interrumpí- que use un poco la ropa, no importará- sonreí.
Me levanté del sofá y me dirigí a la puerta con Taylor. Nos subimos al coche para dirigirnos a algún lugar tranquilo para así poder ensayar los famosos trucos de magia. Llegamos a un especie de parque deshabitado, en el medio de la nada, si no fuera por que tenía pasto y plantas, pensaría que es un desierto en el medio de nada. Me senté en un tronco de árbol tirado en el medio de todo el desierto para poder descansar de tanto caminar. Él se sentó a mi lado y se quedó mirándome unos minutos.
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Recuerdos del único amor III: Resurrección.
VampireTercera parte de la novela titulada Recuerdos del único amor. Uno nunca espera perder a la persona que ama, no después de haber descubierto que lo amaba. Judit descubre un gran don y lo aprovecha para traer del vuelta a Tomás, lo cual no sucede, no...