20. Todo es una farsa.
El libro estaba sobre mis manos al fin, miraba una y otra vez de reojo a Jaison quien estaba muy nervioso por volver a su hermano ¿qué iba a decirle? Habían pasado ya varios meses y no sabía que decirle, miré a Taylor quien aguantaba una lágrima de alegría en sus ojos y me miraba ansioso por volver a su hermana, Anne abrazada de Matt mientras lloraba sobre su hombro de alegría de ver a su hermano menor a quien no veía en varios meses tras su muerte. Dejé de mirarlos y comencé a cambiar de hoja de una forma delicada para no romper la delicada y fina hoja de cada libro, conseguí llegar a la página doscientos veinte que eran los años que había vivido hasta el momento.
Miré de reojo a Taylor quien no dejaba de lamer su labio inferior nervioso de volver a mirar a su hermana a los ojos después de tanto tiempo.
"Fue corriendo hasta él mientras unas lágrimas se deslizaban por su mejilla acabando en sus labios, nuevamente una lágrima salió de su ojos pero con la velocidad a la que iba rápidamente se apartó de su mejilla dejándola seca como si nada hubiera pasado. Llegó al frente de él donde al instante cogió su rostro entre sus manos y observó detenidamente cada parte de su cara, sus ojos grisáceos dejaban ver un brillo de alegría con cada mirada que se reflejaba en ellos, sus labios carnosos y rosados indicaban besarlos lo que fue imposible de hacer para ella, en tan solo dos segundos se encontraban sus labios unidos con miedo a separarse, se separaron por unos segundos para mirarse el uno con el otro y unir sus miradas por un pequeño momento, se sonrieron mutuamente y siguieron con el beso. La chica se aparto lentamente sin separar sus manos de su rostro, bajó la mirada a la vez que relamía sus labios nerviosa, volvió a mirar el rostro apenado de aquel chico y como si nada hubiera pasado se alejó lentamente de él, mientras nuevamente unas lágrimas recorrían su mejilla, las cuales apartó bruscamente"
-Deseo que Tomás vuelva a la vida- dije una vez terminé de leer el relato que ocupaba la hoja de la página doscientos veinte. Cerré los ojos esperando que Tomás apareciera o que pasara algo, cualquier cosa pero nada ocurrió, lo que llamó mi atención, abrí ligeramente un ojo para observar mi alrededor pero nada había cambiado.
-¿Y bien?- preguntó Jenny ansiosa quien había entrado hace unos segundos por la puerta.
-Nada- dije decepcionada.
-Seguro que hay que esperar- animó Taylor.
-No, se supone que pasa al instante- cerré el libro bruscamente y lo tiré al suelo.
-Eso no lo sabes- dijo recogiendo el libro- hay que esperar- se sentó.
-¿Por qué me pasa esto?- me pregunté a mi misma mientras me levantaba del suelo donde me encontraba sentada, entré en el cuarto compartido de Jenny y Anne, me tumbé en la cama. Habían pasado mas de tres horas y nada había ocurrido aún, lo que me hizo pensar que ya no volvería a ver a Tomás nunca mas, una lágrima se deslizó por mi mejilla- espirutyus come neistos voutre heip- dije mientras imaginaba en mi mente la mirada de Angi.
-¿Qué ocurre, Judit?- dijo Angi mientras caminaba hasta mi y se sentaba en la cama.
-No funcionó- apreté con rabia la manta que cubría la cama.
-Lo supuse- dijo ella.
-¿Qué?- la miré- ¿cómo que lo supusiste?
-Ese no es el libro de los deseos- parecía decidida a lo que decía.
-¿Cómo puede ser?- me alarmé- el hombre dijo que lo era y...
-No lo es- me interrumpió- los espíritus me informaron que sigue oculto en las profundidades del mar.
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Recuerdos del único amor III: Resurrección.
VampirgeschichtenTercera parte de la novela titulada Recuerdos del único amor. Uno nunca espera perder a la persona que ama, no después de haber descubierto que lo amaba. Judit descubre un gran don y lo aprovecha para traer del vuelta a Tomás, lo cual no sucede, no...