✨Maybe in another life ✨

Kim Taehyung 🐻

Era muy raro como todo pasaba, ¿en que momento nos quedamos atrapados en este trío sin sentido? Mailyn sufría por Jimin, y yo sufría por ella sujetando su mano,
¿esto era lo que en verdad buscaba, esto es lo que quería sentir?.
Tantos años rodeadas de mujeres que harían cualquier cosa por mi, y vine a enamorarme de una mujer que está enamorada de mi único amigo.
Pero esto no se interponía en mis sentimientos, la ira me consumía, ¿para esto me llamó de madrugada, para esto ese tal Yoongi quería que viniera con urgencia? ¿Como se atrevió a hablar de nuevo con Jackson?
Quería partir su cara, sentado allí con esas mujeres, y Mailyn temblando sujeta a mi mano.

La desesperación en su rostro era doloroso, me dolía verla sufrir, me dolía que él tuviera la posibilidad de amarla sin límites y la hiciera pedazos.
Acariciaba su espalda tratando de calmarla, quería llevarla en mis brazos por todos lados, que sus lágrimas sean de felicidad y no por esto.

– ¿Lo encontraron entonces? – maldita sea de nuevo este sujeto.
– am.. si, gracias. – Traté de sonar lo más natural posible, pero presentía que esto no terminaría bien para mi-- nosotros ya nos íbamos.
– ¿Estas bien Mailyn?
– Si.. gracias por preguntar. ¿Tú estabas con él en la fiesta?
– Apenas vi que todos llegaron, llamé a Taehyung.
– ¿Él te llamó? No entiendo.. osea que lo sabías desde que hora?-- ¡mierda!
– Prometo que puedo explicarte Mai.-- no realmente no podía explicarlo, solo no me pareció importante, a quien quiero engañar, no quería que lo viera.
El idiota de Yoongi dijo algo más que ni siquiera escuché, solo podía ver como una pequeña v se formaba en la frente de Mailyn, su rostro paso de ser triste a estar furiosa.

– ¡RESPONDE MALDITA SEA!
– Cuando estábamos en tu casa, me llamo primero Jimin y luego de media hora, él.
– Y .. ¿y porque no me lo dijiste?, Tae él llamó a mi madre, él llamó a todos menos a mi, algo le pasaba y ..
– Y nada Mailyn, no me pareció importante..-- ahí estaba, mi voz seca y cortante, como mi padre cuando ya no quería escucharme.
La risa de Yoongi nos hizo dar vuelta nuevamente.

– Eres un asco como persona, él te llamaba para decirte algo de un hermano tuyo, y tú solo lo ignoraste, ¿por qué ? ¿Por ella?

– Yo no tengo hermanos.
– ¿Seguro? Entonces un tal Kim Namjoon no es nada tuyo.

De repente, todos mis recuerdos de mis niñez, la última vez que lo vi, la última vez que había oído su voz me aplastaron el cerebro.
¿Namjoon estaba aquí?

Vi como Mailyn se iba con ese chico, y era la primera vez en meses que no me importaba, tenía que encontrarlo.
Volví a subir en busca de Nam, pero veía como todos estaban bajando.
– ¡SALGAN TODOS LA FIESTA SE ACABO!
La voz ebria de Jimin retumbaba en todo el lugar, espere que todos bajaran casi 60 personas salían del lugar, no tenía tiempo de volver a pelearme con Jackson.

El lugar se quedó un desastre, las latas y botellas de alcohol había incluso sobre los lugares más altos de lugar, el espejo estaba empañado que casi no se veía nada.

Jimin estaba tirado en medio de su desastrosa sala, boca arriba solo en ropa interior.

– Dije que todos se fueran, largo!
– No es que quiera quedarme contigo, solo vengo a buscar a alguien. – lo miraba recostado desde la puerta, dentro de todo me daba lástima, ¿porqué será que está así? Tiene a ambos padres, amigos a Mailyn..
Tan pronto escuchó mi voz se sentó como pudo tambaleándose de lado, miro por todos lados buscándola.

– Ya se fue.
– ¿Que mierda haces aquí, porqué la dejaste ir sola?
– No me salgas con cuentos Jimin, como si fuera que te importa.- se tumbó de nuevo mirando el techo.
– Tienes razón me importa una mierda.-- se volvió a tumbar
– ¿Es cierto que Nam estaba aquí? – estaba acostado intentando que el encendedor funcionara, me acerqué y le prendí el cigarrillo que tenía en la boca, busqué en la habitación alguna manta para cubrirle.
– ¡Taehyung!
– ¿Ya voy puedes esperar y dejar de gritar Jimin?-- coloqué un poco de agua con hielo para que lo tomara necesito que recuerdo si era Nam o no.
– TaeTaeeeeeeeeeeeee…
– No me vuelvas a decir así Jimin, odio ese sobre nombre.
– Cuando eras niño te encantaba que te digan así, recuerdo que hubo un tiempo que hasta los maestros debían de llamarte así o no le prestabas atención.-- lo miré de mala gana, sabía exactamente que hacer para ponerme de mal humor.
Le pasé el vaso con agua y lo tomó de un trago, luego volvió a tumbarse.
Me senté a su lado mirándolo tratando de entrar a su mente.