"¿Que estés con ella quiere decir que ya te olvidaste de mí? Porque en ese caso, espero que seas feliz pero no como lo eras conmigo; y puede que sea egoísta, lo sé, pero es que no puedo superarte, Harry."
Puesto #1 en #NovelasdeOneDirection - 27/J...
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Uno de los grandes problemas en mi vida era justamente ese.
Harry Styles pertenecía a mi grupo de amigos y yo no podía hacer nada para impedirlo, no era quien para prohibirles a los demás que dejaran de lado su amistad para ponerse solo de mi parte en esta historia de conflictos entre él y yo.
Cuando estábamos juntos, nunca nos detuvimos a pensar en el riesgo que conllevaba si algún día la relación terminaba, pero ¿Quién se pone a pensar en ello cuando se está completamente enamorado?
El hecho de que mi ex novio era uno de los amigos más cercanos de mi hermana también empeoraba todo.
Sabía que el día que terminaron las cosas entre nosotros, Alice no dudó en hablar con él y en dejar claro lo molesta que estaba con Harry por haberle roto el corazón a su hermana menor, pero, después de mi partida, supe que con el tiempo las cosas entre ellos habían mejorado.
Y todo había vuelto a la normalidad entre mis amigos.
Y lo supe en el instante en el que llegué a la cafetería y los vi a todos conversando entre risas durante mi ausencia.
Sabía perfectamente que en cuanto yo llegara hasta ellos, guardarían un silencio extraño y después intentarían que todo el ambiente se relajara, pero siendo todos muy conscientes de que seríamos Harry o yo los que a penas y emitiríamos una palabra.
Tal como hace unas noches en el departamento de mi hermana.
Por un momento, mi corazón se derrite un poco al ver como Harry ríe y envuelve a mi hermana en un amoroso abrazo.
Ellos de verdad se estimaban demasiado.
Ambos eran como dos hermanos.
Por esa razón, Alice había estado en contra de nuestra relación cuando Harry y yo dejamos de salir en secreto y revelamos a los demás que llevábamos juntos más de cuatro meses.
Ella nos los había advertido, era muy peligroso estar con alguien que en un inicio solo fue tu amigo; se corrían demasiados riesgos que, a palabras de ella, nos pondrían en aprietos, no solos a nosotros, sino a ella y al resto.
Pero aquí no habían equipos, ni preferencias, desde un comienzo todos aclararon que si algo malo sucedía, el apoyo sería igualitario.
Y ellos realmente habían cumplido su palabra.
Pero ahora mismo, me siento una completa extraña observándolos desde la entrada sumergidos en su mundo.
De la manera más sigilosa posible, decido darme la vuelta por donde llegué y marcharme de este lugar al que no pertenezco.
Y con un suspiro de alivio y celebración, lo logro.
Me encamino hasta un parque cercano que se ubica a tres cuadras de la cafetería y tomo asiento en una banca; tenía que llamarle a alguien por teléfono para anunciar mi ausencia esta mañana.
