C A P I T U L O 42

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C a p i t u l o 42

"Narrador"

La lluvia ha cesado, pero el llanto sigue presente

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La lluvia ha cesado, pero el llanto sigue presente.

Harry y Olivia están hechos un desastre tratando de ignorarse.

El ojiverde se ha dado por vencido y a este punto a comprendido que nada de lo que haga conseguirá que Liv le dirija la palabra. Tiene miedo, y el palpitar en su corazón le asegura que ya no queda rastro de lo que alguna vez fueron. No quiere darse por vencido, pero no tiene idea de cómo continuar.

Olivia se mueve por la cocina tratando de dirigir su concentración a sus actos, pero esta mañana se encuentra demasiado torpe debido a la humedad de sus ojos y a la falta de sueño. Se siente pequeña, casi insignificante y trata de consolarse a sí misma con pensamientos positivos. Pero no funciona.

Cada dos por tres alguno de los dos tiene que marcharse al baño para llorar por unos minutos tratando de que el otro no se dé cuenta; pero es tonto y no tiene sentido porque al final, consiguen descubrirlo.

Una vez que tienen todo empacado, cada uno regresa a su habitación para cambiar su ropa y poder marcharse de la cabaña.

El reloj marca las 9:00 a.m. y el clima nublado parece ir acordé a la tristeza que inunda el cuerpo de las dos únicas personas que se encuentran en el lugar.

Aunque pudieran hacer todo de manera rápida para apresurar la situación, ambos se mueven lentos, como si realmente no quisieran marcharse del lugar. Pero saben que necesitan espacio, ese espacio que les hizo falta y decidieron omitir.

Harry desea tocar la puerta de Olivia, suplicarle una vez más que le permita escucharlo; quiere decirle que puede ser fuerte por ambos, que puede sostener el dolor de los dos y curar las heridas que no han sanado. Por su parte, Olivia quiere gritar el nombre de Harry y rogarle para que la sostenga y le susurre palabras de aliento que la hagan creer que siguen teniendo posibilidades de volver a estar juntos.

Eran un gran equipo.

Eran la pareja que muchos deseaban ser.

Eran aquellos que sus amigos envidiaban por el amor palpable entre ambos.

Eran los amigos que habían planeado cumplir sus sueños al lado del otro.

Eran Harry y Olivia.

Y Harry y Olivia estaban desechos.

Con su ropa puesta, Olivia sabe que tiene que dirigirse a él para devolverle las prendas con las que pasó la noche, pero esta sigue impregnada con el olor del ojiverde y por un momento piensa en quedarse con ella para olerla y abrazarla mientras llora en su cama en el departamento. Añorandolo con cada uno de sus sentidos. Sin embargo, recuerda aquella noche con James y Liam y sabe que tiene que seguir deshaciéndose de todo lo que le recuerde a Harry, así que cuando escucha que el chico baja las escaleras, Liv aprovecha para introducirse en la habitación de él y dejar sobre su maleta la ropa prestada.

HAPPIER | H.S.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora