CAPITULO EXTRA, SHOWDOWN 3: VIVI VS HIKARU UEMATSU

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-¿Están listos para la última pelea de la noche?

Todos reaccionaron efusivamente ante la pregunta del presentador.

-Bien, entonces prepárense todos, porque viene el siguiente combate que posiblemente muchos esperaban. ¡Comenzamos!

En eso suena un intro que empezaba con un coro que decía "To you... yes, my love to you... yes, my love to you", para luego empezar un ritmo de una canción City Pop y una voz femenina en japonés cantando. De la entrada sale la hermosa Hikaru Uematsu, portando una bata celeste debajo de su traje de lucha, sonriente y bastante tranquila.

-De la tierra de los árboles de cerezo, su apariencia tierna y tranquila es contrastante con su fuerza sobrehumana: la princesa Sumotori, de Tokio, Japón... ¡Uematsu... Hikaru!

La chica queda fuera de la jaula, arrastra sus pies para limpiar cualquier polvo que pudieran tener sus zapatos de lucha, y entra al octágono. La chica levanta su mano, saludando al público y sonriendo. Se quita la bata, quedando en su leotardo azul y celeste.

-¡Vamos Uematsu!

-¡Aposté un millón por ti, no se te ocurra perder!

En ese momento, otra canción suena con un sonido distorsionado de guitarra, para luego comenzar a sonar un tema un tanto entre "Punk" y "Grunge", para luego sonar una voz femenina cantando lo siguiente "When I get mad and I get pissed, I grab my pen and I write out a list, of all the people that won't be missed... You've made my... Shitlist!". Vivi, la argentina de cabello púrpura entra con su sencillo traje de pelea, aunque encima de este tenía una chaqueta de cuero.

-Y entrando a la jaula, de las peligrosas villas porteñas, habiendo enfrentándose a toda clase de peligros en las calles Rioplatenses y ahora entra al torneo para demostrar que tiene todas las hechuras para ganar. La chica más mala de las Américas: ¡Vivi!

Vivi, mostrando ese rostro en extremo pendenciero y cargando una sonrisa confiada, entra a la jaula, se quita la chaqueta y le muestra su dedo de en medio al público.

-¡Métetelo en el culo! –Le respondía alguien del público-.

-Así es ella, siempre le encanta bardearnos.

-¡Si no ganas esta pelea haré que te metas ese dedo en el ojete!

Vivi se reía por las reacciones de muchas personas, aunque ya todos estaban acostumbrados. En eso, la chica se encara con Uematsu.

-Ara, ara... eso fue grosero –decía sonriente-.

-A esa gente solo le gusta vernos revolcarnos y tocarse mientras lo hacen.

-Fu, fu, fu... no es que eso me quite el sueño, siempre y cuando no pase de ahí; además, aquí estamos las dos, ¿no?

-Lo sé, y por eso voy a ganar, para mandar a la mierda a ese tipo de gente.

-¡Buena suerte!

-Uematsu, Vivi, acérquense.

La referee era una mujer, llamando al centro del octágono a las dos peleadoras.

-Recuerden, no golpes bajos ni manipulación de partes nobles, no piquetes a los ojos, la nariz o algún otro orificio. Uematsu, no podrás golpear a mano cerrada porque no tienes guantes, ¿estás de acuerdo?

-Hai!

-Vivi, déjame ver tus vendas –la referee revisaba las vendas, que hacían una "colchoneta" en los puños por el grosor-. Bien, tú sí puedes utilizar los puños, pero las patadas quedan prohibidas por el tipo de bota que usas, ¿estás de acuerdo?

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