-¡Qué hermoso está este lugar!
-... No mames, ¿vives aquí y nunca has venido a la Sierra?
-¿Tú sí, Carla?
-Este... pues... ¿sí?
-¿Cuándo?
Llegando a una enorme y hermosa finca oculta entre la gran cadena montañosa que cruza el estado de norte a sur, conversaban Aurora, quien estaba sorprendida por el lugar, Carla, quien cuestionó a la primera, y Marissa, que cuestionó a la segunda sobre su conocimiento del lugar a donde fueron.
-Pues el año pasado fui a "La Presa" con unos camaradas.
-¡A "La Presa" puede ir cualquier hijo del vecino! Esta es una zona exclusiva cuyo predio más chico puede valer más que toda la colonia donde vives.
-Pero de que he ido a la Sierra, he ido a la Sierra.
-¡Ay! ¡Eres imposible!
-Siendo francos, tampoco es que esta zona esté ni siquiera en el estado... digo, hay unas partes de la Sierra que ni siquiera conocía.
-Justamente estamos de nuestro estado y el vecino al poniente; justo donde nace la cordillera –intervino Natalia, quien fue la que las acompañó en el viaje en ese auto de lujo que las llevó al rancho de Chocolate; el resto de las chicas bajaban de sus vehículas-. A la señorita le gustó este lugar porque le recordaba su natal Georgia.
-¿En Georgia hay montañas? Yo creí que había puros rednecks.
-¡No seas ignorante! –Responde Marissa a Carla-. Está hablando de Georgia, el país; no de Georgia, Estados Unidos.
-He ido a otras partes del país, y sí he subido a las montañas que rodean la Metrópoli... pero nunca había venido exactamente a este lugar.
-Espero y disfruten la estadía, solo procuren no causar destrozos; cualquier cosa que necesiten, pregúntenme.
Natalia se retira con tranquilidad hacia dentro del predio: era un campo abierto, rodeado por las altas montañas, el aire se veía bastante limpio; había una enorme piscina, palapas, parrillas, un bar, y también una amplia hacienda.
-Vaya, cómo viven los ricos. ¿Tú así vives, Marissa?
-Claro que sí; pero evidentemente Chocolate tiene muchas más propiedades.
-¡Vaya! Ya me vi cuando sea campeona de Amazon's Coliseum y tenga mi casota en la playa.
-Si es que puedes pagar los servicios...
-¡Claro que sí! Con el dinero que gane.
Marissa volteó los ojos en señal de fastidio.
-¿Sabes qué? Deja mejor entro, antes de que me vuelva loca esta naca.
-¡Naca pero ganaré mi dinero con mi propio jale! ¡Oye! ¡Ven! ¡Te estoy hablando!
-Déjala, Carla. Venimos aquí a relajarnos, no a pelearnos.
-¡Lo sé! Pero esa pinche fresita... ¡Agh! ¡Me caga!
-Te va a dar un infarto. ¡Ven! ¡Mejor entremos! Quiero ver qué tal es la finca.
-¡Ya aullaste, mi lobita!
Las chicas recorrían el lugar, la mayoría bastante sorprendidas por lo que veían. Unas bromeaban, otras se aventaban a las habitaciones bastante lujosas con vista al panorama montañoso. Otras ya habían encontrado el refrigerador con las cervezas y los estantes de alcohol.
-¡Genial! –Decía Emy Star-. ¿Dónde te habías metido, baby?
-¿Tan temprano y pensando en alcohol? –Dice Niane, quien se acerca, al tiempo que Emy le arroja una botella de cerveza-.
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Amazon's Coliseum
حركة (أكشن)La Ciudad, un paraíso financiero que se levantó tras la crisis económica que se suscitó tras la "Pandemia", se viste de neón una vez ocultándose el sol, saliendo las "Criaturas de la Noche" a vivir la verdadera cara de este paraíso cosmopolita, dond...