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Milla se encontraba rumbo a la casa de Nanami ya que este le había enviado un mensaje pidiéndole que le viniera a ver a su hogar lo más antes posible ya que era importante a lo cual ella sin pensarlo dos veces se montó a su auto para poder ir a verlo.
—Nanami?—Se quitó sus zapatos y se acercó a aquella tenue luz que provenía de la sala de estar del rubio— Por que esta tan oscuro?—El dejó su vaso con whisky aún lado y relamió sus labios—
—Sabes, no sabía que tenía a una zorra malagradecida por acompañante—Ella abrió sus ojos demás y se quedó inmóvil— Olvidaste tú bolso en mi oficina y cómo buena persona planeaban ir a dártela pero cuando te encontré—Soltó una pequeña risa amarga— Estabas siendo complacida por otro hombre—
—No! No fue así—Su voz se entre corto y sus manos iniciaron a temblar—
—Ahora me dices mentiroso?—se levantó de la silla— No te es suficiente? Te he complacido en todo lo que me has pedido y es así cómo me pagas?—se acercó aún más y la jalo del cabello para después tirar con fuerza de este—
—Fue un accidente!—lloriqueo—
—Lo único que sale de tu boca es mierda así que te enseñaré a darle un mejor uso, pequeña zorra—sonrió con malicia y tiro con más fuerza del cabello de ella— Dejándote tocar por el primer hombre que te endulza el oído, patético—subió su mano libre y apretó con fuerza ambas mejillas de ella— Te enseñaré lo que es el respeto—
La lanzo contra el suelo y ella rápidamente se agarro del mueble para no lastimarse, Nanami se quitó su saco con rapidez y inició a quitarse su cinturón para de ahí dejarlo en aquella pequeña mesa de estar...iba a darle un castigo para que no volviera a mentirle.
Kento la levantó del suelo y con brusquedad la recostó sobre el mueble, rápidamente bajo el pantalón de ella y admiro el trasero de ella para después agarrar su cinturón junto su corbata.
—Si te resistes será peor—amarró las manos de ella con la corbata y volvió a agarrar el cinturón—
Nanami sonrió ladinamente y con fuerza lo estampó sobre la nalga de ella, Milla apretó con fuerza sus labios y un par de lágrimas fueron derramadas.
—Cómo pudiste dejar que te besara e incluso tocara tus pechos? No te ha quedado claro que son míos?!—Le dio otro azote—
Milla estaba que se iba, ni siquiera llevaba un cinco por ciento de su castigo y ya estaba viendo estrellas.
—Dirás gracias por cada golpe—tiro del cabello de ella— Entendiste?—asintió y el la soltó—
Nanami le dio otro golpe y ella le agradeció por hacerlo, fue golpe tras golpe y el no parecía cansarse por nada del mundo.
—Duele?—pasó la yema de sus dedos por sus moradas mejillas y sonrió ladinamente— Espero que después de esto aprendas la lección, pequeña—
Kento le dio vuelta y admiro el rostro de ella, su cabello estaba pegado a su rostro, las gotas de sudor bajan de su frente y sus ojos estaban rojos de tanto llorar. El rubio bajo las bragas de ella y sin siquiera prepararla metió 3 de sus dedos dentro de ella, Milla arqueó con fuerza su espalda y sintió un fuerte cosquilleo en la zona baja de su abdomen.
—Pa~ra! Es mucho—intentó quitárselo de encima pero el la detuvo con fuerza de sus muslos para seguir follandola con sus dedos y boca—
Nanami aumentó la velocidad y de pronto todos los fluidos de ella fueron derramados sobre el, manchado su rostro y mojando gran parte de su blusa.
—Maldita asquerosa—la jalo con fuerza y atrajo su rostro al de ella— límpialo con con lengua—
Se acercó y pasó su lengua por las zonas donde lo había manchado, labios, mejilla, barbilla, etc. Nanami se quitó su última prenda y colocó a la menor en cuatro para de ahí sostenerla de su cabeza y alinear su miembro con la boca de ella.
—Yo soy el único que puede usar y besar esa boca tuya—la miró directamente a los ojos— Eres mía—
Kento movió su cadera y metió todo su miembro en la cavidad bucal de ella, sonrió al escuchar cómo ella se estaba ahogando y prosiguió a mover sus caderas con brusquedad.
—Tan linda—pellizco los pezones de ella y aumentó la velocidad de sus movimientos— te daré contenido para publicar en tu página—agarro su teléfono y apretó el botón de grabar—
Nanami enfocó los labios de ella y su miembro, grabando cómo este entraba y salía de la boca de ella.
—Te lo tragarás todo—le susurro y dio sus últimos movimientos para de ahí derramar todo su semen en la boca de ella—
Milla abrió su boca y de ahí se lo trago, tal cómo el se lo había ordenado. Kento apagó su teléfono y rápidamente la recostó en el sofá para después colocarse detrás de ella, el rubio alzo la pierna de la morena y se adentró en ella.
—Mierda!—acercó sus labios con los de él y ambos iniciaron a besarse con desesperación—
Nanami bajo su mano y inició a mover su dedo sobre el clitoris de ella, Milla mordió levemente el labio de él y volvieron a unirse en un placentero beso.
—Voy a llenar ese coño—bajo sus besos hasta el cuello de ella y dejó marcas sobre este— Eres mía Milla así que métete eso en tu cabeza—hablo agitado—
Ambos estaban extasiados, nunca lo habían hecho de esta manera y los estaban disfrutando demasiado.
—Voy...agh!—Milla apretó sus ojos y sintió un alivio al llegar al orgasmo—
El dio sus últimas estocadas para de ahí corréese a la par de ella, derramando su semen en el agujero de ella.
—Yo...lo siento—se dio la vuelta y hundió su rostro en el cuello de él— Lo siento—
—Está bien—rodeó sus brazos por la cintura de ella— Esta bien—
