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Ella estaba mirándose en aquel gran espejo, hoy Nanami la iba a llevar a una cita y estaba que no podía con la emoción. Milla terminó de hacer sus uñas y rápidamente agarro sus prendas para cambiarse lo más antes posible, pues el ya venía en camino.
La ropa que había escogido era un vestido blanco, el clima estaba fresco así que por eso optó por usar algo cómodo y abierto.
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—Termine—Se roció algo de perfume y salió corriendo del baño para bajar las escaleras con gran rapidez—
La morena salió de su departamento y entró al elevador, esperaba verse bien ya que le gustaba darle una buena impresión a Nanami.
—Nanami!—Milla corrió hacia el y Kento la recibió con los brazos abiertos— Te extrañe—
—Y yo a ti—beso la frente de ella y el rubio de separó de Milla para poder ir a abrirle la puerta del auto.—
Nanami colocó el auto en marcha y colocó una de sus canciones favoritas, Can't Help Falling in Love. Milla sonrió al escucharlo cantar y se dedicó a admirar el paisaje, no sabía a donde la estaba llevando ya que el había dicho que sería una sorprenda pero de lo que estaba segura es que iba a ser un lugar hermoso.
Milla no entendía que había hecho para merecer a alguien cómo el, era el hombre por el cual siempre pidió y soñó toda su vida, estaba complemente agradecía por habérselo cruzado en su camino.
—Llegamos—Milla bajo del auto y una gran sonrisa se formó en su rostro, era un hermoso campo lleno de flores y áreas verdes—
—Joder, esto es maravilloso—Pegó un pequeño brinco y soltó un grito ahogado de la emoción, se sentía en la película del castillo del vagabundo— Eres el mejor, te lo juro—
