𝐇. 𝟎𝟒

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HISTORIA NÚMERO CUATRO:
𝐎𝐃𝐈𝐀𝐂𝐎 𝐘 𝐔𝐍 𝐆𝐑𝐀𝐍 𝐋𝐎𝐆𝐑Ó.

El cumpleaños número 500 de Lilith se acercaba, y gracias a eso, su marido e hijo, un gran festival organizaban. Muerte y los otros dioses, emocionados se encontraban, porque no es secreto, que las fiestas aman.

Pero a vida, eso solo le recordaba, que a un único ser, vida no le daba.

Lilith se ofendió, porque vida, fue el único que un regalo no le dio.

Muerte recordó, aquel raro suceso, y al mismo tiempo, Delfos se le acercó:

"—Lo que un padre no puede, un hijo si, y lo que el hijo mayor no pueda lograr, el menor tal vez si —".

La diosa creadora, esas palabras analizó, y creyó prudente, a su padre pedir consejo.

Cuando se acercó a sus aposentos, y una carta escribió, le pidió a su lechuza, que al sol se le hiciera entrega. La lechuza se fue, pero pasó un mes, y al parecer, el sol a su hija ignoro.

Muerte preocupada, por la lechuza, que un no volvía, se preguntó, si su padre culpa tenía.

La vida decidió, visitar a la muerte, porque rara la veía, pero la visita se vio opacada, con la llegada, de una gran energía.

Entre el palacio de muerte, y el de vida, una gran fuente de mármol yacía, la cual se vio destruida, con la caída de una nueva compañía.

Muerte y vida, se acercaron al epicentro, y ahí, sobre las destrozadas piezas de mármol, una doncella sonreía.

"—Mi nombre es zodiaco, soy la hija del dios sol, fruto de su amor con la madre luna —" afirmó con rapidez la doncella.

Su piel asemejaba a las flores tostadas, gracias al sol de primavera. Su altura corta, no la hacía menos, por su imponente presencia. Sus cabellos le dieron su nombre al cacao, mezclaron con pequeños hilos de plata, y su mirada amelada, era dulce, amable, pero desprendía a su vez, carácter.

La vida le preguntó: "—¿Qué hacéis aquí? Y sobre todo ¿Si eres nuestra hermana en común...? ¿Por qué no estábamos informados? —".

Zodiaco sonrió: "—Un hijo que ya ha dejado el nido ¿Por qué debería reclamar a un padre? —". Pregunto la menor, en respuesta.

Muerte sorprendida la miro, porque muy parecidas, eran las dos, aunque zodiaco al sentir su mirar, estiró su mano, y de ella, su lechuza salió.

"—Te ha extrañado, y lloraba todas las noches, pensando en que tan preocupada debías estar —" informo.

Las palabras de Delfos, a muerte hicieron eco, y rápidamente, a vida le informo, que ella, vida la podría dar, a su creación dormida.

El corazón de vida se aceleró, y zodiaco asintió.

Al estar frente a Adamu, como vida había nombrado, zodiaco se acercó, y murmuró:

"—Te otorgó un signo, serás Capricornio, hijo de los tres —". Se alejó lentamente, y al darle la espalda, el primer hombre, dio su primer paso.

Vida no pudo evitar, alegrarse, y a su vez, preguntarle a zodiaco, que diferencia había entre ella, a ellos.

Ella volvió a sonreír, y respondió con serenidad: "—Yo soy el punto medio entre ambos, por eso, cuando muerte creó a Lilith, nació un vampiro, y por eso, cuando al comienzo vida experimentaba, nació el primer elfo —". Aclaró.

Esa aclaración, fue un gran logro para todos, y fue el comienzo, para una nueva edad. La edad de oro, donde los hombres, las bestias, y las criaturas, comenzaron su convivencia.

Vida a su vez, encontró una cómplice, y muerte, una buena amiga. 

Beloverd The Celestino.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora