Dear Princess | TaeKook

XIII

Capítulo trece.

—Entonces cuando estén a punto de firmar los papeles, tomo a Taehyung del brazo y lo secuestro. ¡Digo! —negó con la cabeza— ¡Escapamos!

Jungkook volvía a decir una y otra vez el "plan" que se había inventado, dando vueltas por toda su habitación.

Conejito lo veía desde la cama sin entender nada, pero ahí estaba, observando atento cada acción y movimiento que hacía su dueño.

—Puedo llevarlo a mi casa, aunque no sé si quiera estar con tanta gente. Bueno, sólo somos ocho hombres y nuestra madre, no va a pasar nada.

Siguió hablando del plan, como lo había hecho desde esa mañana, sin nadie que lo escuche pues su roedor se fastidió y decidió dormir.

Ya en la tarde, sentado en su cama mientras se frustraba pensando en las complicaciones que traería esa idea, escuchó ruidos por fuera de su habitación.

Salió y se encontró con el hombre de la otra vez, el ayudante o sirviente del rey. Eso le habían dando a entender.

Sonrió y con susurros comenzó a llamarlo, pues ciertamente necesitaba ayuda en su plan. ¿Y qué mejor que la ayuda de un hombre que no conoce y es posible que lo vaya a delatar tarde o temprano?

El otro hombre lo vio y con su ceño fruncido, se acercó al menor, quien lo tomó del brazo y lo hizo entrar a la habitación nuevamente.

—¡Oye! —el de tez morena soltó un leve grito, sorprendido—. Tengo trabajo que hacer.

—¡Lo siento! Pero necesito ayuda, ¡sólo será un momento, lo prometo!

—¿Qué necesitas?

—Primero, me llamo Jungkook, mucho gusto. Y segundo, ¿has visto a Taehyung?

—Claro, lo veo cada tarde cuando está organizando la boda con su hermano y Jane, pero siempre está molesto.

—Ya veo —Jeon asintió mordiendo su labio inferior—. Uhm, de hecho, tengo una invitación para la boda.

—Lo supuse, ¿necesitas ayuda con el vestuario o algo así?

—¡Por favor! —respondió moviendo su cabeza en afirmación—. Hay tanta ropa y es la primera vez que iré a una boda, así que...

El hombre caminó hasta el armario y lo abrió después, buscando con la mirada y manos algunos trajes para el chico.

—Todo lo compró Taehyung, ¿no? —el menor le dio la razón y el contrario soltó una pequeña risa—. Eso lo explica. Veamos, ¿azul o negro?

—Eh... ¿azul? —respondió Jungkook dudoso y Namjoon tomó dos trajes de color azul, uno más claro que el otro.

El mayor pasó por encima del cuerpo de Jungkook los dos trajes, observando con detenimiento cuál le quedaba mejor. Se decidió por el más oscuro.

—Esto —le entregó el traje para luego buscar los zapatos de tacón negros, los cuales se encontraban en una esquina de la habitación—. Y esto.

—Oh, gracias —el chico sonrió mostrando sus dientes, corriendo al espejo después para visualizarse con el conjunto.

—¿Por qué quieres ir a la boda? Digo, no es lindo ver a la persona que amas casarse con alguien más... —Namjoon habló bajando la cabeza, pues la situación era similar a lo que él vivió.

Y Jungkook lo miró, sin responder por un momento. Caminó y se sentó en la cama, a su lado, soltando suspiros.

—No voy para verlo casarse, voy para impedirlo.