Capítulo 15 ¡Perdón hijo!!

17 5 0
                                    

  - Amor estoy muy nervioso.- decía Félix caminando enérgicamente de un lado a otro.

  - Esperaste tanto por éste momento. Tenés que estar tranquilo, yo voy a estar a tu lado amor.- decía Noah acomodando el sweater rallado de su novio. Lucía impactante, su cabello caía de costado tapando ligeramente sus ojos y ella no podía dejar de admirarlo.

  - ¿Qué pasa? Me mirás mucho. ¿Tengo algo?- y se paró frente al espejo del pasillo a mirarse. Noah lo abrazó por detrás y le dijo besando su cuello:

  - Si, tenés... Toda la facha del mundo. Sos hermoso vida, no puedo enamorarme más de vos porque es ilegal.

  - Vení acá, si no fuera porque tenemos el tiempo justo, te tiraba en la cama y te demuestro todo mi amor otra vez.- y besó a su novia con mucha suavidad.

  - ¡Sos lindo! Cuando volvemos espero que cumplas con tus palabras, ¿vamos?.

Los señores Cardona esperaban ansiosos en la jefatura. Morel estaba orgulloso de todo lo que había logrado en la investigación y esperaban la llegada de Félix.

  - Pablo, no aguanto más. ¿Dónde está mi hijo?? Necesito verlo...

  - Acá estoy mamá...

Dijo Félix entrando a la oficina de Morel. La mujer temblando se paró y abrazó a su hijo sin poder dejar de llorar, él lloraba como un niño pequeño y asustado y besaba a su mamá al momento que acariciaba su cabello.

  - Te extrañé tanto mamita hermosa, lo siento mucho, lo siento tanto...

Logró decir el joven entre sollozos y su madre no podía dejar de besarlo y abrazarlo. Cuando ella se calmó, pidió agua y se sentó para recuperarse.

Pablo esperó pacientemente, miró a su hijo, el chico era su viva imagen, eran como dos gotas de agua, se acercó y no pudo esconder sus lágrimas, casi sin voz le dijo:

  - Perdón hijo de mi alma, perdón. Pido a Dios que puedas perdonar a éste hombre que te ama tanto. Por favor Félix, perdoname hijo...

Y estiró sus brazos para abrazarlo, Félix lo miró fríamente y correspondió el abrazo, palmeó fuerte a su padre en la espalda, realmente nunca lo había visto así, era un hombre frío, distante y parecía no tener sentimientos, ese hombre no se parecía nada al antiguo padre que él recordaba.

  - Papá, no me la pusiste fácil. Pasé las peores miserias, sentí odio de tu parte y es el sentimiento más horrible por el que tuve que atravesar.
Terminaste con mi vida, no era nadie, nadie ...
Hasta que un ángel que me envió el cielo me salvó. Confío en mi, me ayudó, me devolvió la vida que ustedes me quitaron, sepan que me asesinaron en vida...
Me ama con el corazón, el amor más sincero y puro que existe, lo tengo con ella. Vení amor.

Una tímida y hermosa muchacha entró en la oficina. Estaba muy nerviosa y no podía dejar quietas sus manos. Un mechón de rulos tapaban sus ojos, miró a Félix orgullosa y él dijo:

  -Mamá, papá... Ella es Noah, mi ángel, el amor de mi vida. Ella me dió los mejores consejos, gracias a ella estoy hoy acá y gracias a ella te voy a decir ésto papá, sólo porque ella me hizo darme cuenta de cosas que por mi odio no veía...

Te perdono...

No necesito nada de ustedes, sólo quiero retomar mis estudios y vivir la vida que me arrebataron, junto a mí hermosa mujer y sufriendo la pérdida de mi hermanito...

Rompió en llanto y abrazó a Noah muy fuerte. Ella acariciaba su rostro y lo calmaba de manera amorosa.

Pablo Cardona se acercó a los enamorados, miró a Noah con su rostro cubierto de lágrimas.

  - Un gusto conocerte Noah. No me va a alcanzar la vida para agradecerte lo que hacés por mi hijo. Soy humano y me equivoqué, estoy seguro que sabrás mucho de nuestra historia. Quiero pedirte disculpas a vos también. Y te quiero dar la bienvenida a nuestra familia, espero de corazón que puedas aceptar mis disculpas.

  - Señor Cardona, es un momento muy difícil. Félix los ama mucho, ese sentimiento siempre lo acompañó, pero le juró que sufrió tanto, sin merecerlo, asíque espero que a partir de ahora pueda recuperar su antigua vida y seguir adelante. Con la compañía de la familia, todo es más fácil.

  - Acércate linda, estoy un poco débil y hoy ya no puedo más.- le dijo Sonia con los ojos brillosos.

Noah la obedeció y la mujer le hizo señas de que se siente a su lado.

  - Gracias hija, gracias. No puedo decirte más que gracias. Me devolviste lo más importante de mi vida. Espero que podamos conocernos, pero si Félix te eligió, no dudo de que sos una hermosa persona.- y abrazó a la joven con un amor maternal que Noah no sentía ni de su propia madre .

Morel miraba toda la escena conmovido y sabiendo que una vez más, había cumplido con su trabajo.

Arena PeligrosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora