Capítulo 13 ¿Habla en serio?

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Los jóvenes se sentaron en el sillón y Morel en un sillón individual al costado. Noah ofreció algo de tomar, pero el detective le agradeció por el momento.

  - Félix no te das idea de cuánto te busqué, aunque te confieso que me alegro de que no te haya encontrado en ese momento. Las cosas cambiaron mucho en la causa.

  - Mi vida se convirtió en un infierno detective, pasé de tenerlo todo, a no tener nada y lo peor, perder a mi hermano menor.

Ésta hermosa mujer a mi lado salvó mi vida, es todo lo que tengo, confió en mi desde el primer momento, nos enamoramos y vivimos felices desde entonces. Aunque yo estoy cansado de escapar, de vivir prófugo, no es vida para ella tampoco.

  - Seguro muchacho. Pero eso se acabó.

  - ¿Habló con mis padres? Ellos están convencidos de que maté a Blas...

  - Por supuesto que hablé con ellos. Quieren verte, abrazarte, recuperarte...-

Félix miró a Noah y la abrazó fuerte, no podía creer lo que le estaba diciendo Morel. Noah lo miró con una hermosa sonrisa en su rostro y le guiñó un ojo en señal de aprobación.

  - Les voy a contar. El caso de tu familia era todo un misterio y después de mucho tiempo y la diaria insistencia de tu padre, me di cuenta de que la investigación no llevaba a ningún puerto, sólo a callejones sin salida.

Entonces le di un giro, en vez de seguir investigandote a vos, investigué a tu hermano y ahí se empezaron a abrir los caminos. Encontré las respuestas a todas las preguntas que me hice desde el primer día. Junté todas las evidencias, pero todas y llamé a tus padres.-

Los chicos se miraban y se tomaban fuertemente de las manos.

  - La conversación con tus padres fue muy difícil, tenía que ir con cautela por la salud de tu madre.

Cuando les presenté las evidencias con sus respectivas pruebas, se quebraron en llanto y tu madre gritó desesperada que le devolviera a su hijo ya!

  - Si, Blas siempre fue la luz de sus ojos...

  - No, el hijo por el que pide tu mamá sos vos.- dijo Morel mirándolo fijamente a los ojos.

Félix apretó fuerte las manos de su novia, las lágrimas comenzaron a caer por su rostro sin control. El detective lo miraba conmovido. Noah tomó su rostro con sus suaves manos y le dijo:

  - Amor, te dije que esto iba a pasar. Lo hablamos mil veces. Sos inocente y lo sabés. Tus padres te aman.

  - No puedo creerlo, mi madre quiere verme. Pero mi padre me trató de asesino, de criminal, de la peor basura humana, no confío en mi, no creyó en la palabra de su propio hijo...

  - Ellos estaban desesperados, no eran ellos mismos amor. Dales una oportunidad, el dolor nos transforma de maneras inimaginables, ellos pasaron por el peor dolor posible, devolveles un poco de felicidad, tu madre necesita abrazarte, saber que estás ahí y que sos real.

  - Muy sabía esta muchacha, yo no lo podría haber dicho mejor.

  - Está bien. Necesito recuperar mi vida, seguir mi carrera, darle lo mejor a ésta mujer increíble que saca lo mejor de mi. Vos sacrificaste mucho por estar conmigo amor, fui una carga para vos, quiero cuidarte, que podamos vivir tranquilos, sin escondernos, sin trabas. Voy a hacerlo por vos, por el amor que nos une y por el futuro que nos espera juntos .- la besó sin importarle que Morel estaba presente.

El detective miró para otro lado, pero después de un rato, simuló toser para que recuerden que seguía ahí.

  - Bueno Félix, me voy a ir. Voy a concretar la reunión con tus padres y me comunico con vos. ¿Estás de acuerdo?

La reunión tiene que ser sí o sí en la jefatura, por tu seguridad. Necesito un número de contacto por favor.

  - Si, estoy de acuerdo y me parece bien. Le voy a dar el número de Noah porque yo ni celular tengo. Espero su llamado detective.- se saludaron y Morel se retiró.

Los jóvenes enamorados se miraron y se abrazaron muy fuerte. Lloraban emocionados y aliviados. Sus vidas estaban a punto de cambiar demasiado.

Félix imaginaba ese encuentro con su madre y un calor recorrió su cuerpo. No veía la hora de que conozcan a su bello amor, lo emocionaba por completo.
¿Y su padre? ¿Realmente quería verlo?

Recordaba la mirada de odio de su último encuentro y lo preocupó. Pero su amada novia lo volvió a la realidad cuando tímidamente tomó su mano y lo guió hacia la habitación. Era todo lo que deseaban en ese momento increíble.

Arena PeligrosaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora