Capítulo 22

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(Lo mismo de siempre, palabras en cursiva están en español, y negritas son recuerdos o mensajes)

Amaia comenzó a guiarse más que nada por el olfato, debido a que la parte del edificio por la que corría se encontraba en una oscuridad casi absoluta. Sharon la sujetaba de la mano para asegurarse de que estuviera detrás de ella. A pesar de conocer las habilidades y astucia de Amaia, no la dejaría sin protección en un lugar como ese. Los disparos alrededor de ellas hacían que corrieran levemente agachadas para que ninguna bala las alcanzara, aunque Amaia mantenía un escudo sobre ambas.

—Ya estamos llegando— avisó Sharon deteniéndose y bajando por unas escaleras cercanas a ellas.

—Van a llegar a un callejón sin salida— dijo Amaia bajando por unos segundos la intensidad de sus inhibidores para ubicarlos— dos hombres están detrás de ellos, no llegaremos.

Sharon miró a su alrededor pensando en un plan. Solo tardó un par de segundos en concentrarse en uno. Dejó a Amaia cerca de una de las ventanas que tenía salida a una escalera para incendios, entregando a la chica un arma.

—Cuida sus espaldas desde aquí y ocultate— dijo Sharon comenzando a bajar apresuradamente las escaleras.

Amaia observó el arma y la cargó con rapidez. Sam y Bucky habían perdido a la mayoría de posibles asesinos, pero aún los seguían dos que la chica había localizado poco antes. Amaia subió la intensidad de sus inhibidores para no lastimarse con el sonido; apuntó y disparó, dando en el blanco ambas veces. Rozó el costado del cuello de ambos hombres, dejándolos inconscientes por un tiempo prolongado, pero sin que fuera una herida fatal.

—Dos pájaros con dos tiros— murmuró Amaia poniéndole el seguro al arma mientras se levantaba. Los disparos lejanos seguían, pero el escudo propio la mantenía segura— toma eso tío Clint.

—Veo que tienen un ángel guardián— escuchó hablar a Zemo.

Amaia observó a Sharon que se escondía entre las sombras y con un movimiento de su mano, indicó que bajara y se colocara junto a ella. La chica activó su invisibilidad guardando el arma en su cinturón.

—Bueno, esto es demasiado perfecto— habló Sharon llamando la atención de los 3 confundidos hombres. Amaia bajó la primera escalera lo más silenciosa posible, ya que aún podía haber cazarrecompensas cerca.

Sharon se quitó la capucha de su chamarra manteniendo el arma en alto apuntando a uno de los hombres en específico. No tenía intenciones de disparar, ya que segundos antes, Amaia escuchó cómo era colocado el seguro del arma.

—Suelta el arma, Zemo— ordenó y este obedeció al instante.

—¿Sharon?— preguntó Bucky, en su voz se podía captar la confusión y sorpresa.

Amaia se preocupó un poco al concentrarse en los sentimientos de Sharon. Cuando la mujer vio a Zemo, su enojo creció muy rápidamente, y la decepción y confusión también se presentó en ella. ¿Qué hacía Amaia en una misión junto a Zemo?

—Por tu culpa lo perdí todo— dijo Sharon acercándose más al grupo de hombres, pero viendo directamente al barón.

Una onda salió de su cuerpo, y una sensación de tranquilidad llegó a la mujer. La chica no creía que ese fuera el mejor lugar para empezar una pelea, en especial cuando Sharon ya tenía ciertos enemigos de los que cuidarse. Amaia había logrado reconocer aromas en ella de personas que había conocido como la sombra roja, eso no le agradaba, pero confiaba en que Sharon se lo explicaría. Ya que al fin y al cabo, ella la había rescatado, no podía traicionarla de esa manera.

—Sharon, espera— se adelantó Sam con una mano en alto en dirección a la rubia.

Sharon pateó el arma lejos de Zemo, siendo recogida por Amaia que como acto seguido, tocó con su hombro la espalda de la mujer. Una actitud usual en la chica para demostrar su presencia a las personas en las que confiaba.

The Red Shadow: the government agentDonde viven las historias. Descúbrelo ahora