Pesadilla Zombie (Zombie Nightmare)

Capítulo 27 - Tu otra vez

No recuerdo mas nada, la cabeza me dolía por el golpe que recibí por parte de Ben que me hizo quedar inconsciente por unos minutos hasta que desperté amarrada y enfrente mío con unos ojos que me miraban fijamente con mucho odio y resentimiento que no parpadeaba, me miraba con una sonrisa burlona, esa sonrisa que siempre me molesto, Ben estaba sentado con su ropa llena de sangre fresca y con una especie de palo ensangrentado con el que me golpeo la cabeza, intente liberarme, pero me di cuenta que no podía por una cuerda que tenia en la muñecas, pensé en gritar, pero eso podría atraer a algún infectado y aunque tuviéramos la puerta cerrada seria mas difícil salir, no puedo creer que el este aquí, pero debo hallar una manera de liberarme inmediatamente y escapar de aquí.

En cuanto el vio que ya estaba reaccionando y que estaba recuperando el conocimiento se puso de pie y me di cuenta que tenia una pistola en la cintura en cuanto se giro para dejar en la mesa el palo de madera cubierto de sangre con el que me golpeo comenzó a hablar. 

- Aquí volvemos a estar tu y yo, no te imaginas todo el tiempo que tuve que esperar para esto Emily, no te saque de mi mente ni un solo segundo desde que me echaron de aquí por tu culpa y la de tu amiga imbécil esa,- me dijo acercándose a mi y poniendo su rostro junto al mío era desagradable estaba totalmente sucio y olía horrible, peor que los infectados podría decir, su cara tenia sangre seca de hace mucho tiempo que le cubría cicatrices y rasguños que hacían que su rostro se viera mas tosco y macabro y yo me alejaba cada vez que el se acercaba, pero no pensaba decirle nada para que no me vuelva a golpear y hasta que entienda que esta sucediendo y como llego aquí.- pero Gabriel ya se esta haciendo cargo de esa imbécil, la matara así como yo hare contigo.

- Déjala en paz, a ella no le hagan nada por favor! - le grite e intente zafarme con todas mis fuerzas, pero fue imposible el solo me abofeteo muy duro porque sentí además del golpe un ardor increíble en mi mejilla y mi nariz empezó a escurrir sangre otra vez, me metió un trapo en la boca para que no pudiera hablar. 

- Cállate, hoy me escucharas a mi, no sabes todo el dolor que tuvimos que pasar para recuperarnos y volver a caminar sin sentir dolor en algunas partes de nuestro cuerpo, nos dejaron a nuestra suerte estuvimos a punto de morir, pero las ganas de vengarme eran tantas que me mantuvieron cuerdo y me dio la fuerza de seguir viviendo y por mucho tiempo estuvimos ocultos en una cabaña que ni techo tenia y no te imaginas lo difícil que es eso, pero ya es tarde para tu amiga ella ya será una mas de estos infectados que yo hice que entraran esta noche, desde hace semanas que reúno a una horda de infectados y la he traído aquí con mucha paciencia y por fin hoy que todos estaban distraídos y por un lugar que solo yo sabia que podía entrar cuando quisiera, Gabriel y yo los metimos uno por uno hasta que empezó el caos y ahora toda esta Comunidad se ira al carajo, y créeme no fue fácil, pero los buenos para nada que viven en esta Comunidad no se saben ni defender así que hicieron de mi plan aun mejor cuando empezaron a atacarlos y simplemente se dejaron morder haciendo que ahora hayan muchos mas aquí dentro.- yo estaba intentando no llorar por lo que dijo sobre Julie y solamente pensaba en que Nicolás llegara a tiempo, pero Ben seguía hablando sin parar. 

<< Te diré que una vez dentro fue mas sencillo, me escabullí dentro hasta matar a los hombres que estaban haciendo guardia en la entrada y luego solo abrí las entradas para que Gabriel termina de hacer entrar al resto de los infectados y así completar nuestro plan, pan comido, pero sabes que fue lo mas difícil? Estar entro los infectados para que no se dieran cuenta que estábamos allí tuvimos que cubrirnos con sangre y viseras de otros infectados y vagar junto a ellos día tras día, y cuando me asegure de que estaban casi todos dentro te busque por todos lados, fui a tu casa y no estabas allí, luego fuimos a la de tu amiguita y tampoco estabas allí, yo te seguí buscando hasta que te encontré aquí, pero por eso Gabriel se quedo en la casa de Julie para darle su merecido, porque el día que nos echaron dejaron a Lorenzo muy mal herido y murió a los pocos días, si, murió, ustedes no debieron hacer eso sabían que íbamos a tener consecuencias y no pensaron en que el podía morir.- yo solo podía pensar que eso era lo mínimo que se merecía ese idiota.