|| 𝐄𝐥 𝐜𝐡𝐢𝐜𝐨 𝐝𝐞 𝐥𝐚 𝐜𝐚𝐟𝐞𝐭𝐞𝐫𝐢́𝐚 - 𝐂.𝐕 ||

Capítulo 17

- Tú te lo pierdes - suspiré - bien, ¿que querías hablar?
- Sobre los besos...

 
Mierda, empecé a temblar sin saber la razón, estaba nerviosa por unos simples besos que pasaron con él.

 
- No sabía que estaba haciendo Erick, perdón.
- ¿No te gustaron?

Pensé antes de responder.

- No niego que... Fueron buenos - intenté no sonreír, y fallé -
- Puedo hacerlo una vez más?
- Erick, obvio que no - la sonrisa que tenía se borró rápidamente - eso fue en un momento de... Ebriedad, y solamente.

 
- Pero deseas hacerlo otra vez - Lentamente se acercó a mi, su verde mirada no despegaba de mis ojos -

 
- Ya - Lo alejé, cerrando los ojos y abriéndolos luego en seguida - no, no confundas las cosas.
- No, claro que no - Me enseñó una media sonrisa - Oye, quieres ir al Starbucks?
- Estoy aquí con Christopher ahora, podemos ir otro día.
- No, porfavor, en estos años nunca salimos juntos, vamos ahora y después puedes volver con él, que tal?
- Bien, pagaré mi café y voy a despedirme de Chris, y vamos - me levanté yendo hacia el caja -

Christopher estaba junto a su compañera, se veían entretenidos hablando sobre algún tema, que parecía ser chistoso por como reían
Me acerqué a los dos.

- Un café - Le entregué el dinero a Amanda, ya que sabía el valor -
- ¿Algo más? - Me miró con una sonrisa, y negué con un movimiento de cabeza - bien, está cierto.
- Gracias - sonreí y miré a Christopher, que también me miraba - Te molesta si salgo unos minutos con Erick? Vuelvo luego.

- Sin problemas - Dio una pequeña sonrisa acompañada de un suspiro - ve y diviértete
- Gracias Chris - besé su mejilla, y sonrió ante eso - hablamos después.

Volví a la mesa donde Erick, estaba en su celular y cuándo estuve cerca lo guardó rápidamente.
- Hey - Me miró - ¿Vamos?
- Vamos - Sonreí -

Salimos de CoffeeBooks yendo a Starbucks, donde Erick quería ir, si quería café ¿porque no quedarse ahí donde estábamos?

 
- ¿Te gusta el café?

- Que? - Mantenía la mirada en la pantalla de su celular, y aún así se veía hermoso - no, café es horrible.
- No es, Christopher sabe hacer un capuchino que te encantaría.
- Olvida un poco a Christopher - Me miró y posó su mano en mi mejilla - quién está aquí contigo soy yo, no él, Megan.