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Regresar no fue tan sencillo, al menos no con la gran cantidad de reproches que salían de la boca de Sungjae.

Jungkook intentaba ignorarlos, lo que menos quería escuchar en ese momento es que había cometido un error enorme al haber aceptado ese duelo, pero era difícil cada que un nuevo insulto por parte del beta hacía que su orgullo se viera afectado, cosa que por supuesto no le agradaba a su lobo. Lo único que quería su alfa era regresar a la habitación en donde había dejado a Taehyung lo antes posible.

—No me ignores —protestó Sungjae dándole un nuevo golpe en el brazo al pelinegro —solo quiero asegurarme que eres consciente de la gran estupidez que cometiste

El alfa suspiró con cansancio ¿Cuánto quedaba para llegar hasta la casa del beta? Justo ese momento se veía como una buena idea reconsiderar su amistad con el castaño y empujarlo en medio de las escaleras que subían.

—Me lo dejaste claro, gracias —dijo con sarcasmo mostrando una sonrisa falsa como bien el beta hacía cada que hablaba esa forma.

—No me imites ahora, estoy hablando en serio

Jungkook decidió ignorarlo el resto del camino. La noche continuaba y el camino estaba iluminado solamente por una serie de antorchas cada ciertos metros, no había casi nadie en aquella zona, los pocos cuerpos que alcanzaban a ver estaban en rincones, cubiertos por mantas y perdidos en el sueño.

Tampoco fue muy diferente una vez llegaron hasta la casa del beta. Uno de los tres alfas se había quedado dormido sobre la mesa, otro estaba cabeceando en los sillones y el último se mantenía firme junto a la puerta. Incluso, para evitar problemas, Sungjae había tocado la puerta con un ritmo característico antes de abrirla. Los alfas informaron que todo se había mantenido en orden durante el corto tiempo que habían dejado el lugar, de nuevo, Jungkook simplemente ignoró la situación pasando de largo directo a la habitación.

Abrió la puerta con suma delicadeza, si era sincero habría esperado encontrar a Taehyung dormido, pero en su lugar notó como el omega elevó la cabeza en cuanto la puerta se movió. Si hubiera estado dormido no lo habría despertado ni aunque llegara anunciándose a gritos.

—Se supone que deberías estar descansando —dijo el alfa una vez que cerró la puerta después de entrar.

—No puedo dormir —confesó el contrario utilizando su codo para erguirse un poco —¿todo bien?

—Hablemos de eso mañana —esquivó el alfa sentándose en la orilla de la cama en donde se encontraba Taehyung, el rubio se giró un poco para verlo más cerca —necesitas dormir, fue un mal día para ti

—¿Sabes? Puede que seas un súper alfa o algo así, pero también necesitas dormir —argumentó Taehyung moviéndose un poco al otro lado de la cama antes de palmear el lugar que había dejado libre para el alfa.

Jungkook sonrió en pequeño ante el gesto antes de retirarse los zapatos y hacer lo que el omega le pidió. De inmediato el omega se volvió a acercar por lo que les tomó un par de segundos acomodarse hasta que Taehyung quedó abrazando totalmente el torso del alfa.

—Duerme bien —susurró Jungkook acariciando con delicadeza la espalda del omega quien por fin se veía más tranquilo.

—Jungkook

—¿Hmm? —cuestionó, cerrando los ojos al sentirse adormilado. Realmente necesitaba dormir.

—Perdón, por decir que lo que ocurrió fue tu culpa —Jungkook abrió los ojos al escuchar las palabras, pero no movió su cabeza para intentar encontrarse con la mirada de Taehyung, simplemente miro hacia el frente —sé que estuvo mal, que no era responsabilidad tuya cuidar de ellas de esa forma, yo... solo quiero que sepas que en realidad no te culpo

Manada  |  KookVDonde viven las historias. Descúbrelo ahora