Siendo tan diferentes muchos dudaban que llegaran a ser amigos, pero ahí estaban.
¡Y vaya amigos eran!
KiHyun y HyunWoo, conocidos también como el cerebro y la carita inocente del grupo de los 7 revolucionarios del jardín.
Protagonistas de varios dramas infantiles como "él se comió la plastilina" y "es MI amigo". Causantes de varios pleitos, sobre todo por el menor quien no dudaba en hacer presente su voz cuando de una discusión por el mayor iniciaba.
Dos criaturas tan diferentes que nadie creía que podían llegar a ser tan cercanos, es decir, uno por demás de tranquilo y el otro con mucho carácter que demostrar, pero sin embargo y contra todo pronóstico, desde el primer instante que se conocieron lograron convivir a la perfección.
Por supuesto que a veces tenían sus situaciones complicadas ¿a que edad eso no sucede? Pero al final del día siempre volvían a ser amigos y para el siguiente ya ni siquiera recordaban haber peleado.
Pero alguna que otra vez podían haber excepciones y de esas veces salían momentos que quizás no recordarían en el futuro pero que sí son importantes en la amistad entre dos niños.
Cierto día el ingreso a la clase era esperado con ansias por el mayor. HyunWoo había despertado esa mañana muy temprano y felíz. El pequeño se dedicaba a pasear junto a su madre por la casa mientras le contaba lo que había soñado pero la mujer era consciente del motivo de la felicidad del niño y estaba segura que no había pegado siquiera un ojo durante la noche.
HyunWoo y su abuelita, habían preparado el día anterior algunas galletas para que llevara a compartir con sus amigos en el jardín pero él tenía a alguien en mente a quien compartirle primero. Había comentado durante mucho tiempo a su mejor amigo que viajaría a ver a su abuela luego de tantos meses y eso lo ponía feliz, a ambos, ya que el menor compartía su alegría e incluso le había hecho un dibujo a la abuela Son donde aparecían él, HyunWoo y la señora.
El niño aún caminaba junto a su madre quien guardaba en su mochila las galletas, se había dicho a sí mismo que no probaría ni una hasta que KiHyun hubiese comido y su voluntad era tal que ni siquiera insistió en probar las que trajo extra, sólo quería compartirlas con el menor.
Cuando su padre lo llevó hasta el jardín, Honey, Wonnie e incluso Chang olfateando como lo haría un canino se habían acercado a él con curiosidad acerca sobre qué había en la caja, pero poco le importaba la insistencia de los menores, sólo quería compartirlas con su mejor amigo.
Cuando ingresó al salón, buscó con la mirada alguna pista sobre el paradero del menor, pero no halló más que su silla vacía y otros 2 niños saludando hacia él.
Como si su vida dependiera de ello se abrazó a la caja. No estaba en sus planes descuidarla y mucho menos con un ChangKyun-manitos-rápidas cerca, pero comenzaba a frustrarse de no verlo allí dentro.
KiHyun jamás lo dejaba sentarse solo, por lo que de mesa no se había cambiado.
KiHyun no debería estar escondido porque, desde que se le olvidó buscarlo, jamás quiso volver a jugar a eso.
KiHyun no estaba en el patio, la puerta estaba cerrada. Estaba, cuando volteó a ver ingresaba Min con de seguro algún insecto que poner sobre la ropa de HoSeok.
Ahora HoSeok gritaba, y no había ningún KiHyun que gritara para que lo callaran. ¿Dónde estaba?
HyunWoo miraba de un lado al otro buscando algún tipo de señal, cuál sea, pero nada parecía hacerlo aparecer a su lado. Incluso abrazó a MinHyuk... Nada.
¿Estará enojado? Pensó. HyunWoo recordaba a la perfección no haber jugado con alguien que no sea él, pero tal vez estaba enojado.
Cuando la clase inició, la maestra miró a todos sus alumnos pero sentía al sentirse demasiado tranquila escribiendo notó que algo ocurría.
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𝘊𝘭𝘢𝘴𝘦 𝘱𝘰𝘳𝘰𝘳𝘰 ᴹᵒⁿˢᵗᵃ ˣ
Fanfiction"𝘓𝘰𝘴 𝘩𝘢𝘳𝘦́ 𝘢 𝘵𝘰𝘥𝘰𝘴 𝘥𝘦 5 𝘢𝘯̃𝘰𝘴 𝘺 𝘭𝘰𝘴 𝘦𝘯𝘷𝘪𝘢𝘳𝘦́ 𝘢𝘭 𝘫𝘢𝘳𝘥𝘪́𝘯 𝘥𝘦 𝘯𝘪𝘯̃𝘰𝘴" 𝘥𝘪𝘫𝘰 𝘊𝘩𝘢𝘯𝘨𝘒𝘺𝘶𝘯 𝘦𝘯 𝘴𝘶 𝘷𝘭𝘪𝘷𝘦. 𝘗𝘦𝘳𝘰... ¿𝘘𝘶𝘦́ 𝘱𝘢𝘴𝘢𝘳𝘪́𝘢 𝘴𝘪 𝘴𝘦 𝘷𝘶𝘦𝘭𝘷𝘦 𝘳𝘦𝘢𝘭𝘪𝘥𝘢𝘥? . . . .‿‿...