Prólogo

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Para conocerte a ti misma, no es necesario recurrir a técnicas glamurosas ni juguetes sexuales extravagantes. Solo necesitas a la persona correcta. Esa que con solo una mirada haga que se te acelere la respiración. Que con solo una mirada te haga caer derretida, literalmente, en el suelo. Que con una sonrisa haga que tu corazón se desboque, tus piernas tiemblen y tus bragas se humedezcan.

Y si con una mirada puede lograr tantas cosas.

¿Se imaginan lo que sucedería cuando te toque?

Sentir esa deliciosa corriente eléctrica recorrer tu cuerpo entero. Sentir como se te eriza todo el bello del cuerpo con su simple toque. Y te ves deseando ese sencillo toque, aunque sea una vez más. Sentir tu cuerpo vibrar de placer con solo una leve caricia.

O cuando sientas sus labios por primera vez sobre los tuyos.

Un beso.

Un simple beso, puede hacer sentir a una persona diferentes cosas. Desde cientos de mariposas revoloteando en el estómago, hasta una extrema excitación.

Una mirada, una caricia y un beso.

Esa esa la mezcla perfecta para el éxtasis total.

Siempre que se administren correctamente y en el orden exacto desde luego.

Seducción©  ✔️(+18)#1 LentaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora