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Sky Miravalles

"Batalla Final."

Has sentido esas inmensas ganas de querer destruir todo a tu paso sin importarte el que o qu7ien salga afectado en estos momentos me siento así, quiero acabar con todo a mi paso sin importarme una mierda quiero a mi familia completa, entera como le falte una sola pieza que dios lo agarre confesado1. Esperamos a que amaneciera para poder ir a la casa de La Esperanza, con todo listo, los hombres de mis abuelos y nosotros armados hasta los dientes con las máscaras que representan a los Miravalles puestas nos subimos a los autos descubrí que el Audi A8 era de Thiago, a y los Jackson, mis primos, Austin y yo vamos en el BMW mis padres y mis abuelos van en una camioneta blindada.

Saco el freno del auto y me vale una mierda todo, pasó los otros autos y me coloco de primera y meto el acelerador a fondo sin importarme una mierda, pero está claro que con Eithan y Alex nada es limpio y lo compruebo cuando unos autos nos interceptan y de donde salieron no tengo la mayor remota idea, Adley maldice por lo bajo tomando una de las armas que llevamos y arrancando de una patada el techo de mi carro.

—¿¡ENCERIO!?—Le grito haciendo los cambios y girando el volante para que Adley le dé a los tipos del carro.—¿No podías acaso disparar por la ventana?

—Déjame pensarlo.—Dice sentándose mientras que rodeamos a los carros con los tipos en un tiro en la frente.—No así es más divertido.

Meto el freno causando que se dé contra mi asiento y maldiga en vos baja, me fulmina con la mirada y yo solo me encojo de hombros, en la parte de atrás los tres hombres que me acompañan se ponen a discutir sobre quien es mi favorito. Niego mientras me concentro en llegar lo más rápido que me sea posible a dónde está mi madre y abuela.

«¿El sendero del bosque?»

Cual bosque pendeja y cual sendero estás loca o que.

«El bosque de La Daga y el sendero que tú y Samantha hicieron cuando corrían en lo carros de juguete.»

Agradezco que la voz de mi cabeza aparezca en estos momentos, no que me recuerde a Samantha, pero sí que me diga lo del sendero, veo una entrada al bosque que está muy bien escondida y giro en seco causando que los tres idiotas se vallan de lado y aplasten a Austin, lo único malo es que el sendero está lleno de baches y piedras que más tarde le van a pasar factura a mi pobre carro y todo me va costar dinero que no tengo en estos momentos.

Voy con una paciencia por temor a que alguna piedra golpe alguna parte del carro y nos baremos y nos toque caminar y como el universo me odia el carro empieza a sonar raro y por más que le doy marcha y no enciende en un arranque de ira me pongo a pegarle al volante, bajar y volver a subir a todos los santos que existen por el estrés, la colera y la frustración de que nada me sale bien. Abro la puerta, sacó la ametralladora y mi bate junto con la máscara, cierro de un portazo y con arma en mano y bate en la espalda empiezo a caminar por el sendero unos pasos atrás vienen los chicos.

A medida que avanzamos y nos adentramos en el bosque el cielo se empieza a teñir de tonos amarillos y anaranjados ¡Genial! Vamos a llegar de noche lo que nos faltaba eso para nosotros es una muy mala señal, a lo lejos veo unas luces y supongo que son las de la casa o lo que quedaba de ella, apresuramos el paso y para nada porque cuando llegamos no hay nadie, minutos después aparecen los demás y en nuestros rostros se ve reflejada la misma pregunta: ¿Dónde carajos están? Y como si fueran llamados por la ley de atracción hacen su aparición saliendo del bunker, y el solo recuerdo de la rata del otro día de me revuelve el estómago, pero aparto esos asquerosos pensamientos.

Para alegrar más la noche Eithan y Alex llegan con coronas atrás de ellos vienen mi abuela y madre siendo arrastradas-literalmente-del cuello por las cadenas de sumisión que tienen.

Los Hijos Del Caos [ Caos 1.]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora