El silencio se hacía a tu alrededor tras anunciado tu regreso a casa. Miras al suelo decepcionada con tus ojos cristalinos, decepcionada como si hubieras esperado que allí hubiera alguien para recibirte.
No obstante, levantaste tu cabeza y abriste tus ojos de la impresión al escucharlo.
- Bienvenida a casa, te has tardado.
Giraste levemente mientras las lágrimas contenidas hasta entonces comienzan a deslizarse por tus mejillas dejando esa imagen hacia el recién llegado. Sin dudarlo una sonrisa tierna se dibuja en tus labios lanzándote hacia sus brazos. En milésimas de segundo sientes como te rodea mientras escondes tu cara en su pecho.
- Eres tú el que se ha tardado, Kakashi baka. - Sonríes al sentir su calor, al sentir su amor, ahora recuerdas que color desprende el calor de una persona que te importa y a quién le importas.
- ¿Qué ocurre (...)? ¿Estás bien? - Preguntó intentando separarse de ti para observar tu rostro, pero no le dejaste, te aferraste más a ese abrazo y no lo dudó. Te volvió a estrechar contra sí mismo.
- Solo déjame estar un poco más así, por favor. - Asintió acariciando delicadamente tu cabeza.
- Siempre estaré para ti.
- Si tu intención era que dejara de llorar con esa frase vas a conseguir lo opuesto. - Soltaste una leve carcajada a la que él siguió con otra igual.
Tras unos cuantos segundos te alejaste de su abrazo para observarlo a la cara. Enmarcó tu rostro son sus manos limpiando las pocas lágrimas que surcaban a través de él. Pudiste comprobar que a pesar de todo estaba algo preocupado por encontrarte en ese estado.
- Estoy bien, solo que al venir aquí me acordé de ciertas escenas de mi vida que realmente no me ayudaban en esta situación.
- Entonces debo deducir que aquí era ¿no? Tu casa.
- Sí, pero a pesar de que fuera mi casa no la siento como tal.
- ¿A qué te refieres?
- Para mí, mi hogar no es un lugar. - El peli plata aun te miraba extrañado intentando saber qué era lo que querías decir, pero la respuesta se hizo llegar por otra persona.
- Para ella el hogar es allí donde está la gente que le importa, ¿no es así (...)-chan?
Giraste hacia tu derecha encontrándote con esos dos akatsukis.
- Así es Itachi. - Respondiste regresando la vista al hombre que aun te tenía abrazada.
- Casi nos da un infarto cuando sentimos un chakra venir hacia ti (...)-chan. - Refutó el líder.
- Perdonarme, pero no tenía tiempo de anuncios sobre mi llegada.
- Querrás decir que no querías perder tiempo en eso cuando querías verla a ella.
A pesar de su máscara pudiste notar como su cuerpo temblaba levemente, signo de que estaba algo nervioso por el comentario de Itachi. Una risilla se escapó de tus labios captando la atención de tu pareja y para hacerle todo un poco más ameno cambiaste de tema de conversación.
- ¿Habéis encontrado algo chicos?
Ambos negaron mientras te separabas algo del sonrojado shinobi que lograba ocultarlo gracias su máscara.
- ¿No notan nada raro en este lugar?
- ¿Te refieres a la enorme sombra que hay en medio de toda esta villa? - Cuestionó Itachi siendo seguido por la explicación de Pain.

ESTÁS LEYENDO
Quédate conmigo
FanfictionEn una misión por recuperar a un antiguo alumno no es lo único que recupera Kakashi. Tras años sin saber de ella consigue encontrarla, una pequeña esperanza se abre ante sus ojos. Alguien a quién creía muerta, alguien a quién nunca pensó que vería...