Parte 3: Regreso

282 26 2
                                    

Kakashi estaba mirando el lugar por donde había salido, pero tú seguías sin aparecer. En ese momento escucharon grandes ruidos de cómo se estaba desmoronando todo. El polvo comenzaba a salir por la puerta por donde había logrado escapar. El joven peli plata seguía demasiado preocupado puesto que no había rastro de ti por ninguna parte. 

Tras un gran estruendo todo quedó en silencio, el polvo que se había amontado por el derrumbe comenzaba a tomar asiento en el suelo, pero seguías sin aparecer.

- (...) no puedes hacer esto, me dijiste que te esperara. - Susurró el joven lo suficientemente alto como para que todos los presentes lo escucharan y sin esperarlo una persona ajena a ellos 4 respondió. 

- ¿Acaso solo tú puedes llegar tarde, Hatake? 

Todos miraron a la izquierda pudiendo ver como Pakkun aparecía en una roca seguido por alguien más. Salías detrás de esa gran roca en la que estaba sentado la invocación del peli plata quién nada más verte se acercó lentamente hasta situarse a un metro escaso de ti. 

Se quedó durante unos segundos observándote como si aun no fuera capaz de entender cómo es que estabas delante de él. Sin nadie poder adivinarlo te abrazó sorpresivamente entre sus cálidos brazos. Escondió su cara en tu cuello aumentando un poco la fuerza sobre tu cuerpo. Estabas más que sorprendida, él no solía hacer ese tipo de cosas cuando eráis críos, pero a pesar de la sorpresa no tardaste en corresponder su abrazo y de la misma manera ocultaste tu cara en su cuello. 

- Estás aquí. - Susurró contra la piel de tu cuello sintiendo como tu torso vibraba al hablar. 

- Así es y no tengo pensado irme de nuevo. 

- Te he echado tanto de menos. 

- Yo también te he echado de menos, pero shhh... no querrás mostrar tu lado sensible delante de tus alumnos¿no? 

Kakashi levantó su cabeza para poder mirarte, enmarcó tu cara para seguidamente depositar un suave beso en tu frente. 

- Me alegro de que estés de vuelta. 

- Si, ahora toca irnos a casa. He destruido la guarida y Orochimaru estaba dentro con Kabuto, pero no dudo en que hayan escapado. Será mejor darnos prisa antes deque nos encuentre y haya pelea. Algunos no estamos en condiciones. 

El hombre enfrente de ti se apartó un poco para que los tres jóvenes pudieran verte. 

- Así que tú eres la famosa (...). - Afirmó el peli negro sin dejar de observarte. 

- ¿Sabes quién soy? 

- Alguna vez Kabuto estuvo de bocazas. Me enteré de que también estabas aquí prisionera y que eras de la villa, pero no sabía nada más sobre ti. Sin embargo, por lo mucho que decían sobre tus poderes me parecía raro que siguieras aquí cautiva. 

- Supongo que a ti no te hicieron lo mismo, no te pusieron las mismas restricciones que a mí. Me medicaban y sellaban el chakra de tal manera que apenas tenía fuerzas para moverme. Era casi como una muñeca de trapo, solo tenía un poco de fuerzas porque reposaba. Fuerza para no dejar que ese hombre se acercara a mí. - Explicaste de lo más tranquila.

- Es impresionante que hayas estado tanto tiempo en este lugar y de esa manera.Será mejor regresar cuando antes para que la Hokage pueda revisarte. - Comentó la peli rosa que había estado en constante preocupación por tu estado física y más al haberles hecho el descubrimiento de las condiciones de tu cautiverio.

- No es por meter prisa, pero deberíamos alejarnos cuanto antes de este lugar. - Sugirió Naruto apoyado por su compañero recién rescatado. 

- Opino lo mismo. 

Quédate conmigoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora