Provócame

•𝙲𝚊𝚙𝚒𝚝𝚞𝚕𝚘 𝟷𝟷•

Capítulo 11: No somos nada. 

Olivia.
Nada más llegar a casa, estaba tan cansada que no tenía más ganas que de irme a dormir, cosa que hice al instante.

Al día siguiente.

Me desperté a la misma hora de todos los días. Fui al baño, me pegué una buena ducha y me preparé, media hora más tarde, estaba desayunando en la cocina.

Como siempre, a las 8 y 11 minutos, salí de casa para encontrarme con Kate y Lena e irnos a clase.

Llegamos a clase y en la puerta me encontré a Jaden fumando que cuando me vió, me guiñó un ojo a lo que yo me sonrojé y seguí mi camino hacia clase junto con las chicas.

Las tres primeras horas se me hicieron eternas, llegó por fin el recreo, fuimos a la cafetería y almorzamos mientras conversábamos.

-Chicas, se me había olvidado decíroslo, como nuestros padres están de viaje, Jaden va a organizar una fiesta el sábado por la noche, ¿venís no?- dijo Lena.

-Yo obvio que si, donde haya alcohol, ahí estoy presente- contestó Kate 

-¿Y tú, Oli?- me preguntó Lena.

-Em, si claro, supongo que mis padres me dejarán- respondí dudosa.

-¡Genial!- contestó ilusionada

Seguimos hablando. Al rato, empecé a notar una mirada clavada en mí, miré de quién se trataba y nada más y nada menos que de Jaden.

Me miró y me hizo un gesto que no logré entender al principio, cuando lo entendí, me reí y vi como se levantaba para ir al baño.

-Chicas, voy al baño, luego nos vemos- dije cogiendo mi mochila y despidiéndome.

-¿Quieres que te acompañemos?-preguntó Lena.

-Ehhh...No, tranquila, nos vemos después- respondí intentando que no se notara lo nerviosa que estaba.

Fui hacia el baño, al entrar no había absolutamente nadie.

De repente, una puerta se abrió y me arrastró con él hacia dentro.

-¡Eres gilipollas! ¡Que susto me has dado!- dije asustada con una mano en el pecho.

-Anda tonta, ven y dame un besito- dijo haciendo un puchero de lo más adorable.

Junté mis labios con los suyos, nuestras bocas hacían la combinación perfecta.

Su mano bajó hacia mi cintura y la agarró con fuerza, yo subí las mías a su cuello, éste lo rodeé y acaricié su nuca con mis uñas.

Un par de minutos después, nos separamos por la falta de aire.

-Jaden, esto que estamos haciendo no está bien, no me gusta mentirle a tu hermana- dije sacando el tema de siempre.

-Olivia, ¿otra vez con el mismo tema? A mi tampoco me gusta estar así contigo, pero de momento es mejor dejarlo así, hasta que encontremos el momento para poder decírselo. - me respondió con una voz muy ronca que hizo que mi piel se erizara.- Aparte no entiendo tu prisa por contárselo, estamos liados no en una relación- contestó con un tono cortante.

Esas palabras, "estamos liados no en una relación" me hicieron quedarme callada y mirar para otro lado, nos quedamos unos segundos callados, hasta que decidió volver a hablar.

-¿Lo siento vale? No quería hablarte así, no estoy acostumbrado a esto- dijo.

-Nos vemos después, ¿vale?- le contesté y salí del baño.

-¡Joder!- oí que dijo y seguidamente un golpe.

Cogí mi mochila y salí de allí intentando no volver, mis ojos pedían que las lágrimas que retenidas salieran.

Mis sentimientos por Jaden cada vez eran más claros, y no se hasta que punto iban a llegar.

Las tres últimas horas se me hicieron aún más largas que las anteriores, hasta que por fin, sonó el ansiado timbre que daba por finalizada la ultima clase.

Decidí enviarles un mensaje a las chicas de que hoy me recogía mi hermano, cosa que era mentira, pero necesitaba estar sola. Iba caminando hacia casa cuando un coche se paró a mi lado.

-¿A ti no te recogía tu hermano?- me preguntó Jaden.

-Em...Esto...Sí, solo que le ha surgido un inconveniente y al final no ha podido venir- respondí intentando no sonar nerviosa.

-Sube anda, te acerco- me dijo.

Me lo pensé dos veces y subí, el trayecto fue silencioso hasta que decidió él mismo romper el hielo.

-¿No crees que tenemos que hablar? - me preguntó mientras conducía.

-No hay nada de que hablar, Jaden, está todo muy claro- respondí tajante sin mirarle.

-Joder Olivia, ya te dije que lo siento, no estoy acostumbrado a esta situación. - me contestó.

-Mira Jaden, no tengo nada de ganas de hablar ahora mismo, solo déjame en mi casa y ya está- respondí fríamente.

No obtuve respuesta. Aceleró la velocidad, yo miraba como conducía y no pude evitar fijarme en sus nudillos, algo amoratados y con sangre seca.

-¿Qué te ha pasado en los nudillos?- pregunté mirándole.

-Nada- respondió frío sin mirarme.

En cuestión de minutos estaba en la puerta de mi casa, me bajé del coche sin despedirme y él arrancó, su coche desapareció por la carretera.

Metí la llave en la cerradura, abrí y tiré la mochila en la entrada, subí a mi habitación y cerré la puerta de un portazo.

No aguanté más y lo único que me salió en ese instante fue llorar,  llorar porque cada vez sentía algo más fuerte por él que me rompía por dentro.

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Hoola de nuevo!

Nuevo capítulo, con un poco de drama :). Lo siento, era necesario.

Votad y comentad para más!

Nos vemos en el siguiente♡

-bluechanges