Capítulo 12

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Contengo la respiración para disfrutar del aire en mi cara, del sonido del lugar y de la impresionante vista, quizá no era la manera en que quería que fuera la última noche que tuviera en París, no por lo menos la última antes de regresar a Londres y poner todo en orden para decidir emprender una nueva aventura con Duncan, él me mira entre ansioso y nervioso, sé que no la está pasando bien con todo lo que sucedió en la cena.

—Di algo —resopla
—Es hermoso todo, gracias.
—Viniste callada todo el trayecto Lany, sé que algo ronda en tu cabeza, ¿Estamos bien? ¿Quieres que me retracte? —niego
—¿Quieres hacerlo?
—Siento que cualquier respuesta que dé será utilizada en mi contra —suspiro y levanto mi ceja
—Creí que teníamos una relación donde nos teníamos confianza, donde ambos dejábamos que el otro lograra sus sueños y el otro no se entrometía en ellos, es verdad que quería regresar a Londres para estar en el bufete de papá, pero también ahora está de vuelta Chad, y él podría hacerse cargo de ello, le diré la verdad en estos días sobre nuestro parentesco, la verdad es que no veo a George con muchas ganas de acercarse a él, así que los planes de papá de heredar su negocio a uno de sus hijos sigue en pie, y él de verdad es un gran abogado; así que aunque si me tomó por sorpresa toda la situación, que no tuvieras el valor de decirme "Leilany pasa esto", me conflictuó un poco pero también yo te oculté un hijo por prácticamente dos años así que soy la menos indicada de molestarme porque no lo hayas dicho, ¿Quieres hacerlo? Te apoyo, para eso estamos, mi familia está donde estés tú, porque eso es lo que quiero, porque siento que pertenezco a este lugar —señalo su corazón —y donde esté él, yo estaré bien.
—Lany, yo... quiero hacerlo, de verdad, y es que aunque soy socio en muchas empresas esta realmente me apasiona manejarla, y sé que el equipo que haré con Meghan podremos llegar muy lejos —siento que se me revuelve el estómago solo con escuchar el nombre —quiero que llegue pronto un día en que pueda tomarte a ti, a mis hijos, porque planeo tener muchos contigo —besa mi nariz —y solo recolectemos viajes y buenos momentos, quiero ser un padre presente sabes, quiero estar ahí con ellos todo el tiempo posible, pero necesito sacrificar quizá unos cuantos años ahora que Adrien está pequeño —giro nuevamente hacia donde se encuentra la torre Eiffel para observarla me puedo acostumbrar a esta vista definitivamente, y tener un pequeño francés o francesita sonrío al imaginar como será
—¿En qué piensas?
—No sé solo... me imaginé teniendo un bebé en Francia.
—¿Crees que la cigüeña nos haya respondido?
—¿Te gustaría que lo hubiese hecho?
—Lany claro que me gustaría, lo sueño, deseo tener otro bebé contigo —gira de inmediato hacia mí y me carga entre sus brazos para llevarme a un sillón que hay en la terraza que parece más una cama por lo grande que es.
—¿Te has imaginado cómo sería?
—Creo que la genética Dunne es fuerte viendo a Adrien así que —acomoda su barbilla justo en mi vientre
—¿Lo imaginas rubio?
—Me imagino otro Adrien con ojos verdes.
—¿Y si es niña?
—Una pequeña pelirroja con ojos verdes, igual de hermosa que su madre, de hecho un poco más, porque será nuestra hija, fruto de nuestro amor —acurruca sus labios justo donde tiene recargada su cabeza, donde su bebé; nuestro bebé se está formando —pero a la vez no quiero que sea niña, porque sabes, podrá hacer conmigo lo que quiera, no podré ejercer ese rol de papá gruñón —me río.
—Pensé que no eras papá celoso —niega.
—Lo soy, solo no lo demuestro tanto como mi hermano; y entiendo porque era celoso contigo, todos estábamos encima de ti, nos tenías a todos, no hay ningún Dunne que no haya caído bajo tu embrujo.
—Albert y Brandon no cuentan.
—Albert quizá no, nunca se besaron ¿O si?
—No
—Pero Brandon si, él estaba loco por ti, pero fue más inteligente que yo al notar que alguien estaba en tu corazón; pero al final todos y cada uno quisimos ser parte de tu vida.
—¿Por qué no buscaste estar conmigo antes? —Me levanto un poco para quedar recargada sobre mis brazos y verlo directamente a los ojos —¿Por qué esperaste tanto? Me refiero a antes de que estuvieras con Cassandra yo en esos momentos estaba tan aterrada con lo que sentía por Chad y para mí era tan imposible porque sentía que él solo me veía como su hermana menor así que quizá eso no hubiese sucedido; yo me hubiese enamorado perdidamente del mejor amigo de mi hermano sin complicaciones.
—Lany, siempre estuve enamorado de ti, pero le era leal a Chad, debía de cuidar a su hermanita y además eras tan pequeñita aún y yo era un muchacho hormonado, no quería ser un idiota contigo, sabes quería probar, experimentar.
—Pudiste esperarme un par de años y pudiésemos haberlo hecho juntos
—¿Cómo cuando leías literatura erótica?
—Ves teníamos buenos lugares de donde sacar ideas pero le tuviste miedo al éxito. —Le guiño un ojo
—Siempre he creído que las cosas pasan por una razón, no era nuestro momento, no era nuestro lugar, sin esos acontecimientos no tendríamos un hijo tan grandioso como el que tenemos
—Duncan sobre eso...
—¿Si?
—¿sientes que te ato con una paternidad que no te pertenece?
—¿Qué dices Lany? ¿De dónde sacas eso?
—Es solo que... —Quiero decirle lo que me comentó Meghan, pero sé que le daría poder a ella sobre mí y no le daré el gusto.
—No sé, quizá tú sientes que tienes muchas responsabilidades con Adrien que a la mejor no quisieras.
—Para nada Lany, me da hasta miedo que lo pienses, yo no lo procree correcto, pero; es mío Leilany, quise tenerlo conmigo desde que supe de su existencia, pero totalmente me tuvo en su merced desde esa tarde en que nos vimos en ese hospital y me dio los brazos para que lo cargara no titubeo, no lloró, no dudó, él solo supo que nos teníamos él uno al otro, que lo iba a proteger toda la vida, que lo amaría más que a mi mismo el resto de ella, y no pretendo que tú y yo terminemos en algún momento de nuestra vida, pero si eso llegara a suceder, siempre seré el padre de Adrien, por favor nunca me lo vayas a quitar
—Siempre será tuyo; siempre será nuestro, y no, nunca nos alejaremos quiero pasar el resto de mi vida contigo; también quiero esos recuerdos con nuestros hijos. —acaricio el rostro de mi futuro esposo y después de ello mi mano baja a mi vientre a veces es inevitable es como si tuviera un imán; Duncan lo nota.
—Planeo poner muchos bebés aquí, será la casita de nuestro amor por nueve meses.
—Duncan te amo, los amo, amo mi familia, nuestra familia.
—Yo también ahora... te tengo otra noticia muy importante.
—¿Cuál será?
—¿Te imaginas casándote en París? —nunca lo había pensado pero ahora que viviremos aquí, y que un pequeño ser se está formando dentro de mi, imagino e incluso me ilusiona y sé que será lo mejor
—Podría ser —le sonrío
—No me preguntes como, por que es prácticamente imposible pero conseguí Versalles para nuestra recepción.
—¿Qué? —llevo mis manos a mi boca de la sorpresa
—Así es... quiero que nos casemos en Versalles ¿Es muy descabellado? ¿Estoy loco?
—¡Oh no! claro que quiero hacerlo
—Entonces, en tu regreso haremos todos los preparativos para nuestra boda.
—Quizá tengamos que adelantar la fecha —le diré de una vez que será papá ¿Para qué esperar?, solo lo necesito a él a nadie más, y el lugar me parece ideal, si quizá pensé en hacerlo a lo grande, pero... ¡Ahí voy!
—¿Tanta prisa por amarrarme? —sonríe divertido y me abraza para comenzar a besar mi cuello
—Claro, eres el mejor partido de los Dunne —me burlo —puedo dejar de trabajar toda mi vida y solo dedicarme a ir a todos los eventos sociales de los clubes, suena a algo a lo que me puedo acostumbrar —bromeo —la verdad es que... te tengo una noticia —gira hacia a mí para verme a los ojos
—¿Cuál Lany? —suspiro y su celular comienza a sonar, muerdo mis labios justo cuando iba a soltar la primera palabra, él saca su teléfono del bolsillo de su pantalón y me observa. —¿Puedo responder?
—Claro Duncan
—¿Hola? —pone el celular en altavoz y se escucha sollozar a alguien del otro lado.
—¿Duncan?
—Si, ¿Quién habla?
—Soy Meghan —llora —me acaban de asaltar y el único teléfono que recordé era el tuyo
—¿Dónde estás? Vamos para allá —ella le da la dirección donde se encuentra, se escucha vulnerable y desorientada, me puede caer en el hígado, pero eso no se le desea a nadie. —según mi gps estoy a quince minutos, estamos saliendo para allá.
—¡Gracias! Perdón por la molestia, solo...
—No te preocupes.
—Espero que Leilany no se enoje —solloza y él me voltea a ver yo niego con la cabeza
—Para nada, ella entiende. —besa mi frente mientras cuelga.
—¿Qué era lo que me ibas a decir preciosa?
—Nada amor, lo mío puede esperar —le sonrío de boca cerrada mientras dejo un beso de pico sobre sus labios.
—No era como quería que fuera la última noche en París Lany.
—No te preocupes tendremos más noches en este lugar. ¡ahora tenemos una misión, rescatar a tu compañera de trabajo!
—¡Gracias, por eso te amo! —se levanta de inmediato para ir por nuestras cosas adentro del lugar y mis manos van hacia mi vientre.
—Aún no es momento para que papi sepa de ti —se me hace un nudo en la garganta y me dan ganas de llorar, pero me las aguanto porque este embarazo lo quiero disfrutar y prometo que no lloraré como con Adrien, papá está aquí conmigo, y pronto seremos marido y mujer.

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¡Ese Duncan respondiendo como siempre cuando menos debería! 

Leilany estuvo a punto de decirle que serán papás 

¿será que realmente hayan asaltado a Meghan? 

Ahora esperemos a que se entere de que será papá que por fin pegó el chicle 

Teorías aquí apenas vamos en el capítulo 12... aún muchas cosas pueden pasar. 

No olviden dejar su estrellita por favor. 

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¡Nos leemos el próximo martes!

Labios Sellados 3 "Nada Es Lo Que Parece"Donde viven las historias. Descúbrelo ahora