DUNCAN
Me doy la media vuelta todo parece ir en cámara rápida mientras que yo siento que apenas y puedo caminar, siento una mano detenerme.
—Duncan ¿A dónde vas? Ella te necesita —río de manera sarcástica y lo volteo a ver
—Ella te necesita a ti, lo escuchaste, yo... solo fui parte de su vida mientras tú fingías estar muerto. —quito mi brazo con desagrado —tú no eres nada mío, para mi Chad murió esa tarde de junio, no eres ni serás jamás mi mejor amigo o hermano.
—Nunca te pedí que volviéramos a serlo, porque sé que ni siquiera estabas en la disposición, de inmediato me viste como tu rival, nunca te acercaste a mí más que para decirme que peleábamos por ella, como si me lo impusieras nuevamente, no me interesaba ser el tercero en discordia, ni siquiera reclamé a Adrien como mío cuando bien podría hacerlo.
—Lucharía por él y lo sabes, no te hubiese dejado que me alejaras de él.
—Y nunca lo haré
—porque sabes que por más sangre que los una para él yo soy su padre —él asiente.
—Sé que un padre es el que cría no el que engendra eso me consta, también me consta que me ganaré el cariño de mi hijo como papá, pero no moveré nada hasta que Leilany y tú estén de acuerdo, ante todos él es tuyo.
—¿Qué tienes tú que no tenga yo? —mi mano se pone en puño —¿por qué ella siempre te vio a ti como su máximo? Cuando yo me he desvivido por ella, cuando nunca la he dejado de pensar prácticamente desde que era un niño, siempre la vi para mí, y tú siempre estabas entre nosotros, ella nunca me amó, yo solo fui su salvavidas, su segunda opción.
—yo bien podría decir lo mismo de ti... —se recarga en la pared de enfrente mientras echa su cabeza hacia atrás. —sé que no me crees, pero para mí todo esto es nuevo, no estoy en contra de ti Duncan, porque tú para mi si eres mi hermano, Albert y tú, pero también sé que la sangre Dunne pesa, y que ambos cometieron errores.
—Yo no la besé Chad. —él me observa
—No soy tu verdugo Duncan
—Siento que si, que eres el peor de todos.
—No —niega y se acerca —Duncan guardaré tu secreto.
—¿Qué ganas con eso? si me dejaste en claro que perdí mi oportunidad
—Qué le prometí a mi hermana que jamás le diría si te veía besando a alguien más, así que supongo que tienes buena suerte.
—¡Gracias por la ayuda!
—Ella te ama... ustedes dos tendrán que hablar en su momento, no sé porque me haya nombrado, pero si de algo estoy seguro es que tú eres el hombre de su vida. —niego y las lágrimas quieren comenzar a salir, mientras que me recargo en la pared y me dejo caer hasta el piso, él se pone en cuclillas frente a mí y pone su mano sobre mi hombro.
—Te prometí que no la buscaría como algo más, y lo hice, quizá estoy pagando el haber roto una promesa, te extrañé, los extrañé a ambos pero te prometí que si tú regresabas yo me alejaría, no sé qué demonios sucedió, porque fingiste o que fue lo que pasó pero prometo que lo descubriré, pero estás aquí, y aunque digas que no, ella no dijo mi nombre, la escuché claramente dijo Chad, quizá siempre me aferré a algo que nunca fue mío.
—Yo no debería de decirte esto, pero ella
—Terrence —habla el doctor detrás de él, Chad lo ve y luego a mí.
—Leilany está estable, pero puede volver a suceder, no quiero sonar alarmista. —Chad asiente y se levanta.
—¿Nos debemos preparar para lo peor? —comenta y yo siento mi corazón romperse
—Haré lo que esté en mis manos, pero sabes que podría no resistir.Y golpeo mi puño contra el piso porque estoy dispuesto a alejarme pero no perderla para toda la vida, porque puedo llevar una vida viéndola ser feliz con alguien más, pero no en una caja, no así, y le pido al universo, a Dios, a lo que sea que esté allá afuera a que si ella se recupera yo me iré de su vida, si ella despierta, si ella no deja solo a mi hijo, si no nos deja solos, entenderé que no soy parte de su vida, le diré adiós y no por falta de amor, sino porque amar a alguien es saber que esa persona debe de ser feliz con quien ama aunque esa persona no sea yo, aunque yo nunca haya sido el hombre de su vida.
—Duncan...
—Yo... me iré... necesito aire —como puedo me levanto.Muchas cosas vienen a mi cabeza, nunca estaré preparado para "lo peor" así que me aferro a mi promesa, me alejaré de ella, pero que ella esté bien, que ella despierte.
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Labios Sellados 3 "Nada Es Lo Que Parece"
RomanceLeilany Berry en su adolescencia fue una maestra para guardar uno de sus mayores secretos, el amor que compartía con su hermano adoptivo, tristemente la vida es efímera, y lo que pensaban que sería un amor para toda la vida terminó en un trágico acc...