The way you love me ||Kim Namjoon||

Capítulo 4

Kim Namjoon

Después de aquel problema que había tenido con Seori, la espere media hora detrás de la puerta de su habitación y después me fuí a trabajar en la oficina que tengo en casa.

Ahora mismo estoy acabando unos detalles para lección de mañana, de repente unos golpes en mi puerta se hicieron presentes.

—Pase, por favor—dije y ví a la señora Yoo .

—Señor, la cena está lista—informó.

Fui a comer, me senté en la mesa, ví que Seori no está, solté un suspiro y mire a la señora Yoo.

—¿Y Seori?—pregunté.

—Su esposa, no ha salido de su habitación, le lleve fruta en la tarde y la llamé a cenar hace unos minutos, pero no respondió.

—Señora Yoo, ya me preocupe—dije y tomé las llaves de su habitación.

Subí las gradas apresurado, toque por última ocasión la puerta de Seori, pero no respondió.

—Seori, voy a pasar—le advertí.

Entré y la ví dormida encima de su laptop con sus audífonos puestos, así se ve tan tranquila cómo si fuera un ángel.

Le quite los audífonos, la tomé en mis brazos para ponerla sobre su cama y taparla con las cobijas.

Después mire su computadora, apagué la música y ví que estaba a punto de imprimir la tarea que les asigne.

La revisé, ví que está completa, sin embargo dos hojas más abajo escribió:

Señor Kim, lo detesto y no es tan guapo cómo todos dicen.

Solté una pequeña risa, lo borré e imprimí su tarea, para después dejarla sobre su escritorio.

—Descansa Seori, lo siento mucho esposita, la verdad es que no sé cómo actuar cuando estoy contigo—dije, apagué la luz de su habitación y me retiré de su habitación.

Baje al comedor, la señora Yoo me sirvió la cena y me miró.

—¿La señora está bien?—preguntó.

—Sí, solo que ya se quedó dormida.

Terminé de comer, subí las gradas y fuí a mi habitación, me puse pijama, caí rendido en mi cama y cerré los ojos.

—Buenos días mi amor—es la voz Seori, abrí los ojos y la ví acostada a mi lado.

—¿Qué haces aquí?—pregunté nervioso.

—Soy tú esposa, es normal que duerma contigo—dijo y acarició mi rostro.

—Pero tú y yo no nos amamos, es más hasta ayer me odiabas, no entiendo tú conducta extraña—dije confundido.

—¿Seguro que no me amas?—preguntó y se subió encima mío y dejo un beso en mi cuello—¿no te gusto ni un poquito?

—Si me gustas, no tienes idea de las ganas que tengo de besarte—hice que  me viera a los ojos y cuando quise probar sus labios, la alarma sonó.

Todo fue un sueño, me desperté solo, sin ella a mi lado, así que me levanté, tomé una ducha, me vestí, me arreglé y baje a desayunar.

—Buenos días señor, su esposa se fue con un muchacho está mañana—me informó la señora Yoo.

—¿Que características tenía ese muchacho?—pregunté.

—Alto, pelinegro y tiene un piercing en la ceja—es Jungkook.

—Gracias señora Yoo—dije y puse dos cucharadas de azúcar a mi café.

—¿Señor está bien?—preguntó y cuando tomé un sorbo de mi café lo escupí—se puso sal en el café en vez de azúcar.

—Señora Yoo, creo que me estoy volviendo loco—dije y limpie él desastre que hice.

—Tranquilo señor, todos perdemos la cabeza cuando estamos enamorados, me pasó con mi esposo—dijo y yo pensé; estar enamorado de la loca de Seori, jamás ni en un millón de años.

—Creo que tiene razón.

Salí de casa, ví la bicicleta de Seori en el estacionamiento y solté un suspiro, la señora Yoo no mintió, ella se fue con Jungkook

Me subí a mi auto, me dirigí a la universidad, al llegar ví que es algo tarde, así que corrí al salón de clases.

Entré y encontré a Jungkook riéndose con Seori, él la tomaba de las manos mientras ella sonreía, ni siquiera se dieron cuenta que estoy presente.

—Buenos días, antes de empezar, espero que todos hayan hecho su tarea.

Hicimos un repaso de todo y empecé a dar materia nueva y dejé de pensar en mi esposa, hasta que la hora de clase se acabo.

—Señorita Han, recoja la tarea de sus compañeros y llévela a mi oficina, por favor—pedí y todos empezaron a entregarle los trabajos.

Ella recolectó todos los trabajos y me siguió hasta mi oficina, los puso sobre mi escritorio.

—Sí no necesita nada más, me retiro—dijo formalmente y se iba a ir pero la detuve.

—Seori, lamento lo que dije ayer, no lo dije pensando, la verdad es que no eres tan horrible—dije y ella me miró molesta.

—Señor Kim, tengo clase me voy—dijo pero no la deje salir.

—Seori, por favor, discúlpame—dije mirándola a los ojos.

—Namjoon, necesito tiempo, por favor—dijo y salió de mi oficna.

Me senté a calificar los trabajos y alguien tocó la puerta, es la señorita Jung.

—Buen día Señor Kim, solo vine a decirle que nosotros fuimos seleccionados para dar una conferencia de economía en la universidad de Busan—me informó Wheein.

—¿Cuándo nos iremos?—pregunté.

—El viernes, ya está todo planeado, también iremos con él profesor Jung Hoseok—me informó.

—Gracias, si no necesita nada más, puede retirarse—dije y ella se acercó a mí escritorio.

—¿Qué le parece si almorzamos juntos?—puso su mano sobre la mía pero la retiré.

—No puedo, voy a almorzar con mi novia—dije y ella se sorprendió—el hecho de que no esté casado, no significa que no tengo pareja.

—Lo siento mucho, Señor Kim.

Ella salió de mi oficina, yo salí detrás de ella a mi siguiente clase y todo él día pase de clase en clase, hasta que mi día terminó por fin a las cuatro de la tarde.

Le mandé un mensaje a mi esposa:

¿Regresamos juntos a casa?, puedo esperarte a la vuelta de la universidad

Ella respondió:

Iré a almorzar con mis amigos, nos vemos más tarde.

Bufé molesto, guarde todos los trabajos en mi maletín, me dirigí al estacionamiento y me subí a mi auto.

Conduje hasta mi casa y al llegar ví que alguien me espera en la entrada.

—¿Qué haces aquí?—pregunté.