Capitulo 3.5

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"La cena. Parte II"

__________ Byers

"Alguna vez fui como ustedes. Mantenía mi ira dentro. Trataba de esconderme de ella, pero el dolor se acumulaba, se expande, hasta que finalmente, enfrente mi dolor y empecé a sanar".

Las palabras que alguna vez Kali menciono resonaron en mi cabeza, y de alguna manera, tomaron aún más sentido está noche.

Estoy sentada en medio de Will y Once, Joyce está del lado de Ce, y al frente mio tengo a Richie y a Emma; todos los demás asientos están ocupados por los perdedores, por la familia Tozier, y por supuesto el señor y la señora Jones, es una mesa bastante grande a decir verdad.

Oh, si, por poco olvido mencionar que también había un gato, el gato de los Jones, Fluffy, un nombre muy dulce para un gato tan malvado.

¿De verdad era necesario traerlo?

La incomodidad era tanta que nadie se había atrevido a mencionar nada, ni siquiera Alice, quién solo refunfuñaba entre dientes jugando con su comida.

– El pollo está muy rico, querida – se atrevió a romper el hielo el señor Went.

Y por primera vez, todos levantamos nuestras miradas de la cena, y volteamos a ver al hombre, que solo agachó la mirada avergonzado, y continúo comiendo.

– Es verdad, señora Tozier, todo quedó delicioso – dijo Stanley con amabilidad, algo que es muy costumbre de él.

Sin embargo, pude notar que estaba algo tenso por la presencia de Emma.

Maggie agradece, dándole un poco de comida en la boca a Sophia.

Un escalofrío me invade por todo el cuerpo al sentir la cola esponjosa del gato en mis piernas.

– ¿Está todo bien, Joyce? – pregunta la señora Tozier – ¿Hay algún problema con la comida?

– Oh, no, está todo delicioso, Maggie – sonríe – nunca había probado algo tan rico como ésto.

Cierro los ojos por unos instantes al sentir las uñas del gato enterrarse en mi piel, por sexta vez, «Maldita bola de pelos»

– Eres muy amable, gracias.

Sacudo mi pierna por debajo de la mesa intentando que Fluffy me deje en paz, pero sigue tan aferrado que tuve que recurrir a darle un pedazo de pollo con delirio, para que me suelte.

Richie alza las cejas con curiosidad cuando me ve soltar un suspiro de alivio, mientras se lleva el vaso de jugo a la boca.

Agitó mi cabeza forzando una sonrisa, indicando que todo estaba bien. Aunque no lo fuera.

– El chismoso de mi hijo me contó que trabajas en el psiquiátrico – menciona Maggie, lanzandole una uva en el aire a Richie, logrando darle en la cabeza – ¿es divertido?

La señora Jones, "Rachel" analiza a mi madre con aire de superioridad, con una ceja levemente alzada; creo que ya se de donde saco Emma su forma de ser.
La mujer es idéntica a su hija, ojos claros y rubia platina, le cálculo unos 45 años, incluso más.

Por su parte, el señor Jones "Marcus" es un hombre robusto, de cabello castaño, de ojos color cafés, que solo permanecia sumergido en sus propios pensamientos, parecía no importarle lo que sucedía. Estoy segura que él y el papá de Wheeler se llevarían bastante bien.

– Creo que "divertido" no es palabra muy adecuada – responde tranquila Joyce soltando una risita – es algo más bien un tanto estresante, porque algunas veces los pacientes se rehúsan a seguir las indicaciones, y tienes que contenerte para no cometer alguna locura.

Starry Eyes (Richie Tozier) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora