Starry Eyes (Richie Tozier)

Capitulo 10.- "Romeo y Julieta"

_________ "Doce" Ives

Me encontraba en una guerra mental en si, tocar la puerta o darme la vuelta y regresar por donde vine.
Estar de nuevo frente al lugar donde todo comenzó, era como si volviera a desenterrar el pasado.

No te arrepientas de nada, para bien o para mal, todo sirve de experiencia.

— ¿Vas a tocar? — Preguntó Mike Hanlon a mi espalda — no es por nada, pero llevamos 10 minutos parados en el mismo lugar y quiero ir al baño.

— Eddie vive aquí a lado.

Me estremecí de tan solo escuchar su nombre.

— Stan — lo regaño, Beverly.

— Ni de broma entraré ahí — vio con miedo la casa de al lado — su mamá me aterra.

Todos nos quedamos en silencio por unos instantes. Al parecer esperábamos que Richie dijera algún comentario obsceno de la mamá de Eddie pero no sucedió.

Todos volteamos a verlo.

— ¿Qué? — él se encogió de hombros.

De acuerdo eso fue raro.

— Bien me cansé, tenemos que hablar — le dijo de pronto Beverly, mientras lo arrastraba con ella un poco más alejado de nosotros.

— Pero si no he hecho nada — alcancé a escuchar como Richie reprochaba.

Me quedé viendo como se alejaba, escuchando a mi cabeza gritar que hiciéramos las pases.

Pero mi orgullo era grande.

— ________ — me presionó, Mike — por favor.

Tome una bocada de aire

«Bien, no hay más vuelta atrás»

Me arme de valor y di cuatro toques en la puerta.

Los chicos se alejaron para darme espacio, a excepción de Bill que continuo a mi lado sosteniendo mi mano.

— E-está bien — me dijo — n-no me apartaré de t-ti.

Sonreí nerviosa.

— Gracias, Billy.

Se escucharon pasos lentos aproximarse, lo que provocó que los nervios aumentaran aún más en mi.
Hace más de siete meses que no había pisado esta casa, en donde tenía millones de recuerdos buenos y malos; recordé la primera vez que llegue a este lugar, sin saber lo que me estaba a punto de esperar.

«Es el lugar adecuado para comenzar de nuevo, aquí estarán a salvo»

Recordé las palabras de Hopper de ese día.
Por supuesto que no sabía de lo que hablaba.

La puerta se abrió lentamente, haciendo que me lamentara por haber tomado está decisión tan drástica.

— ¿________?

Mordí mi labio inferior, al volver a encontrarme con esos ojos color avellana.

— Hola, James.

Él parecía perplejo ante mi presencia, era como si estaba viendo a un mismísimo fantasma.
Sin embargo, una media sonrisa se dibujó en sus labios.

Y los recuerdos regresaron.

«¡No seas egoísta, Doce! ¡Seamos realistas, si no fuera por nosotros estarías en el laboratorio en este preciso momento!»

— Creí que...

— Solo vengo a despedirme — lo interrumpí

Su sonrisa se esfumó.