Más que un original. Alina Libro #2. (Elijah y Klaus Mikaelson)

Capitulo 39: Te debo la vida...

— ¿Cómo es posible? —preguntó algo alterado—. ¿Qué hiciste?

—Te dije que encontraría la forma de romper la maldición, y lo logré…—solté sonriéndole mientras le ayudaba a sentarse—. Finn aprendió todo lo que sabe de tu madre, y ella me enseñó todo también, incluso a detener sus maldiciones… —expliqué sonriéndole antes de él abrazarme con desesperación—. Siento haber tardado tanto…

—No importa, me has salvado…—soltó él radiante de energía…—. Aunque no entiendo porque le hiciste creer a mis hermanos que morí…

—Necesitaba que creyeran que habías muerto. Lo siento, pero tu familia es conocida por no saber guardar secretos, y ahora lo que más necesito son trucos escondido para ir por Finn…—expliqué mientras ambos nos parábamos del suelo—. Además te enseñaré…

— ¿El qué? —preguntó confundido.

—Todo lo que sé Kol, eres un brujo, uno con mucho conocimiento y poderoso. Por lo que confió en ti, para enseñarte todo lo que sé, lo único que pido a cambio es…—dije seriamente y el interrumpirme.

—Tienes mi lealtad, totalmente— soltó sonriéndome para luego acercarse más a mi—. Alina, me salvaste de la muerte, te debo la vida literalmente, puedes contar conmigo para lo que quieras…—dijo exactamente lo que esperaba escuchar.

—No esperaba menos de ti…—le dije acariciando su mejilla—. Ahora creo que es más que obvio decir que nadie debe saber que estás vivo…

— ¿Cómo lo harás? —Preguntó con curiosidad—. Se supone que consagraran mi cuerpo a esta tierra.

—Sencillo, fingirás tu muerte, y yo fingiré hacer la consagración…—solté sonriendo, ya que todo lo tenía planeado—. Por ahora, les diré que llevé tu cuerpo a un lugar seguro, que es donde te ocultaras todo el tiempo que sea necesario…—le dije yendo hacia la salida de la tumba—. Te dejaré allí con mi grimorio, y nadie podrá salir o entrar, solo por seguridad…

—Es entendible…—soltó siguiéndome—. ¿Y donde será eso? —preguntó al seguirme a mi auto, y por suerte no haber nadie cerca…

—A las afuera de la ciudad…—solté encendiendo el motor—. Creo que nunca te lo mencioné, pero vine a esta ciudad un par de veces en el pasado, tengo una pequeña cabaña olvidada a las afuera de esta. Te quedarás allí, con esto…—le dije dándole un celular nuevo—…ocultaré el lugar con mi magia, y solo me llamaras cuando sea necesario…

—Oculto, no salir, nadie entrar, solo llamadas de emergencia, captado…—soltó burlonamente antes de sonreírle y levantar mi mano para ponerlo en un hechizo del sueño, no era seguro ni que él mismo supiera donde íbamos…

Luego de horas de conducir, llegué a la cabaña, estaba muy alejado de todos. Casi imposible de encontrar, perfecta para ocultar algo, aunque le faltaba un poco de remodelación. Creo que Kol estará muy ocupado aquí.

Sin perder más tiempo lo desperté con una sola palabra, para luego él verme confundido.

—No es seguro que sepas a donde te traje…—solté saliendo del auto—. Vamos…—le dije antes de él salir del auto y seguirme—. Saca las cosas del baúl. Empaqué algunas cosas mientras iba al cementerio, creo que son suficientes para un par de semanas, luego te traeré mas…—expliqué para él ir sin protestar por las cajas, y entrarlas a la casa.

—Este lugar está algo abandonado…—soltó él al dejar las cajas en la entrada—… sin ofender…

—Lo sé, hace muchos años que no venia aquí…—solté buscando los interruptores de la electricidad. Solo me faltaba que los hayan cortados, aunque hace mucho compulsé a varias personas para que no dejara que pasara—. Aquí está…—dije al encontrar el interruptor y encenderse las luces de toda la casa.

—Bonito lugar a pesar del desorden— soltó el mirando a su alrededor.

—Gracias, tu limpiaras el desorden te mantendrá ocupado…—solté antes de salir de la casa, y buscar mi grimorio, antes de pronunciar algunas palabras para que también Kol pudiera tocarlo—. Aquí tienes—dije al entrar a la casa y darle mi bien más preciado—. Cuídalo con tu vida, ahora me tengo que ir…

—Lo sé, y gracias por salvarme de nuevo…—soltó sonriéndome antes de besarme dulcemente la mejilla en forma de agradecimiento por lo que sonreí.

—Es lo menos que podía hacer…—le dije sonriendo antes de salir de la casa—. Es hora de ocultarte…—solté antes de decir el hechizo de ocultación, era algo fuerte, pero sería casi imposible que alguien lo encontrara, y si lo encontrara no podrían entrar—. Invisique…—pronuncié para darle el toque final, que nadie la viera…

Una casa la cual nadie puede localizar, entrar ni ver, era el lugar perfecto para esconderse, tal vez hasta me traiga a Hope para mantenerla a salvo de todos…. Sin demorarme más arranque el motor hasta casa, tenía que darme prisa antes de que ambos originales empezaran a sospechar…

Tal como había predicho, al revisar mi celular en camino a casa, me encontré con varias llamadas perdidas de Elijah, y Nik, no puedo tardar unos minutos fuera de casa y ya se preocupan por mí, como si no pudiera cuidarme sola…. Estuve tentada a llamar a mi prometido, pero lo mejor era terminar de llegar e inventarme algo rápido…

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— ¿Por qué tardaste tanto? —soltó Nik al yo llegar a casa, encontrándome con ambos hermanos preocupados.

—Estaba despidiéndome de Kol, y ocultando su cuerpo para luego consagrarlo…—solté encogiéndome de hombros y Elijah asentir como si nada—. Deberías dejar de preocuparte tanto por mí Nik, puedo cuidarme sola…

—Lo sabemos Alina, pero nuestra tía puede aparecer en cualquier momento, sin contar con Finn y Freya…—soltó Elijah siendo sobreprotector por lo que rodé los ojos.

—Tenía que ocultar a Kol, no es para hacer tanto drama…—dije subiendo las escaleras, sin importarme nada—. Y si me disculpan, estoy algo cansada…—solté al subir al segundo piso e ir hacia mi habitación.

Rápidamente me quité el vestido, quedándome en ropa interior antes de entrar a mi cama, después de todo, si estaba cansada, y necesitaba recuperar fuerzas para el día de mañana…

— ¿Sigues despierta? —preguntó Elijah entrando a mi habitación, y cerrando la puerta con seguro.

—claro, ¿Qué ocurre?, ¿sigues enfadado conmigo? —pregunté sentándome en la cama, sin importar que me viera en ropa interior, por lo que sonrió antes de sentarse a mi lado.

— ¿Podrías darnos algo de privacidad, hay decenas de oídos supernaturales en esta casa…?—soltó acariciando mi rostro antes de yo asentir y pronunciar el hechizo—. ¿En dónde estabas realmente? —preguntó de golpe al terminar el hechizo y sostener cuidadosa pero firmemente mi rostro.

—a veces olvido lo bien que me conoces…—solté antes de besarlo—. Estaba con Kol, está vivo…—dije sobre sus labios y sentí como se tensionaba a mi lado.

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Holaaaaa is hermosas lectoras, hace mucho que no subo cap gracias al paron de TO ¬¬, pero en fin, les este cap por adelantado, les subire los demas en la semana, ya que ando algo corta de tiempo por la universidad

Besoss xoxoox