Capitulo 20: mi viejo amigo Kol...

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—Niklaus— le llamé luego de que se fuera Elijah y él le hiciera una llamada a Marcel, pero me ignoró siguiendo su camino—. Odio hacer esto, pero no me dejas otra opción— le dije antes de levantar mi mano y poco después el caer en suelo de rodillas de dolor.

—Love tenemos cosas por hacer…—comenzó diciendo pero el dolor le hizo pausar—. ¿Podría parar con ello? —preguntó quejándose por lo que de mala ganas me detuve.

—Ven— le dije antes de irme con mi velocidad vampírica hasta mi habitación y él seguirme—. ¿Estás bien? —le pregunté al él llegar.

—Por supuesto, tenemos cosas por hacer…— soltó indiferentemente por lo que me le acerqué y le detuve sosteniéndole la mano.

—nada le pasará, ¿de acuerdo? —Le dije sabiendo que sabía a que me refería—. Tengo suficiente poder para enfrentarme hasta sola a tu madre si en algún momento se mete con Hope…—solté acariciando su rostro y el soltar una lagrima—. No dejaré que nada le pase a tu hija, aunque me cueste la vida en el intento…

—Moriría si algo les pasara a alguna de las dos…—dijo él sinceramente con lagrimas en el rostro por lo que no pude evitar besarle.

—Lo sé— le dije al terminar el beso—. Pero tampoco podría vivir si algo le pasara a tu pequeña…— solté sonriéndole por lo que también me sonrió.

—Love tengo aun que bajar— soltó de repente—, Marcel llegó, me ayudará a hacerles entrar en razón a mis hermanos— explicó rápidamente por lo que asentí—. Te lo hubiera pedido a ti, pero sé que aun les tienes cariño, así que mantente aquí— asentí de nuevo antes de que se fuera.

Creo que por primera vez en la vida pensaba hacerle caso a Nik. No veía la hora de irme de su vista, pues estaba haciendo un esfuerzo sobrehumano para decaer delante de él. La falta de sangre y el hambre por ello que tenía era más de lo que podía soportar, tanto que estaba a punto de desmayarme delante suyo, sin importarme nada…

Por lo menos la comida humana normal podía comerla sin problemas, aunque el hambre siguiera igual, pero algo es algo. Sin perder más el tiempo busqué mi grimorio en busca de lo que sea que pudiera ayudarme, aunque sabía perfectamente que solo era tiempo perdido, por lo que le dejé la cama y salí de en busca de alguien que debe saber que me ocurre.

Bajé en donde se suponían estábamos desayunando, pero allí no había nadie, por lo que usé mi súper oído vampiro para buscarle, y lo encontré sufriendo en manos de Marcel.

—Podemos seguir haciendo esto todo lo que quieras—escuché que le decía Marcel antes de entrar al estudio de Nik, y encontrarme a Kol sentado con un pequeño abrecartas clavado en la mano.

—Detente— le dije rápidamente—. Marcel, me encargó yo…

— ¿Klaus te mandó? —preguntó desconfiadamente.

—no, yo me haré responsable si pregunta, no te preocupes, terminaré de hablar con él— le dije seriamente para luego de mala ganas el irse.

Rápidamente quité el abrecartas de la mano de Kol, e hice un sencillo hechizo para cerrar la herida.

—Así está mejor— le dije sonriéndole.

— ¿Por qué me ayudas? —preguntó claramente desconfiando de mi.

—Mira podemos ayudarnos mutuamente— solté antes soltar unas palabras de un hechizo para que nadie pueda escucharnos—. Algo me ocurre— le dije de golpe—, por alguna razón vomito toda la sangre que ingiero.

—es normal, los humanos no toman sangre, y menos una bruja, tu cuerpo la rechazará, es una consecuencia del hechizo— explicó rápidamente como si fuera obvio.

— ¿acaso tu madre piensa matarme de hambre?, porque realmente nunca he pasado tanto tiempo si comer, y menos con un hambre tan grande— le dije cruzada de brazos.

—Intenta comer comida normal, eso saciará tu hambre— soltó el burlonamente, pero no le encontraba el chiste.

—Lo hice, pero sigo con hambre— dije cortantemente—. La verdad estoy comenzando a volverme loca de ansiedad, y no sé cuánto tiempo podré parecer estar bien para que Nik no sé de cuenta…— pensé en voz alta.

—es tu problema, sino estás viendo yo tengo mis propios problemas ahora mismo también— soltó fríamente refiriéndose seguro a estar atado.

—Estás ahí porque quieres, Nik solo quiere tu lealtad, no sé porque solo no se la das— solté como si nada encogiéndome de hombros.

—al contrario de ti, no confió en él, cada vez que alguno de nuestros hermanos hace algo que no le agrade nos ha clavado una daga, dejándonos dormir por años. A mí por mi parte lo ha hecho una docena de veces…—explicó con notable desprecio.

— ¿así que es eso, no te unes a tu hermano porque te ha menospreciado…?—le pregunté burlonamente—. ¿Sabes cuantos siglos he huido de Niklaus creyendo que iba a matarme si me veía?, lo responderé por ti, ¡un milenio!, más de lo que debería haber sido. Pero si algo he aprendido cuando volví es que él no es un monstro como piensas, sé que en el fondo le importas tanto como cualquiera de sus hermanos…— le dije seriamente mientras me le acercaba, pues estaba mas que segura que estaba rompiendo su caparazón.

—Tú eres diferente para él, Alina, no es lo mismo, no has tenido que vivir toda tu vida con él. Estoy seguro que hasta hace unos días ni siquiera tenias idea de que había muerto al igual que Finn— soltó teniendo razón por lo que me quedé sin palabras.

—tienes razón, no tenía ni idea, aunque tampoco pregunté, supuse que los había dejado ir…—solté algo triste y culpable de no haberme preguntando antes sobre sus paraderos—. Por cierto, ¿Cómo moriste? —pregunté de repente cambiándole el tema.

—Tus amigos los Salvatores tuvieron que ver— soltó de repente por lo que le vi algo sorprendida—. Necesitaban completar el tatuaje del pequeño Gilbert para encontrar la cura, así que para hacer el camino corto, me mataron…

—nunca lo mencionaron… lo siento— intenté disculparme, pero él no dejaba de verme molesto, por lo que me acerqué hasta su asiento y me agaché para que me viera a los ojos—. Juro que no tenía idea de que tenían que ver con tu muerte…

—Por supuesto que no, estabas muy ocupada con Damon…—soltó él molesto por lo que le sonreí, y le besé la mejilla.

—Suficiente tengo con Elijah y Nik celándome, para que empieces tú también— le dije riendo por lo que también rió.

—no te preocupes no tengo intención de ser otro de tus perritos falderos, además Niklaus me mataría si mostrará interés en ti— soltó él sonriéndome coquetamente, por lo que reí—. Aunque eso no signifique que dejé de hacerlo— volví a reír—. Por eso mi madre te quiere humana, sabe el efecto que tienes en sus hijos…—dijo de repente cambiando el tema, pero sonaba más que había pensado en voz alta—. No importa…

— ¿Hablarás con Nik entonces?, ¿le darás una oportunidad para que se disculpe? —le pregunté poniéndome de pie, pues había pasado demasiado tiempo aquí, Nik deber haberse dado cuenta de que no estaba en mi habitación.

—por ti por supuesto, sabes que estoy de tu lado, aunque sé que eso no es suficiente para que me suelten— respondió burlonamente, por lo que rei, antes de dar la vuelta, y la puerta abrirse de repente.

—¿Qué haces aquí? —preguntó Nik algo molesto al verme allí.

—Hablábamos, pero ya me iba, estoy segura que ambos tienen mucho de qué hablar— solté antes de irme, y cerrar la puerta…

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Holaaa aqui les dejo este mini cap, y realmente espero que les guste, y por si se lo preguntan aun quedan dos caps antes de la pausa de una semana, el 21 lo subiré el martes, y el 22 espero tenerlo terminado el jueves :3

P.D: he estado pensando en que me preguntaba (si quieren responder), en como que personaje, sea actriz o cantante, creen que se pareceria a Alina....

Más que un original. Alina Libro #2. (Elijah y Klaus Mikaelson)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora