Una consecuencia llamada realidad

0 0 0
                                    

Por momentos la Esencia fue acosada por la confusión que un insistente arrepentimiento le provocó, mas esto no le importó pues la creación simplemente continuó, ignorando todo malestar al enfocarse mayormente en su curiosidad fortalecida por conocer un poco más, por ello siguió su trayecto sin considerar lo que dejó atrás, pues la Esencia continuó su viaje por aquella soledad, alejando con su resplandor toda oscuridad pero no así la corrupción que poco a poco se fortaleció en su interior, y ello sucedió porque la Nada de Tavh jamás se retiró, sino ésta a la creación en todo tiempo de grandes palabras le compartió, conocimiento que a la creación le brindó gran fascinación, sensación que en ella se intensificó conforme por el Caos avanzó; siempre prestando atención a su alrededor, aprendiendo con sorpresa las maravillas de la Existencia del Eterno Creador que hasta ese instante no le habló y la propia Esencia tampoco sintió gran preocupación, sólo por su igual a quien había dejado atrás pero en ello decidió no pensar, pues tuvo la seguridad que en algún momento debería regresar, además que Tavh por un motivo el cual no comprendió, le fue posible seguir percibiendo la cálida sensación emitida por el interior de su igual, pese al tiempo y distancia que había llegado a pasar; detalle que le otorgó mayor confianza a la brillante Tavh, quien gracias a ello decidió continuar, esto con la intención de conocer más, y así compartir lo aprendido con su igual, sin embargo hubo un imprevisto que nunca fue capaz de contemplar y por causa de la curiosidad no pudo considerar, pues después de haber avanzado tanto y dejado su lugar atrás, paulatinamente Tavh dejó de percibir la existencia de su igual, pues para la Esencia tuvo mayor importancia los diversos objetos que en el principio le lograron impresionar, mas con el pasar de los tiempos la soledad le comenzó a incomodar, haciendo parecer su deseo como algo no tan importante como así ella en el Principio llegó a considerar, pero a pesar de contemplar incontables creaciones mas allá; sin importar cuánto tratase de viajar, pareciera como si nunca los fuese a alcanzar, pero esto no impidió que Tavh prosiguiera aferrandose a su curiosidad, padeciendo en ocasiones a causa de una fría e incómoda sensación, la cual si bien al principio no le molestó, el carecer de su igual, con el pasar de los momentos, ésta fue adquiriendo mayor intensidad al punto de desvanecer en ella la curiosidad que le hubo motivado para continuar, siempre vagando por la oscuridad, aferrada a su pensamiento de llegar al sitio que había podido admirar mientras permaneció en su lugar; siendo su deseo el cual le impulsaba a no regresar sino avanzar cada vez más, en ocasiones deteniéndose por un momento para contemplar las diversas figuras que el Caos comenzaban a adornar, algunas de éstas conocidas pero otras extrañas ante la perspectiva de Tavh.
Aquella creación que al principio todo lo contemplado a su alrededor disfrutó, fue cayendo en arrepentimiento conforme prosiguió, pues algo inesperado aconteció, y fue que poco a poco Tavh comenzó a olvidar la cálida sensación que hubo disfrutado al estar con su igual, alcanzando un punto en el cual ese deseo inicial comenzó a luchar contra la nostalgia recién en la Esencia desarrollada; terminando afectada por su ambición al querer conocer más e iniciando en su interior un encuentro de emociones que lentamente le condujo a la frustración, llegando a convertirse Tavh en una representación del Caos, pues constantemente se esforzó por continuar con la intención de llegar al final, encontrar ese sitio en la lejanía que parecía jamás alcanzar, mientras a su vez padecía por el escaso recuerdo de su igual que de pronto empezó a extrañar, provocando tal mezcla de emociones en Tavh que ésta repentinamente dejó de avanzar para poder descansar, sin embargo no cesaron los pensamientos y sentimientos muchas veces impactando entre ellos; esto convirtiéndose en una gran frustración que a Tavh le inquietó, pues pronto aquello sólo le otorgó desesperación, la cual aumentó porque sin importar cuánto progresó, al observar alrededor, solo consiguió apreciar mas allá la absoluta oscuridad, pues las brillantes luces que esperaba encontrar aún yacían alejadas lo suficiente como para empezar a creer que nunca de cerca las podría admirar, por tal motivo y con intención de encontrar un poco de tranquilidad, Tavh se dirigió hacia un conjunto de Birkath flotando en la soledad, Mundos materiales surgidos a causa de los Elementos que a la Esencia no pudieron consolar cuando por fin consiguió percatarse de la realidad, y ésta fue, que no debió alejarse de su igual porque ahora no tenía nada para disfrutar, ello al haber desaparecido ese insistente deseo, el cual fue reemplazado por la frustración que en Tavh surgió cuando comenzó a tratar de rememorar el camino de regreso a su lugar, sin embargo éste no logró encontrar, ya que hubo esperado guiarse con ayuda de la cálida sensación que en el Principio Alefh le provocó, mas al tratar de contemplar a su alrededor y viajar hacia cualquier dirección, la creación poco a poco sintió una agobiante desesperación, pues sin importar cuánto se llegaba a alejar, al final volvía al sitio en dónde yacían aquellos vacíos Birkath.

Melodías de VerdadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora