Muy lejos del lugar de donde se encontró la Creación que como Alefh el Eterno Creador nombró, quien aún continuó siendo su igual, la brillante Esencia nombrada como Tikvah, permaneció en el sitio donde El Todo les concibió, siempre acompañada por la Creación que tantas cosas respecto a la Verdad le compartió, ambas existencias escuchando con atención las enseñanzas del Eterno Creador, esa sabiduría que en su interior les brindó; momentos en los cuales Malak-Emeth y Tikvah permanecieron en total tranquilidad ó siendo el silencio no material interrumpido por las constantes Ubraia en las que mencionaron tanto sobre la Verdad, agradecimientos dirigidos hacia la Eternidad por todo detalle que el Eterno Creador les llegó a mostrar, en especial a Tavh, quien finalmente logró apreciar la realidad respecto a ese deseo que hubo fortalecido su curiosidad, y lo cual le terminó alejando de su igual, situación que expresó en las Palabras surgidas de su interior llenas de tristeza y dolor, el reflejo perfecto de su evidente aflicción, lo que le motivó para no detenerse en su adoración conforme apreció las creaciones alrededor, esos Birkath que le transmitieron una cálida sensación, similar a la provocada por su igual, ello porque sin Tikvah ser capaz de comprender en su totalidad, cada figura tuvo en su interior una mínima porción de su igual que por largos tiempos les hubo dedicado diversas Ubraia antes de haber sido atraída por la falsedad, resultando ser esto lo cual Tikvah percibió, solamente el recuerdo de quien en el Principio le acompañó y por causa de su deseo abandonó, motivo que por instantes hizo dudar a la brillante Creación que constantemente contra esa culpa luchó, esforzándose por permanecer, y sobretodo no dejarse engañar por aquello sucedido con anterioridad, pues la enigmática voz se mantuvo susurrando palabras extrañas en su interior, provocando en la Creación gran confusión; causando tal situación gran impacto en Tikvah, al punto que Malak-Emeth decidió dirigir constantes Ubraia hacia la Eternidad, peticiones constantes para que a su acompañante le fuese brindada la fuerza para continuar, lo cual provocó que la Existencia del Eterno Creador hablase a la brillante Creación que como Tavh concibió, ello para compartir Palabras de Verdad, éstas recibidas por ambas Esencias que no dejaron de exaltar: —Dos Esencias llamadas Alefh y Tavh fueron concebidas por la Esperanza ó la Última Ancestral, ello como una sola creación que a su vez un pequeño todo conformó y el cual como Tikvah se le conoció, mas ésta por mi Existencia así volverá a ser una sola Hejad, más no ahora ni en éste tiempo eso pasará, ya que ambas han desobedecido a mi Voz procedente de la Eternidad, mas a pesar de esto vendrán los tiempos cuando una porción de cada Esencia a la otra se unirá, no por materia sino existencia, y así algo nuevo surgirá y esto traerá Verdad en medio de esa oscuridad la cual les impide contemplar la realidad —Mencionó la existencia del Eterno Creador por medio de su Voz a manera de una suave Ubraia que a las Esencias logró cautivar, sin embargo a pesar que toda Palabra fue capaz de escuchar, Tikvah en silencio decidió continuar, dejando de exaltar ante aquella Verdad que debía afrontar, pues si bien no toda consecuencia fue provocada por su actuar, sin duda a causa de su deseo y debido a ello, Alefh se hubo retirado para quizás no volver jamás, algo que de acontecer, la Esencia debía enfrentar y tolerar, mas el pensamiento referente a buscar otra Creación como igual rápidamente lo desechó y de éste se apartó, pues sin importar la supuesta realidad, en su interior algo inexplicable sintió, esto le motivó a creer en las Palabras del Eterno Creador, referente la llegada de un tiempo en el cual Alefh y Tavh serían nuevamente una Hejad: —Porque ante la presencia de esa nueva Esencia se encontrarán miles y miles que por medio de ésta nueva Hejad me honrarán, la cual morará en lugares altos pero pocos escucharán, porque al tener en su interior la Verdad, demasiados le rechazarán, y esto sucederá para traer al Caos tranquilidad, antes de enviar a mi Existencia que tomará a quienes me hayan honrado y a la Eternidad les guiará —Aún pese al haber escuchado las Palabras de El que Todo lo puede contemplar, la brillante Tikvah continuó emitiendo Ubraia de tranquilidad conforme esperó el cumplimiento de aquella Promesa que recibió desde la Eternidad, siempre mostrándose paciente en apariencia mientras en su interior una lucha de sentimientos y pensamientos soportó, mas esto no impidió que siquiera adorando al Eterno Creador, ya que esto le ayudó como una grata distracción, siendo afectadas las creaciones a su alrededor, que ante la sorpresa de Malak-Emeth comenzaron a prosperar por causa de la presencia de ambas Esencias, pues a causa de su resplandor todo Elemento fortaleza recibió, alejando de estos toda corrupción que pudiese impedirles perdurar un poco más, sin embargo a pesar de los impresionantes sucesos que comenzaron a pasar, ningún detalle consiguió tranquilizar a Tikvah y su interior no pareció afectado por lo ocurrido en el lugar, ya que el constante remordimiento perturbando su pensamiento, provocó que la tristeza en la Esencia se hiciera más intensa, al punto que poco a poco perdió la fuerza para exaltar al Eterno Creador, lo cual causó preocupación en la Mensajera de la Verdad, quien en un tiempo gratas Palabras le logró brindar, mas en ese momento sus Ubraia decidió cambiar, esto para pedir a El que Todo lo puede contemplar, le brindase apoyo a Tikvah, lo cual provocó la reacción por parte de la Existencia del Eterno Creador, Quien a Malak-Emeth se dirigió: —Tú que me has obedecido y creído en Mí, no dudaré en cumplir la Promesa que anteriormente te brindé, por lo cual no debes temer, pues pronto llegará tu igual y debido a esto es necesario que permanezcas un poco más en éste lugar —Habló El que Todo lo puede contemplar, dirigiendo cada Palabra al interior de la Mensajera de la Verdad que con atención le pudo escuchar, mientras contempló a su similar en tristeza total, sumida en un silencio que en ocasiones interrumpió para emitir diversas Ubraia las cuales le ayudaron a expresar el dolor y la aflicción dominando su interior, esto provocó que a su alrededor los Birkath tuviesen cierta reacción por causa de las Palabras que Tikvah emitió, en las cuales sobre eventos pasados y próximos habló, acontecimientos verdaderos que anunciaron tristeza y dolor, pero también señalaron tiempos de tranquilidad que Tikvah tanto anheló poder disfrutar, pues su interior padeció de una constante aflicción, lo cual causó que en las figuras flotando a su alrededor, sucedieran diversos cambios que llamaron su atención; tormentas y temblores fue lo que contempló, una reacción por parte de los Elementos a la tristeza emitida por la Creación: —Ahora tú que me escuchas siempre con atención, debes recibir mis Palabras y guardarlas en tu interior, pues es necesario que te unas a Tikvah para que juntas formen una Hejad y así de ustedes surja algo más, creaciones que llegarán a prosperar como así lo hablé a la Última Ancestral —Aquella inesperada indicación, provocó que Malak-Emeth dejase de emitir Palabras hacia el Eterno Creador, lo cual motivó la curiosidad de Tikvah que al preguntar, de la Mensajero de la Verdad obtuvo una certera contestación pues le compartió lo dicho por el Eterno Creador que resonó en su interior, teniendo como consecuencia y contrario a lo esperado; Tikvah comenzó a exaltar la Verdad al considerar aquello como una petición imposible de rechazar, pues ya a causa de los eventos ocurridos con anterioridad, tuvo temor de cometer otra equivocación, por ello aún cuando ambas Esencias comenzaron a dudar al carecer de compresión y a pesar que la corrupción trató de influir en su decisión, ésta no lo consiguió, ya que Malak-Emeth y Tikvah no desviaron su atención de aquella Palabra que desde la Eternidad se les brindó, y pese a ser extraña les de una grata tranquilidad les otorgó, desvaneciendo de Tikvah esas inquietudes que le habían por largos tiempos perturbar, dando paso a un momento de serenidad el cual le permitió contemplar la Verdad, olvidándose de la tristeza y todo dolor para adorar al Eterno Creador, Quien después de las últimas Palabras que mencionó en silencio permaneció; permitiendo que ambas Creaciones tomasen su decisión, confiando en el sonido de su Voz que les había pedido unirse para cumplir así la encomienda que en el Principio les otorgó; un acto que Tikvah aceptó a pesar de ir esto en contra de lo que ella siempre pensó, haciéndolo para intentar lo opuesto en comparación a lo realizado anteriormente cuando dudó y en la Verdad no creyó, mas en ese instante prefirió ir en contra de sus pensamientos, desobedeciendo a la extraña voz presente vagamente en su interior, ello con la esperanza de volver a estar con su igual, sin embargo aún con la insistente y enigmática voz perteneciente a la corrupción que continuamente le insistió, mencionando que el obedecer a tal indicación sería un error, ello al contradecir lo anteriormente dicho por la propia Existencia del Eterno Creador, quien en el Principio habló para declarar que toda Esencia únicamente sería capaz de dar origen a algo más al unirse con su igual, agregando prontamente la falsedad que de esto realizar con la Mensajera de la Verdad, traería como consecuencia una desgracia similar a la causada por aquella Hejad establecida con Shekerh, la mensajera de la falsedad mas Tikvah esto decidió ignorar al no haber sido una voz extraña que lo mencionó sino la Existencia del Eterno Creador que le compartió tal indicación acompañada de una amena sensación; por tal motivo en su interior solamente una grata serenidad percibió, una calma que le hizo confiar en las Palabras procedentes de la Eternidad que en ese instante le ayudaron a contemplar una Verdad, ya que pese a toda evidente realidad, la brillante Esencia sintió que sin importar consecuencia ó situación, su existencia yacía Unida con su igual, pues serían dos en apariencia ante cualquier creación material, pero en realidad siempre serían UNA Hejad imposible de separar; siendo la seguridad en Tikvah que en esencia aún yacía unida con su igual, lo que le ayudó a Malak-Emeth comprender, ello fue el motivo que impidió la pérdida de Tavh, ya que su unión con Shekerh no fue por abandonar a su igual sino con intención de regresar al lugar y unirse finalmente con Alefh como así desde el Principio debió suceder: —Porque en tu interior has decidido obedecer a la Verdad, me uniré contigo para crear y las Palabras procedentes de la Eternidad se conviertan en realidad —Habló la Mensajera de la Verdad a Tikvah, tan pronto percibió una cálida sensación la cual en ese momento disfrutó, pues ésta le ayudó a recordar aquellos tiempos cuando yacía al lado de su igual antes que ésta última fuese atraída por la falsedad y todo llegase a su final, motivo por el cual la Esencia jamás se negó a realizar lo encomendado por El que Todo lo puede contemplar, pues se aferró constantemente a la Promesa de pronto conocer a su igual, esa Creación con la cual llegaría a prosperar.
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Melodías de Verdad
FantasyFragmentos de un pasado acontecido en una realidad totalmente diferente a la nuestra. Lo que yace entre las siguientes letras puede resultar insulso ó incongruente, sin embargo aquello que puede ser fantasía para nosotros, es realidad para otros.