Melodías de Verdad

El Propósito de la Esencia

Los tiempos no dejaron de avanzar mientras la corrupción no se limitó y compartió gran parte del conocimiento así lo consideró, pues el mantener la atención de Alefh fue su intención, motivo por el cual la Creación en ningún instante se apartó, desvaneciendose de su interior gran parte del recuerdo relacionado al Eterno Creador, pero nunca alejando sus pensamientos de Tavh, aquella Esencia a la que no dejó de culpar, permitiendo que ese rencor creciera hasta convertirse en el odio dominando su interior, ocasionando que la Creación fuese perdiendo ese intenso resplandor que en el Principio le distinguió, mas todo ello a la Nada le favoreció, pues dentro de la Esencia prevaleció la oscura corrupción, aumentando su fortaleza conforme Alefh apreció la pérdida de varios Birkath, ya que estos carecieron de la fuerza y Verdad que Alefh les hubiese podido brindar, más al permanecer la Creación mayormente aferrada a su rencor, esto le fue difícil de realizar, motivo por el cual ese odio hacia Tavh no dejó de expresar, pues según la realidad que Alefh como consideró como verdad, la Esencia que fuese su igual al haberse negado a formar una Hejad, le había impedido el poder ayudar a aquellos Birkath; sin embargo la Nada ocultó con falsedad toda Verdad para evitar que la Esencia pudiese reaccionar, provocando que el tiempo designado para la Creación llegaría con mayor prontitud a su culminación, y una vez llegado su final, al permanecer la Esencia sujeta con el rencor le sería difícil obtener redención, pues no será sencillo para cualquier creación el dejar atrás aquello que le llegó a perjudicar, siendo el triste final de Alefh algo que la Nada tanto esperó encontrar y lo cual no llegó a pasar, ya que la permanencia de la Creación debió continuar, pues así había sido declarado desde el Inicio de todo Principio por la Voz procedente de la Eternidad, ello tras mencionar que habría eventos los cuales se debían respetar porque el Eterno Creador así lo decidió.
Sin embargo aún cuando la Creación debió continuar y su final no llegó a pasar, Alefh tantas cosas comenzó a considerar, volviendo diferente su estancia en aquel lugar, pues inesperadamente la Creación declaró que no hubo encontrado motivo para prolongar esa encomienda que por propia voluntad se propuso a culminar, ya que tras haber contemplado por tanto a los Birkath, estos padeciendo de incontables sucesos difíciles de evitar, ocasionando que la Esencia llegase a creer y considerar la existencia de una posibilidad que pudiese ayudar a toda creación para alejarla de su triste final; pensamiento al cual aquella Creación se aferró, sin percatarse que ello le favoreció, pues repentinamente dejó de escuchar a la corrupción, permitiéndole esto tomar la propia decisión de dejar ese lugar carente de identidad, ello con la intención de viajar nuevamente por el Caos y su oscuridad en busca de otra Esencia que estuviese dispuesta a ser su igual, y así juntas fuese capaces de formar una Hejad, con lo cual les podrían brindar Verdad a los Birkath amenazados por un desafortunado final, liberando a cada creación de la enigmática corrupción, esto al ayudarles a perdurar y prosperar; por tal motivo la Esencia se retiró del lugar después de haber emitido una maravillosa Ubraia conformada por Palabras que alcanzaron la Eternidad, un detalle que los Elementos pudieron aprovechar, pues de tal Ubraia consiguieron la fortaleza para continuar, y esto llegó a pasar porque en aquella Ubraia no hubo tristeza ó dolor, sino una promesa que al Eterno Creador complació, ya que en ésta se mencionó una Verdad que por incontables tiempos permanecerá, Palabras de momentos mejores destacados por la tranquilidad dominando a los Birkath que Alefh dejó atrás y nunca de sus pensamientos se llegarían a apartarán, porque todo suceso contemplado en ese lugar continuaría con la Esencia hasta llegado su final, siendo la desafortunada imagen de los Birkath que encontraron su final, lo cual le provocó que la Creación volviese a escuchar con atención esa extraña voz resonante en su interior, ésta indicándole el supuesto camino por la oscuridad, pues Alefh llegó a considerar la ayuda por parte de la corrupción que poco a poco por el Caos le guió, ello con la intención de encontrar a otra Creación como igual y así formar una Hejad para ayudar a los Birkath, ya que a pesar de la desafortunada realidad, Alefh mantuvo en todo instante esa seguridad que le brindó fortaleza para soportar la soledad, pues conforme se alejó de ese lugar consideró en algún tiempo regresar, esto con la intención de mejorar la situación de toda creación material en ese sitio que deseaba nunca llegar a olvidar; debiendo Alefh tolerar tristeza, pena y aflicción con el único propósito de ser útil para algo más, ya que de perder su encomienda no le quedaría ningún motivo para continuar, siendo esto lo cual la Esencia consideró que ocasionaba a toda creación el perderse en la oscuridad para no volver jamás: —Toda creación presente en el Caos es mi motivo para continuar y realizar la encomienda que me brindó El que Todo lo puede contemplar, y si no hay Esencia dispuesta a ser mi igual, haré lo posible pero a toda creación material quiero ayudar, pues al final todo necesita una oportunidad para prosperar y realizar su propio propósito el cual le permitirá alcanzar ese lugar en la Eternidad —Declaró la Creación conforme por la inmensidad avanzó, en ningún momento dejando de recordar a Tavh, culpando a su anterior igual por la soledad que debió soportar, ello además del dolor y la aflicción, ya que la imagen de los Birkath llegando a su final, continúo entre los pensamientos de la Creación como así sucedió con el momento cuando Tavh se alejó hacia la oscuridad prometiendo regresar, fortaleciendo lo que Alefh consideró como palabras carentes de Verdad, pues al final no importó el daño que pudiese ocasionar, le pareció que Tavh solamente consideró su curiosidad y ese deseo que aparentemente le provocó incomodidad; situación que la corrupción aprovechó, ya que el rencor en la Creación solo se fortaleció, motivo por el cual Alefh se distanció del Eterno Creador y la Promesa que en el pasado se le otorgó, situación que la corrupción aprovechó, ya que gran conocimiento a la Creación le compartió, palabras extrañas que Alefh escuchó y lentamente de su propósito de su propósito se alejó pero éste jamás olvidó, porque a pesar del odio, la tristeza y el rencor, Alefh no permitió que ni aún la corrupción le alejase de su propósito y real intención; resultando siempre el encontrar a otra Creación como igual para que unidas pudiesen evitar la pérdida de cualquier Birkath ó Elemento material, motivo por el cual no dejó de avanzar en esa oscuridad, siempre recordando aquel lugar que como Atzuvh decidió nombrar, sitio al que la Esencia esperó poder regresar para ayudarle a prosperar.