El Principio de un largo camino hacia El Final

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De ésta manera, como así en el Principio aconteció, Tikvah nuevamente del lugar en donde fue creada se alejó, esto para comenzar a vagar en la oscuridad, dejando atrás un intenso resplandor y una sensación de tranquilidad, la cual aún tras el pasar de los tiempos permanecerá, como de igual manera llegó a pasar con su tristeza lentamente convertida en algo mas, sin embargo gracias a la Voz de El que Todo lo puede contemplar ésta consiguió controlar, y ello aconteció porque fue la Voz de toda Verdad que le guió por la inmensidad, ayudándole además a ignorar la falsedad; apartando a la insistente corrupción de los pensamientos de Tikvah que aún en ocasiones fue agobiada a través de un pasado el cual le fue difícil olvidar, ahora además de la realidad que debió tolerar, porque antes había tenido a la Mensajera de la Verdad que su compañía le pudo brindar, pero en ese instante al estar lejos de lo considerado como su lugar, solamente tuvo por acompañante a la soledad, ó ello le trató de inculcar la oscuridad conforme poco a poco la Esencia se acercó al sitio designado por el Eterno Creador, Quien toda Palabra necesaria le compartió.
No en silencio sino emitiendo diversas Ubraia, en todo momento prosiguió sin detenerse Tikvah, siempre contemplando a su alrededor, siendo testigo de grandes sucesos que causaron sorpresa a su interior, los cuales serían conocidos por otras que tratarán de comprender un poco más respecto a los secretos de lo material, muchas de éstas, creaciones de la Esencia que había cumplido su encomienda aunque la corrupción constantemente de todo lo contrario le acusó, pero Tikvah toda idea ó pensamiento simplemente ignoró, sin embargo a pesar de ello aquel trayecto lentamente en algo difícil de tolerar se convirtió, ello al ser conformado por pruebas y tribulación, todo enfocado al engaño que amenazó a la Creación para que volviese con la corrupción como así sucedió con anterioridad cuando prefirió satisfacer su curiosidad; mas Tikvah a ninguna emoción atendió, percatándose que resultaron ser Verdad las Palabras antes mencionadas por El que Todo lo puede contemplar, ya que la corrupción había realmente perdido su voz, y esto Tikvah lo descubrió porque a la Nada no escuchó, pero a pesar de ello sintió que aún la oscuridad amenazó su interior, al punto de provocar pensamientos y sentimientos capaces de hacerle dudar; aferrándose por causa de esto a El que Todo lo puede contemplar que avanzado el tiempo a la Esencia le comenzó a hablar, ello para compartirle un poco de Verdad, confirmando Tikvah que la falsedad no únicamente en el Caos logró deambular; sino también desde antes de el Principio cuando toda Esencia comenzó a vagar en la inmensidad, la corrupción en la Existencia de Tikvah surgida de la Última Ancestral siempre hubo llegado a morar porque así lo declaró El que Todo lo puede contemplar, mezclándose con Ésta para convertirse cada creación originada de su interior en una posible adoradora de la corrupción; una Verdad que simplemente impresionó a Tikvah y lejos de anhelar una explicación por parte del Eterno Creador, Tikvah comenzó a intensificar su exaltación, eso en agradecimiento por tan importante conocimiento, realizando maravillosas Ubraia que a través de estas, próximas creaciones la definición de incontables Palabras conocerán éstas emitidas por Tavh, en ese tiempo llamada Tikvah conforme viajó por la inmensidad, guiada en todo momento por la Voz de toda Verdad que le instruyó sobre grandes cosas las cuales llegó la Creación a valorar, pues gracias a esto su sabiduría logró aumentar, y con ello poco a poco se pudo transformar en la imagen de la Existencia de El que Todo lo puede contemplar que en ningún momento le dejó de hablar, desvaneciendo todo dominio y poder de la falsedad sobre la Esencia que atenta siempre escuchó a la Verdad, nunca protestando ó deseando tener un poco más, solamente guardando silencio conforme continuó moviéndose en la oscuridad, soportando el dolor de un pasado imposible de cambiar, manteniendo todo pensamiento en su igual a pesar que poco sobre ella fue capaz de recordar, sin embargo Tikvah se aferró a la esperanza que le brindó tranquilidad, pues contempló la posibilidad de dar solución a su mayor error y con ello quizás obtener redención.

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