Una nueva encomienda por realizar

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Cuánta culpa padeció Tikvah tras finalmente contemplar las consecuencias que llegó a causar por satisfacer su curiosidad y poco considerar a su igual, percatandose de cada equivocación que cometió y por ello anheló tanto enmendar su error, mas en ningún momento pudo dejar de pensar en cómo se había olvidado de su igual, esa Esencia que ya no vería jamás, siendo constantemente afligida su existencia por el recuerdo de los Birkath que también había dejado atrás, percatandose que no importó si ya le fue imposible escuchar las palabras de la corrupción, igualmente sabía que podía dominar su interior, lo cual le motivó para no dejar de agradecer a la Existencia del Eterno Creador, esto por la oportunidad de continuar aunque en su interior comenzó a dudar, siendo sometida la Creación por las consecuencias a toda decisión que en el Principio tomó, mas en ese momento la carga que padeció tan agobiante le resultó, sin embargo poco pudo realizar para cambiar aquello que por su causa llegó a pasar, resultando así la desesperación su mayor dolor; algo que la Mensajera de la Verdad le ayudó a soportar gracias a las constantes Ubraia dirigidas hacia El que Todo lo puede contemplar que con atención desde su alto lugar cada Palabra logró escuchar, más a pesar de ello ninguna acción decidió realizar, permitiendo que la corrupción tomase mayor presencia en el interior de su Creación; prosiguiendo todo de aquella manera hasta el instante que El que Todo lo puede contemplar con ambas Esencias decidió finalmente hablar: —Ha llegado el momento de continuar, pues tú tendrás que regresar, porque éstas creaciones a las cuales han llamado Birkath, serán testimonio de lo justo y correcto en medio de ésta oscuridad; por ello tú... —Dijo El que Todo lo puede contemplar al referirse a Tikvah que en ese instante yacía cansada su existencia por causa de tan intensa pena, la cual le hacía constantemente recordar toda equivocación que en el pasado realizó, y todo por ese deseo que no hubo considerado nuevamente, pero aún en sus pensamientos yacía presente: —… que ahora tienes gran aflicción en tu interior por haberte alejado de la Verdad, de ahora en adelante Yo te brindaré tranquilidad, pues tú que eres el final, a través de ti permitiré un nuevo comienzo el cual muchas decidirán ignorar y otras simplemente olvidar, pero para que esto llegue a pasar Mi Voz nunca deberás dejar de escuchar, pues estoy al guiarte al Bayith en donde por incontables tiempos permanecerás —En ese instante El Todo se dirigió hacia Malak-Emeth que en silencio permaneció, siempre contemplando a los Or que igualmente escucharon las Palabras procedentes del Eterno Creador: —Ha llegado tu tiempo para prosperar, pues aquello que Prometí finalmente lo podrás apreciar, sin embargo debes permanecer en este lugar porque otra Creación representando la Verdad llegará y tu le escucharás, porque solo hasta ese momento podrás continuar y así cumplir la encomienda que te indicaré realizar. No tengas preocupación por Tikvah porque le guiaré nuevamente a un lugar donde permanecerá en tranquilidad —Y así como fue declarado aconteció, Tikvah sin cuestionar su encomienda realizó, por ello poco a poco se retiró del lugar mientras la Mensajera de la Verdad decidió continuar y de ahí jamás se logró apartar, siempre cuidando cada creación de la absoluta oscuridad, mas a pesar del momento ninguna existencia sintió tristeza ya que El que Todo lo puede contemplar les otorgó tranquilidad para poder prosperar; alejando a la Esencia de toda corrupción, dándole descanso a su interior como así le había prometido el Eterno Creador, lo cual le ayudó para no ser confundida por cualquier emoción, pues sin duda Tikvah aún después de escuchar a El Todo hablar, permaneció con los Or, compartiendoles todo el conocimiento que tuvo respecto a los Birkath como última instrucción, padeciendo por momentos a causa de la nostalgia que se intensificó en el tiempo cuando aquella Creación de cada Birkath finalmente se despidió; así Tikvah emitió una maravillosa Ubraia dirigida hacia El que Todo lo puede contemplar en donde pidió una próxima oportunidad para regresar; dirigiéndose a los Etzah por medio de los Or que fueron su voz hacia las creaciones habitando en los Birkath, quienes pronto escucharon las majestuosas Ubraia de Tikvah, las cuales nunca olvidarán, de igual manera como la brillante Esencia siempre les recordará, pues aquellas creaciones surgidas de su interior representarán en todo momento una importancia imposible de ignorar, y así tantas maravillas mencionó en cada Ubraia conforme contempló a los Birkath antes de alejarse del lugar, palabras que resonaron con tal fuerza al punto de perturbar la oscuridad, porque a través de cada Palabra hubo algo más, un obsequio para los Birkath que más tarde sería conocido por algunos como Ubraia; Melodías llamadas bendiciones que incontables existencias crearán para adorar y agradecer a la Voz procedente de la Eternidad, mas en ese instante las primeras surgieron del interior de Tikvah y les otorgaron mayor fortaleza a los Or, esas creaciones acompañando a los Birkath llenos de diversidad que la brillante Esencia no dejó de admirar hasta continuar y perderse en la inmensidad, pero esto no le perturbó al tener la certeza que todo concluiría de acuerdo a la Palabra del Eterno Creador, pues IA así lo declaró.

Melodías de VerdadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora