No podía mantenerme concentrada, en mis labios todavía quedaban pequeños rastros de sus besos, la forma en la que me miraba era dominante, me pregunto si en la fiesta me hubiera mirado igual si supiera que yo estaba detrás de ese antifaz, el deseo que me generaba era mayor al de ese día, pero hasta no estar segura de quien es en realidad, no intentaría otro tipo de contacto con él.
A los pocos minutos de haberse ido Deamon llego Asher, me alegraba haberlo sacado de ahí, tenía razón en algo, lo que quería no era lo mismo que le estaba pidiendo, aun así, preferí alejarlo, no por mí, por mi familia y el riesgo que todos podíamos correr si las personas conocían mi pasado. ¿Quién podría estar orgulloso de un pasado así?
Por el momento solo quedaba intentar buscar información, ahora tenía una pista para saber más de él, no sabía cómo empezar a buscar, pero tenía que ingeniármelas rápido antes de darle su cartera. Si tenía la foto de esta niña tenía que ser alguien importante para él.
—Katy necesito hablar contigo—escuche la voz de Diana detrás de la puerta y puse la foto en la cartera, la arroje debajo de mi cama, no quería que nadie pudiera verla— ¿ya se ha ido?
—¿Quién? —esperaba que me estuviera jugando una broma.
—Tengo más años que tú, y también vi su carro aparcado en la entrada, sé que es el mismo chico de las flores —¿por qué me estaba pasando esto a mí? — no te preocupes por mi yo no diré nada, estas en todo tu derecho de estar con quien tú quieras, solo que estoy un poco preocupada.
No sabía que decirle o que responder, me sentía como niña pequeña descubierta robando un dulce, solo que la sensación era mil veces peor, prefería callarme y dejar que procediera, no tenía caso mentirle y decirle que estaba equivocada, había visto su carro y tal vez había escuchado algo.
—Te escuche pelear con Asher por este chico —Deamon no se estaba haciendo la mejor fama con mi familia— solo quiero saber que es buen chico y que te va a tratar bien— me volví a quedar callada.
Si se refería que me trataría bien como lo estaba haciendo hace un momento en mi cuarto, no podía negar que lo estaba haciendo muy bien, pero no pasaría más que eso, Deamon no era el tipo de chico con el que a tus padres les gustaría verte casada, ni yo era el tipo de chica de ensueño, lo único bueno a nuestro alrededor eran esos pequeños momentos en los que podíamos tocarnos, un fuego se encendía cuando estábamos envueltos en esas situaciones, pero era todo. Cuanto más recordaba sentía como el calor se acumulaba en mi rostro.
—Cuida de ti Katherine, eres una buena persona y no mereces menos —Diana estaba muy equivocada, yo no era buena persona ni lo seria, y Deamon no era más que un chico que aumentaba mis deseos y mis latidos
Diana se acercó para poderme abrazar y la deje hacerlo, me asustaba el gran cariño que me tenía y la forma en la que me veía, había muchas cosas malas conmigo, pero no me gustaba que no las pudiera ver, y que me viera como una "gran persona".
Salí de mi cuarto para ir con Asher y poder platicar del juego, también para saber si les ha avisado a mis padres, sabía que su respuesta sería un "no, tenemos cosas más importantes que ustedes", la verdad es que pensándolo bien prefería que fuera Mario, Diana o Denise antes que ellos.
—¿Puedo pasar? —me abrió la puerta para que pudiera entrar, se le veía cansado y sudado.
—Pasa— su playera estaba en la cama, la sostuve un momento ya que mi plan era ponérmela e imitar algún movimiento de fútbol, pero estaba sudorosa y la solté.
—¡Agh que asco!, ¿sabes que la ropa sucia va a el bote de la ropa sucia, no en la cama? —se puso en posición y corrió hacia mí, como si intentará taclearme.
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No Más Juegos
RomansaA través del tiempo me he dado cuenta que los errores que repetidamente cometemos pueden delimitar nuestro pasado, y cuando intentas escapar de él te llevas un fragmento al presente, pero no imagine que lo que tendría en este nuevo comienzo sería De...