Capítulo 28: Remus y Lorelai Lupin.

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Remus Lupin tenía una vida relativamente tranquila, para cualquiera que lo viera pero en realidad tenía muchos secretos.

La verdad es que Remus Lupin era un mago, él vivió los últimos 8 años con los muggles y se alejó completamente del mundo mágico, ya que este le había decepcionado demasiado. Pero llegó un momento en el que tuvo que dejar atrás su pasado y enfrentarse de nuevo a la magia, lo haría por ella.

Por esta razón él había decidido mudarse a Estados Unidos y contemplar el colegio IIvermorny para mantenerla a salvo, y por esa misma razón no se sorprendió mucho cuando recibió una carta de Hagrid, después de todo ambos lo habían previsto.

¨Remus

Hola, Remus he tenido mucho tiempo sin saber de ti, espero me recuerdes soy Hagrid el guardián de llaves de Hogwarts? Bueno espero que sí, la verdad escribo para pedirte un favor, los pequeños Harry y Evangeline se han hecho muy cercanos a mi últimamente y sucede que ellos no recuerdan a sus padres y no tienen ninguna foto de ellos, así que quisiera crearles un pequeño álbum antes de que termine el año escolar y pensé que tu podrías ayudarme.

Entenderé si no quieres saber nada más.

Saludos Hagrid¨

De repente los recuerdos inundaron a Remus, recuerdos que él había intentado enterrar los últimos diez años, salieron a la luz.

Recordó al pequeño niño de ojos verdes que él adoraba, a la pequeña niña con ojos tiernos y amorosos, ambos siempre con una sonrisa encantadora que regalaban siempre que la persona fuese buena, pero hasta el juicio de los pequeños Eva y Harry fue equivocado, Sirius Black el mismísimo padrino del niño los había traicionado de la peor manera posible, había vendido las vidas de sus mejores amigos a quien había jurado siempre estar en contra, pero las raíces siempre llaman ¿cierto?

Remus aunque nunca lo admitiría en voz alta tenía una pequeña esperanza de que este fuera inocente, pero la lógica y la razón lo destruían, las pruebas eran abrumadoras, pero este mismo rayo de esperanza era el que le había impedido decirle al ministerio a siquiera a Dumbledore que Sirius Black era un animago y dudaba que ese secreto saliese algún día a la luz después de todo 6 de los que sabían tres están muertos, otro se pudría junto a los dementores, de la otra no sabía absolutamente nada desde que decidió tomar a sus dos hijos y desaparecer y él nunca le diría a nadie.

Se sorprendió cuando se dio cuenta que de hecho tenía algunos años sin desplomarse como lo estaba haciendo justo ahora. Pero a su vez sabía que todo se lo debía a ella...

A su pequeña ahijada e hija adoptiva... la cual se la conoce por su apellido pero él, Dumbledore e incluso la pequeña niña sabían la verdad, que ella era una Potter Evans de los pies a la cabeza, con su hermoso cabello pelirrojo, sus adorables pecas y sus ojos castaños lograba encantar a cada ser vivo que cruzara por su camino, ella, Lorelai Lupin, quien a sus 13 años asistía al colegio IIvermorny en Estados Unidos, no sabía absolutamente nada sobre la carta, Remus sabía que al descubrirlo querría ir corriendo hasta donde se encontraban sus pequeños hermano y hermana. Ya que según ella había llegado el momento.

Se preguntó como estarían los mellizos, ahora mismo debían estar en Hogwarts, divirtiéndose con sus amigos. Se preguntó cómo serían? Bromistas, encantadores y divertidos como su padre o listos, cultos y algo tímidos como su madre, Remus no sabía que esperar.

En cuanto a la petición de Hagrid estaba más que dispuesto a darle un par de fotos de sus padres, él mismo las tenía a montones y nunca se atrevía siquiera a echarles un vistazo, comparado con la pequeña Lory que todos los días observaba las fotos que llevaba siempre consigo en su relicario mágico en forma de corazón que había heredado de su madre, en el cual se encontraba una foto de ellos cinco en su última navidad, la joya también era mágica por el hecho de que resplandecía una tenue luz de diferentes colores correspondiendo a su estado de ánimo.

Soulmates: la piedra filosofal.//TERMINADA.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora