Miles de palabras, una sola vida.

"Quizás..."

Quizás, está bien no estar bien, no siempre estás en lo más alto, a veces toca pasar por el proceso de transición, también nos toca afrontar los días nublados a solas, hay ocasiones en la que nos sentimos indispuestos a enfrentar un nuevo día, puede que no quieras tomar el riesgo o dejes de decidir en un determinado momento, y eso no significa que te hayas rendido o tengas una mala vida; sólo es un tramo oscuro, qué también es parte de esta historia, no siempre estará mal haber abandonado tu recorrido, si al mismo tiempo te estás salvando a ti mismo, porque no siempre seguir caminando será lo correcto, cuando más adelante pueda esperarte un abismo.

Quizás, no todo sea como quisiéramos, porque parece mentira, pero muchas veces todo sale exactamente como no lo habíamos planeado; lo que menos esperas es lo que llega primero, aquello a lo que siempre le has huido es lo que te espera más adelante, y sí, no podemos manejar ciertas situaciones, e incluso, hay circunstancias que ni siquiera podemos cambiar, pero debemos aprender a vivir con lo opuesto e inexplicable, para valorar los momentos de gloria y las caricias.

Quizás, pienses que el amor se haya ido para siempre y que sólo queden fotos o recuerdos felices, qué al final, creas que nunca existieron tales experiencias, porque en tu presente ya se han esfumado todos esos sentimientos, pero tal vez, la realidad sea muy distinta a lo que piensas, porque puede que se hayan ido todos los motivos que te daban una señal de amor, pero probablemente nunca te percataste, de qué la mayor señal del amor, es estar vivo y haberte levantado con una nueva oportunidad para comenzar de nuevo, y así, regalarte algo mejor que aquello que se ha ido, no obstante, lo mejor de todo sería darte cuenta que el verdadero amor comienza desde adentro, ese llamado “amor propio”.

Quizás no estés preparado para ciertas circunstancias, tal vez aún no tengas la suficiente experiencia para enfrentar lo que está del otro lado, es posible, que no te sientas completamente listo para comenzar un nuevo rumbo o de pasar una página más en tu vida, pero de lo qué siempre deberías estar seguro, es que tienes las herramientas necesarias, la valentía y la determinación para poder atravesar cualquier prueba que tengas al frente, no hay barreras que estén por encima de tus capacidades, sólo debes tomar tu determinación y las decisiones que acerquen a los grandes sueños.

Quizás, no siempre lo que se va te da alguna señal, tal vez sólo se vaya sin aviso y cuando menos lo esperas, probablemente, nunca estaremos preparados para las despedidas en esta vida pasajera, dónde todo va y viene, porque puede ser que lo podamos ver llegar y saber el día exacto en qué percibimos las cosas, pero no estamos seguros de su partida ni a veces tenemos la idea de cuando se pueda esfumar todo lo que logramos poseer.

Quizás, esa persona si era el amor de tu vida, pero tu no eras el amor de ella, suena algo ilógico pensar eso, sin embargo, hay amores que juegan a ser masoquistas y otros más, a ser algo que nunca fueron; no siempre tendrás lo que quieres por ciertas razones, en ocasiones, aquello que vemos como el sueño prohibido, tal vez no se hizo real, porque probablemente ese sueño te iba a dejar atrapado en una pesadilla sin salidas, en resumen; era lo que soñabas, pero no era lo que te correspondía.

Quizás, no obtuvimos el resultado que esperábamos en un cierto momento, pero tal vez era lo más conveniente en esa etapa o en ese proceso de tu vida, recuerda todo tiene un propósito, tanto aquello que pasa, cómo aquello que nunca pasó y nunca fué, pero absolutamente todo cumple una función en tu vida, aunque nunca entiendas la razón.

Quizás, un tal vez, sea posiblemente lo que nunca fué, pero a lo mejor, la vida no se trata de suponer y de esperar aquello que probablemente nunca llegue, sino, de enfrentar con valentía nuestra realidad, aunque esta sea totalmente distinta a lo que soñabamos y exactamente lo que nunca quisimos.

“Quizás, todos tus límites y todos tus miedos se derriben, cuando tomes la determinación de dar ese salto y tomar ese riesgo, porque la realidad de la vida no está llena de ciertas probabilidades ni de supuestas suposiciones, hasta que no te enfrentes a la vida en su esencia, nunca podrás hallar la respuesta”

Autor: José Baute