Me gusta el desastre en ti

195 28 1
                                    

El lunes tras ese fin de semana, Louis se levantó más temprano de lo acostumbrado, preparo el desayuno y se alistó y luego fue a despertar a Harry.

-Harry?

El chico lucía cansado, tenía grandes ojeras y rastros de llanto, era evidente cuando se sentía mal.

-Harry, despierta

Harry se despertó y tallo sus ojos para intentar despertar del todo.

-Quieres qué te traiga el desayuno?

Harry lo miro tímidamente y asintió, así que Louis fue a servirle y traerle el desayuno, mientras el rizado tomaba un baño rápido y lavaba su dientes.

-Ohhh ya estás listo, es perfecto, así podremos ir a la escuela

Louis le dio el desayuno y Harry lo miro con temor

-No quiero ir

Dijo el chico con un semblante de tristeza, por lo que Louis lo miro con sorpresa y desorientación.

-Por qué? Te sientes mal?

Harry negó y comenzó a comer su desayuno sin decir mucho

-Harry sabes que estamos a nada de terminar este corte, te ha ido muy bien y es importante que vayas para comenzar a mirar lo de la universidad

-No quiero ir y ya le dije que no tengo el dinero para una universidad

-Bien entonces...no vayas hoy, pero mañana...

-No quiero volver más

El ojiazul cambio su semblante y miro al chico que comía en silencio

-Puedes al menos darme una razón?

Harry no respondió, el solo termino su cereal y siguió bebiendo de su café, ante lo cual el ojiazul recordó la conversación que había tenido con sus padres hace unos días

-Es por tus padres?

Harry lo miro y trato de buscar una respuesta a lo que Louis decía.

-Te escuché hablar con ellos por teléfono

Harry solo suspiro frustrado, el no entendía que había hecho para merecer una familia como la que el tenía, no entendía porque ahora su maestro, el chico que le gustaba le preguntaba al respecto.

-Escucha Harry, yo sé que no somos lo suficientemente cercanos, pero aún hay muchas cosas que no entiendo de ti y quiero ayudarte

-Con qué fin? creo que ha sido bastante claro en qué no le interesó y no quiero agobiarlo con mis problemas, ya suficiente tiene conmigo en su casa

Si, Harry se había salido por la tangente, pero quién podría culparlo? El trataba de lidiar con tantas cosas, consigo mismo y dentro de esos problemas estaba su maestro, no es como si pudiera usar otra máscara que la defensiva.

-Harry no es que no me intereses, es solo que no es de la manera qué piensas

El rizado dejo la bandeja con los platos en la mesita de noche y se cubrió con la manta mientras le daba la espalda

-Pero usted a mi sí y no creo que deba hablar con usted de mis problemas, cuando usted hace parte de ellos

Mierda! Louis no esperaba esa respuesta, no esperaba bajo ninguna circunstancia escuchar que él era uno de sus problemas, sabiendo lo que había sucedido. Así que solo se levantó y tomo la bandeja con la loza sucia y se marchó.

Su día transcurrió como de costumbre, dictando clases y pensando en el rizado y en sus acciones y palabras mientras Ángela se le insinuaba como siempre, la diferencia es que está vez tenía algo más que pensar, en su tiempo siendo profesor Louis no se sintió atraído por una chica o un chico, Ángela era hermosa y la definición de sexy, pero el se sentía incomodo cuando ella se le acercaba con dobles intenciones, con el chico de rizos simplemente era distinto, al punto de que no había podido olvidar sus labios, al punto de que lo anhelaba aún con toda su altanería.

Mr. MoralidadDonde viven las historias. Descúbrelo ahora