|Cap ₁₀|La luna está hermosa.

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Posé mis manos en su pecho y lo aparté de mí, no quería ni podía tenerlo cerca.

—Se acabó el juego —dije, mirándolo a los ojos.

—¿Jugábamos?

—Debí suponer lo que intentarías hacer —desvié la mirada, mordiendo el interior de mis mejillas, inquieta.

—No estoy intentando algo para perjudicarte.

Sonreí con ironía.

—Necesito salir de aquí —comencé a subir las escaleras, apresurada.

—___.

—Ni si quiera sé por qué vine —tomé mi bata—. Así debes ser con todas, ¿no? ¿También con las chicas como yo que tienen novio?

—No es verdad.

Nos vimos a los ojos.

—Claro que lo es —negué con la cabeza—, pero ya no importa.

Y salí de ahí, mojando todo el suelo a mi paso, llegué al ascensor y subí a mi habitación. Tensé mis manos con enojo y algo de decepción.

Entré al cuarto y lancé mi bata al suelo, me senté en el piso, apoyando mi espalda en la cama, flexioné mis piernas, para así esconder mi rostro entre las mismas.

Me sentía culpable, no quería lastimar a Min Ho, a pesar de la discusión y la forma en que me hizo sentir, sabía que yo no podría hacerle pasar por algo parecido.

No está entre mis intenciones lastimar a alguien que quiero.

No quería mentirle más.

No quería alejarlo de mí, no podría dejarlo, y me dolía hablar tantas falacias.

Miré mi celular que estaba encima de la mesita de noche, y lo tomé entre mis manos, mientras mis piernas temblaban.

Inicié una llamada por Skype, luego de dos tonos, contestó. Sus ojos estaban hinchados y su piel parecía rojiza, él sorbió su nariz.

Min Ho había llorado.

Al principio, los dos nos quedamos en silencio, ninguno se atrevió a emitir alguna palabra, sólo nos miramos.

—Lo siento mucho —empecé.

—No, tú perdóname, jamás debí hacerte sentir así, fue estúpido y no sabes cuánto lo lamento.

—J-Jamás debí proponer eso, también fue estúpido de mi parte... —dejé algunos cabellos tras mi oreja.

—No, ___, está bien, ya pasó, nunca más hay que hablar de esto.

—Sí, eso creo... —desvié la mirada al suelo y agregué en un susurro—, fue estúpido.

—¿Estás bien?

—Claro —di la mejor sonrisa que pude.

—Sabes que te amo, ¿verdad? Jamás haría algo para lastimar tus sentimientos.

—Sí, Min Ho... —asentí.

—¿Dónde estás?

—En Miami.

—¿Miami? —abrió grande sus ojos—. ¿Con tu mamá?

—Sí, claro.

—¿Alguien más?

Mi madre y yo apenas teníamos dinero para pagar la renta, era obvio que no podríamos costear un viaje a Miami, sin antes quedar en la calle.

—Bueno... —dudé en responder, pero no planeaba mentir más—. Ya sabes, con el director y su hijo, también la abuela.

Filoaster | JJK [+21][✔] ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora