Filoaster | JJK [+21][✔] ©

|Cap ₁₉|Nuevas sensaciones.

El suelo de la sala cruje con cada paso que damos, y es porque estamos en mi casa. El aire es abrasador, quizá porque respiro las constantes exhalaciones que me entrega su boca y nariz. Caminamos a pasos torpes y exasperados, él agarra mi chaqueta y la desliza por mis brazos hasta caer al suelo.

Jungkook posa mi espalda sobre la pared del pasillo, apega su boca a mi cuello, en aquella parte exclusivamente erógena de mi cuerpo, donde lame, muerde mi piel, estimulando simultáneos escalofríos incontrolables, desatando los vellos de mis brazos, azarándome, haciéndome saber que su lengua sobre mis lunares me tiene así, idónea para su seducción.

Deslizo rápidamente su chaqueta y cae cerca de la mía. Jungkook frota su mano por mi pierna derecha y la levanta a la altura de su cadera, su otra mano me tiene agarrada del cabello mientras me besa la boca.

Suspiro sobre sus labios y él sonríe, restregando su pelvis por mi ombligo, una y otra vez hasta hacer notar una cercana tensión dentro de su pantalón. Mis manos bajan a ese lugar, y siento lo inevitable. Mis dedos abrazar su grosor, y abro mis ojos con asombro.

¿Es que acaso aquella noche no pude notarlo bien? ¿Es normal tener el pene tan grande? ¿Jungkook tiene que pagar asiento doble cuando se sube a un autobús? ¿Ésta cosa acaso tiene pasaporte?

Vamos, ___, sólo es un pene.

Un pene que podría atravesarme en dos.

Al menos morirás feliz, zorra.

Mis manos desabrochan el cinturón rodeando sus caderas, y bajo su cremallera. No aparto el contacto visual mientras deslizo el pantalón por sus piernas, porque sé que lo vuelve alienado. Oh, sí, a Jungkook le vuelve completamente loco el contacto visual, sobre todo cuando no simplemente lo miro a los ojos, también acaricio su pene y le fascina.

Pero, de pronto, sus acciones son descontroladas, no sé lo que hace. Lo veo totalmente acelerado, apegando demasiado mis caderas a las suyas, mientras pasa descaradamente su nariz por mi cuello, bajando por mi pecho y resollando con agresividad. No lo resiste más y es ahí donde sus dos manos agarran mi camiseta por el pequeño escote que tenía en medio, y lo raja completamente, sin piedad, como si tuviera miles de camisetas y no me importara el estado de ésta.

¡Vamos, no soy millonaria!

Mis músculos se tensan, pero cuando él me ve a los ojos, repentinamente la camiseta me importa una mierda y sólo veo oscuridad lujuriosa en lo recóndito de sus dilatadas pupilas, como si nunca hubiera visto un par de tetas dentro de un sostén con encaje.

Me examina con deseo, y lo vuelvo a besar, mis manos se aferran con fuerza a los cabellos de su nuca, y gime en mi boca. Jungkook baja nuevamente a mis pechos y los lame, sacándolos a cada uno del sostén, sus labios aplican absorción en mi pezón y gimo también, con dolor. Y me encanta, me encanta de la manera menos inexplicable que alguna vez podría sentir.

Con morbosidad me ve a los ojos, lamiendo en círculos alrededor de mi aureola, dejando totalmente mojada aquella zona, sólo por el efecto de su saliva. Por otro lado, sus manos juegan con el cierre de mi pantalón y lo baja junto con mis bragas.

Me exalto sin querer. Además de Min Ho, nunca alguien ha sacado aquella prenda, y me siento terriblemente ansiosa.

Mis pies dejan a un lado mis pantalones, y Jungkook baja los suyos. La erección que carga es inmensa, su glande toca mi estómago y hundo la panza al sentirlo. Nos besamos otra vez, mientras él me carga en sus brazos y mis piernas rodean su cintura.

El pene de Jungkook roza los pliegues de mi sexo, juntando su líquido pre-seminal con mis fluidos. Nos estamos mojando, me siento húmeda y él lo nota con claridad, así que baja su derecha a mi intimidad y la acaricia con sutileza. Nos miramos a los ojos, mientras sigue acariciándome, y entonces recuerdo que no tenemos un preservativo a mano, y aunque me cuido con pastillas anticonceptivas, lo que importaba para mí eran las ETS.