30 Días

DÍA DIECISIETE

ADVERTENCIA: ESTE CAPÍTULO CONTIENE +18 EN EL CONTENIDO QUE SE ENCUENTRA ENTRE ESTOS SÍMBOLOS: ♡♡♡. ESTEMOS CLAROS, VAS A LEER IGUAL, PERO POR MI NO QUEDÓ.

Nacemos para tres cosas: Joder, Ser Jodidos y Levantarnos para seguir Jodiendo.

♡♡♡

La sonrisa que me dedicó se me antojó jodidamente sexual. Mierda, si sigo así, llego al clímax antes de que me haya tocado siquiera.

Su boca vuelve a atacar la mía, y busco el poder necesario para apartarlo de mi y exigirle que le dé atención a otras partes de mi cuerpo.

－¿Podrías...－me besa－ acabar...－otro beso－ la tortura?

－Si tus labios no fueran tan apetecibles y provocativos...

Suelta un jadeo de sorpresa cuando lo tumbo hacia el otro lado de la cama y me acomodo encima de él. Ya me harté de esperar tanto. Comienzo a deshacerme de su bóxer con su ayuda y muerdo mi labio inferior al tener su miembro duro expuesto frente a mi.

－¿Ves algo que te guste?－comenta divertido.

Antes de que vuelva a hablar, lo tomo entre mis manos y comienzo a masajearlo para luego lamerlo. Vaya, hacía tiempo no tenía sexo. Esto es como volver a nacer.

－Fuck－ maldice con voz ronca y sexy cuando mis labios son los que hacen el masaje.

Me atrevo a subir la vista para verlo directamente a sus ojos, que me miran como si fuera lo más sexual del planeta. Con su mano, toma mi cabello de forma brusca moviéndome a su placer, lo cual nos hace gemir a ambos. En el instante que suelto su miembro porque lamentablemente soy humana y necesito respirar, él vuelve a tumbarme sobre la cama y a tomar ventaja en cuanto a posiciones.

－No me interesa correrme en tu boca－mira mis labios－, o al menos no aún－y la sencilla idea hace que suelte un jadeo.

Me saca el sostén y empieza un tortuoso recorrido desde la comisura de mis labios. Pasa por el cuello, lamiendolo. Sus manos se encargan de quitarme las bragas. Sus labios llegan a mis pechos desnudos. Mis gemidos son incontrolables. Juguetea antes de continuar el camino hacia abajo, de forma lenta y tortuosa, lamiendo mi ombligo de forma tal, que si no estuviera tan caliente, de seguro me abría provocado cosquillas. Y cuando al fin se acerca a la zona que tanto reclama atención... el muy hijo de puta lleva sus labios a mis muslos.

Suelto un gruñido en protesta, sin fuerza para abrir los ojos.

－¿Quieres que te bese ahí?－me pregunta sexualmente y yo solo atino a asentir－. Mirame Alicia－ suspiro pesadamente y lo miro. Mierda. Luce tan serio y ardiente a la vez－. ¿Quieres que bese, lame y chupe tu coño?

MI-ER-DA. Operación recordar como respirar paso uno.

Solo asiento mirándolo.

－No te escucho－cabrón－. ¿Quieres que..?

－Sí, joder. Sí quiero Christian－lo interrumpo, no estoy preparada para escuchar eso de nuevo. Él me sonríe perversamente antes de meter su cara entre mis piernas, haciéndome arquear la espalda. Rara vez me abro así de piernas con alguien, pero ahora mismo, me arrepiento de no haberlo hecho antes con él. Sus labios lamen y chupan de tal forma que me lleva a la locura.

－Oh Dios－jadeo. Él deposita un suave beso ahí (electrificando cada parte de mi cuerpo) antes de mirarme.

－De Dios nada Alicia, que él no te está haciendo gemir así－ trago grueso ante su comentario. Su ojos oscuros de naturaleza, están a un paso de volverse negros.