DÍA VEINTICUATRO

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Cuando encuentres a esa persona que por más que intentas apartar, permanece a tu lado... ahí es.

Tengo un dolor de cabeza de muerte, en toda la noche no conseguí dormir más de 30 minutos en total. Me siento mal, tengo hasta náuseas, lo cual es raro porque llevo muchas horas sin comer nada.

Ni siquiera puedo revisar el celular para calmarme, ya que mi idiotez me llevó a romperlo. Ahora mismo, solo desearía que el puto adelantara la tortura y acabara con mi existencia de una vez y por todas.

-Ten-Jordan me da un vaso con agua y una aspirina, le agradezco con la mirada-. Tía, nunca te había visto tan grave. ¿Quieres que llame a Lore o el chico ese con el que andas?

Intento sonreír, porque si Christian oye eso no le haría ninguna gracia.

-Tranquilo, estaré bien-y con esas palabras no solo lo tranquilizo, si no que también me despido.

***
Decidida a que ya no valía la pena seguir retrasando esto, me encuentro frente a mi fraternidad, un poco más calmada pero ciertamente no preparada para enfrentar a todos.

Me duele que la fortaleza que tantos años estuve construyendo, haya caído por un simple mensaje. Me duele y me decepciona de mi misma.

Convencida de que es mejor, entro por la parte trasera, a escabullidas en mi propia casa (casi, he estado viviendo aquí más de un año). Genial.

Al acercarme a la sala, le presto atención a las voces.

-Por última vez joder, revisé hasta debajo de las piedras-dice Richard, enfadado-. No hay rastro de ella.

-Exacto, llevamos toda la noche buscando en cada rincón y nada primo. Es como si se hubiera esfumado-esta vez habla Jean y suena agotado aunque preocupado.

-¡Me importa una mierda si se cansan!-espeta Christian-. ¡No tenían derecho a hacerme venir con una mentira!

-¡Si te dijimos que Alicia ya estaba aquí, es porque llevas más de diez horas buscándola!-le grita Mónica-. Tienes que descansar, joder.

-¿¡Qué parte de que puede estar en peligro no entienden!?-dice histérico-. Vamos Lorena, eres su amiga. ¡Deberías apoyarme en esto!

-¡Y estoy preocupada por ella!-dice, con rastro de llanto en su voz-. Pero no sé que más hacer, y Alicia es lo suficientemente mayorcita como para sobrevivir.

-¡¡Joder que no entendéis una mierda!!-grita furioso-. ¡Estoy seguro de que puede correr peligro afuera sola! ¡Que lo que leí no sonaba a un juego! ¡No entiendo como podéis estar tan tranquilos!

Hay un silencio momentáneo en la sala, hasta que Richard vuelve a hablar.

-Creo que deberías afrontar la opción de que tal vez, se cansó de todo y sencillamente decidió irse sin mirar atrás-lo dice despacio y me asomo para ver a Christian negando con frustración.

-Tú mismo dijiste que tal vez...-Matthew intenta hablar pero él lo corta.

-Escuchadme-noto como se esfuerza en sonar calmado-. Dejen de repetir que tal vez se fue por voluntad propia, porque cuando alguien hace eso no forma un tornado en su habitación-suspira antes de continuar-. Créanme, seré el primero en aceptar si decide irse, pero estoy 100% seguro de que algo le ocurre, algo malo, y no estoy dispuesto a esperar sentado mientras ese algo sucede.

-A penas la conoces desde hace un mes Brian-le dice Ross y me sorprende el hecho de que por primera vez, lo llaman por uno de sus nombres en presencia de alguien fuera del grupo. Lorena incluso frunce el seño-. ¿Cómo puedes estar tan seguro?

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