-Si les voy a contar parte de mi historia tendrá que haber una simple regla-dije levantando tres de mis dedos de mi mano izquierda.
-¿Y cuál es?-pregunto Nick antes de comer una papa.
-No hablaran hasta que yo lo diga, ¿entendido?-pregunte alzando una ceja, todos asintieron a los pocos segundos.
Agarre la caja y le saque de encima la tapa, no deje que nadie se acercara a ver que había, para yo poder tomar un par de fotos y dejarlas en medio de la mesa.
Chase fue el primero en toma una y observarla, después se la paso a Nick y él se la paso a Hannah y así fueron sucesivamente con todas las fotos que había dejado en la mesa.
Todos voltearon a verme desconcertados por las fotos y fue cuando me acomode en la silla y hable.
>>>Al ser abandonados por nuestros padres en el "Roman Children's Orphanague" todo en mi vida se descontrolo. Cuando adoptaron a Chase seis meses después de haber entrado, fue la última vez que lo vi, nunca volví a contactar con él, tener noticias de él o ni siquiera sabía si seguía viviendo en el mismo país que yo.
Los meses que siguieron sí que fueron difícil, las fundaciones nos daban cada vez menos dinero para poder alimentarlos, las niñas empezaron a desaparecer, los niños tenía prohibido acercase a un niña, las clases cada vez eran más tediosa, la comida a veces estaba vencida de caducidad, los techos empezaban a tener agüeros, la plaga de ratas se hizo cada vez más grande, las enfermedades de todo tipo inundaron toda el ale oeste.
En otras palabras, el orfanato decayó, casi se iba a cumplí un año desde que yo llegue al orfanato y casi diez meses desde que Chase se alejó de mí.
A los últimos meses de ese año, habían quedado alrededor de doce hombres y seis mujeres, de los cuales la mayoría en los hombres eran adolescentes y en las mujeres eran niñas de cinco, seis y cuatro años.
El último día que recuerdo haber estado en el orfanato, fue cuando un grupo de no más de tres señores jóvenes vestidos casualmente pero elegantes fueron a visitarnos. Nos obligaron a ponernos por edades en una fila en el pequeño comedor que teníamos.
Los señores pasaron varias veces alrededor nuestro para después ir escogiendo a niños, uno de los señores tome a dos niños de la edad de seis años, el otro tomo a otros dos niños de cinco años, y el último fue el que tardo más en escoger.
Se quedó viendo a cada uno de mis compañeros, quedaban pocos niños y si no escogían algunas niñas, seriamos mandas a un lugar peor que este. El señor se paró enfrente de mí y me observo de arriba hacia abajo para después tomarme y ubicarme a su lado.
Después de eso nos fuimos para siempre del orfanato. No había escogido a otra niña más que yo y los otros cuatros niños, nos subieron en una camioneta y nos sacaron de ese lugar para siempre.
Estuvimos casi tres días viajando a un lugar desconocidos para todos excepto para los señores, en ningún momento hable con los otros niños, nunca pregunte su nombre y nunca me importo.
Al tercer día por fin habíamos aparcado, el lugar era enorme, era una granja con muchos animales y con muchas casas pequeñas. Cada señor tomo consigo a sus dos niños y se los llevo dejándome a mi sola con el más grande de los tres.
Me dirigió hacia una pequeña casa color rojo oscuro, que consistía en dos pisos, con dos recamaras donde solo había un cama y un pequeño closet, la cocina era solo una estufa y un refrigerador, la sala era un sillón y un televisión pequeña, solo había un baño y por ende solo había una sola puerta para poder escapar.
Aquel señor me dio un ropa cómoda y limpia, lo que no había tenido en muchos meses, me alimento y me dejo descansar unos días. Al cumplir las dos semanas dentro de ese lugar fue cuando empezó todo>>>
ESTÁS LEYENDO
Ella la... ¿chica mala?
Teen FictionElla no es definitivamente normal. Ella sobre pasa la locura y el peligro al mismo tiempo. Ella no es como las otra chicas, no le importar ensuciarse. Ella simplemente es única. Un cambio se necesitó para que volvieran a topar caminos. Él es un chi...